Trabajo Práctico Integrador de Historia

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La Argentina entre 1966 y 1976

En 1966 en la Argentina se produjo un Golpe de Estado organizado por los militares Pistarini, Álvarez y Varela, en el que se nombró Presidente de facto a Juan Carlos Onganía. Éste derrocaría al entonces presidente Arturo Illia y adoptaría medidas reformatorias en el marco social, político y económico; dejando huellas de la dictadura que perdurarían por muchos años en la República.

Las consecuencias de esta opresión fueron las organizaciones armadas y el establecimiento del sindicalismo, como fuerza de unión de los trabajadores en contra de las autoridades.

A su vez, se puede decir que “se transformó a la juventud en un actor político”. Esto se debe a que la represión vivida generó que los jóvenes adopten una mirada propia y uniforme acerca de factores socioeconómicos, lo que los uniría ideológicamente.

Ante la poca respuesta del Presidente hacia las quejas de los ciudadanos, éstos se manifestaban organizando acampes y piquetes a lo largo del territorio nacional. De todas formas, éstos eran siempre reprimidos por las fuerzas armadas de seguridad.

Hubo ciertos sectores que pudieron sentirse identificados con algunas de las medidas de Onganía y existieron quienes lo consideraban como alguien que venía a restablecer el orden, ya que era coherente con sus ideas y hablaba de su gobierno como “una verdadera revolución que devuelve a los argentinos su fe, su confianza y su orgullo”.

Es importante destacar que el Teniente Onganía adoptó una serie de medidas a partir de la inconformidad de muchos sectores tras la presidencia de Illia. Su política económica sufrió cambios a lo largo de su presidencia pero comenzó como liberal. Más tarde, esta se transformó a una más proteccionista después de medidas como el control de capitales y el congelamiento de los precios y salarios.

El Teniente General hacía referencia a su herencia en distintas ocasiones, como cuando expresaba que “la circunstancia nacional nos impone obligaciones inexcusables”.

Entre las medidas más destacadas de Onganía, se encuentran las siguientes:

• Cierre del Congreso Nacional;
• Disolución de los partidos políticos;
• Intervención del gobierno en los sindicatos;
• Clausura de espacios de participación política y social.

Según Onganía su dictadura difería de las demás por diferentes factores. Por lo general el objetivo de los Golpes de Estado es restablecer el orden e incrementar la presencia de las fuerzas de seguridad. Por lo contrario, Juan Carlos Onganía había llegado al poder para reestructurar por completo la base económica, social y política del país.  A su vez, el General expresó “Mi gobierno no tiene plazo, sino objetivos”. En otras palabras, el Presidente de facto dijo que no abandonaría su cargo hasta que terminara su trabajo.

La “Revolución Argentina”: El fracaso del modelo de modernización[pic 2]

Como se explicó previamente, el gobierno de Onganía impuso medidas para el restablecimiento de diversos aspectos. Esto no le cayó bien a muchos sectores, principalmente los de la actual izquierda y los jóvenes. Las reformas laborales desataron la ira de los trabajadores portuarios, ferrocarrileros y demás. Estos se manifestaron en distintas oportunidades pero fueron siempre reprimidos violentamente. Esta represión también la sufrieron quienes intentaron tomar las universidades y escuelas, quienes se manifestaron tras el anuncio del gobierno en intervenir el ámbito educativo, el cual consideraban un “semillero de subversivos y comunistas”.

(Foto: Represión tras la toma de la Universidad de Buenos Aires)

Quienes consideraban necesario el restablecimiento del orden público fueron cada vez mostrando menos apoyo a Onganía, ya que sus medidas cada vez se volvían más agresivas en contra de las libertades personales. Un claro ejemplo de esto es la censura artística y la represión en jóvenes con, por ejemplo, el cabello largo. Esto se fortaleció con las medidas económicas de Vasena, las cuales resultaron en la quiebra de las PyMEs.

El fracaso quedó en evidencia en 1968 cuando el gobierno no pudo ocultar más los indicadores económicos.

Los conflictos en el movimiento obrero

A diferencia del gobierno de Onganía, la presidencia de Frondizi se centró en el crecimiento de las industrias nacionales. Por ejemplo, la metalúrgica y la automotríz. Frondizi se aprovechó del incremento del número de trabajadores y obreros, quienes serían la mano de obra necesaria para potenciar el crecimiento.

Otro punto en el que los gobiernos difieren es en el Sindicalismo. Frondizi mantuvo diálogo con las Confederaciones de Trabajo, haciendo que los sindicatos se conviertan en poderosos grupos quienes intervienen en el diálogo entre el empleador y el empleado. Para muchos, el sindicalismo es una de las causas del deterioro socioeconómico de la Argentina hasta hoy en día.

En 1968 se vivía un clima de descontento en la Argentina por parte de los trabajadores. La economía del país se deterioraba cada vez más y las pequeñas empresas continuaban cerrando, dejando miles de trabajadores desempleados. Ese mismo año se votó una nueva conducción, la cual no fue reconocida por muchos trabajadores.

Ante la poca respuesta de los trabajadores, la CGT tuvo que buscar aliados en otros sectores. Es aquí cuando se unen con los estudiantes universitarios, intelectuales y artistas. Todos estos grupos estaban también en contra del gobierno de facto debido a las medidas de censura y represión establecidas.

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