Título del texto comentado: Carta del cardenal Cisneros a Adriano VI

Nombre y Apellidos: Gema Francisco Abad

Fecha de entrega: 15/03/2022

Título del texto comentado: Carta del cardenal Cisneros a Adriano VI

Nos encontramos con una carta enviada por el cardenal Cisneros a Adriano VI, él cual se encontraba bajo la labor de primer consejero de Carlos V. Dicha carta se centra en explicarnos los treinta y dos consejos que este le da al joven rey Carlos V de Alemania, siendo capaz así de presentar soluciones a algunos de los problemas y de observar los comportamientos, señalando a su misma vez el desastroso gobierno de los anteriores reyes, como, por ejemplo; el del rey Juan II y Enrique IV.

Asenjo (2009) destaca que el origen de dicha carta lo podemos encontrar entre el 1517 o, mejor dicho, en el periodo de transición de la dinastía de los Trastámara a los Habsburgos. Destacando así, que la llegada de Carlos V, llevo consigo un cambio dinástico para Castilla, ya que nos encontramos con la etapa de tránsito hasta la llegada del rey, y a su misma vez, con un periodo sumido tanto en inconvenientes como en contiendas. Además, debemos destacar que la gobernación de Cisneros fue muy dificultosa para el reino, pues para este era fundamental conservar los mecanismos de continuidad.

Asimismo, nos hallamos con una crisis política generada por ver quien hereda el trono de Isabel. Y es con la guerra de sucesión castellana, donde vemos como la inestabilidad del reino, favoreció los intereses privados de aquellos nobles que pretendían aprovecharse de la situación. Además, Diego López Pacheco, mayordomo de los reyes católicos, reclamó a estos, a cambio de su sumisión, el maestrazgo de la Orden de Santiago y grandiosas concesiones para sus partidarios, sin embargo, los reyes se negaron a negociar y le exigieron mantener una obediencia total.

Igualmente, a los grandes señores, les preocupaba el poder de los Reyes Católicos, y para poder contrarrestarlo decidieron apoyar a Juana la Beltraneja y facilitar una alianza con el rey Alfonso, apodado, el Africano. Al poco de tiempo de Isabel proclamarse reina, Juana la Beltraneja reclama el trono de Castilla, negociando con su tío Alfonso el africano, un contrato de matrimonio el cual permitiría unir ambos reinos para así defender sus derechos. Alfonso acepta la proposición y se casa con Juana, para que de esta forma intenten conseguir la corona de Castilla.

En 1475, el ejercito portugués cruzó la frontera de la corona de Castilla y avanzó hasta Plasencia, donde se encontraba Juana la Beltraneja. Alfonso V de Portugal se casa con Juana, a la que consideraban legitima heredera del trono, es por ello, que los placentinos los aclamaron como reyes de Castilla.

Además, Alfonso el africano, le exigió tanto a Isabel como a Fernando que abandonasen el trono. Sin embargo, los Reyes Católicos se oponen y es cuando comienza la gran guerra de sucesión por el trono de Castilla, la cual duró cuatro años. Dicha guerra se internacionalizó al contar Alfonso de Portugal con la alianza de Francia, ya que a estos les preocupaba la unión Castilla-Aragón. Así mismo, Alfonso el Africano le pidió a Luis XI de Francia, que invadiese Castilla por el País Vasco a cambio de quedarse con las tierras conquistadas. Por otro lado, Isabel de Castilla, contaba con el apoyo de la Corona de Aragón y de la nobleza castellana.

Tanto Alfonso como Juana, marcharon a Arévalo para así poder esperar a las milicias juanistas con la única intención de llegar a Burgos. Hay que destacar, que el castillo de Burgos y las ciudades de Plasencia y Arévalo, se encontraban bajo el poder de Juana la Beltraneja, pero la ciudad de Burgos seguía estando en manos de los partidarios de Isabel I de Castilla. Igualmente, en sus primeras fases la guerra tuvo un desarrollo confuso.

Del mismo modo, debemos mencionar que Fernando II de Aragón aglomeró a su ejercito en Tordesillas donde puso en marcha el bloqueo a las aspiraciones de Alfonso el Africano. Al mismo tiempo, nos encontramos con una parte de Zamora dividida entre isabelinos y juanistas, la cual se rebeló contra Alfonso de Portugal. En el 1476 el castillo de Burgos, tras un pacto, se rindió a las tropas de Isabel. Comenzando así el declive del poder militar de Alfonso el Africano, por lo que el triunfo isabelino le obligó a retirarse a Portugal junto a la reina Juana la Beltraneja. Tras la victoria en la Batalla de Toro los reyes católicos quedaron asegurados en el trono de Castilla, y no fue hasta 1479 cuando se firmo la paz en la villa portuguesa de Alcacovas, donde se reconocía a Isabel y a Fernando como reyes de Castilla a cambio de ciertas concesiones a Portugal.

A modo de explicación, Asenjo (2009) comenta en su artículo, que Cisneros hace referencia en su carta al periodo de los primeros reinados, que es en donde las dificultades habidas no pudieron encontrar ninguna solución, sino hasta la llegada de Isabel, quien fue capaz de imponer justicia, y donde añade que el rey Fernando no logró seguir la misma línea de mesura.

Hay que destacar, que la regencia del Cardenal Cisneros, se produjo en unos momentos muy difíciles para España, ya que lo único que el intentaba es que el gobierno de la nación cayera de nuevo en manos de los señores feudales. Además, en el estudio de Blanch y Arranz (2019) Francisco Jiménez de Cisneros aceptó el mandato del rey Fernando el católico en tiempos duros, donde se declaró con autenticas cualidades de político, y en el que mantuvo el principio de lealtad a la reina Isabel la Católica, mostrándose partidario de su testamento, donde se prescindía de los extranjeros en la gobernación de sus reinos.

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