Cuanta tierra necesita el hombre

Cuanta tierra necesita el hombre

COE 1

10MG3

Pahom muerto .…………………………………………………………Tatiana Pineda Mateus

Pahom ………………………………………………………………… Sergio Alejandro Castro

León Tolstoi …………………….……………………………………… Brandon Sneider Parra

Esposa de Pahom …...………………………………………………………… Geraldin Osorio

Hijo de Pahom …………………...…………………………. Daniel Alejandro Bahamon Arias

Criado de Pahom …………..………………………………. Carol Alexandra Jiménez Medina

Terrateniente ………………………….………………………………….. Alex Buitrago Basallo

Vendedor de finca raíz …………………………………… Mónica Alejandra Carranza Forero

Forastero …………………………………………………………..………………. Andrés Forero

Jefe barshki ………………………………………………….. Tania Carolina Rodríguez Forero

Cuñado de Pahom ……………………….………………. Angie Khaterine Angarita Peñaloza

Barshki 1 ……………………………………………………………………… Jefferson Hincapié

Barshki 2 …………………………..…………………………………………. Nicolás Nieto Daza

Profesor: Rafael Letrado Duarte

Primera escena

Locura

*León Tolstoi se encuentra en su despacho solo, empieza a rascarse la cabeza con desesperación*

Tolstoi: Necesito, necesito dinero, necesito escribir, necesito algo, no tengo nada, ni una idea, necesito hacer algo para esto.

*Toma de una mesa un bote de pastillas, saca dos y las consume*

*Al despacho entra alguien con un aspecto “muerto”*

Pahom muerto: Señor… Si, usted, ¿quiere oír una pequeña y linda historia?

Tolstoi: ¿Quién lo dejo entrar?, yo no quiero ver a nadie ahora, maldita sea, ¡FUERA!

Pahom muerto: Intente sacarme, le aseguro que no logrará nada, le ayudaré, déjeme contarle la historia, así dejará de preocuparse por su siguiente cuento.

Tolstoi: ¿Quién eres?, ¿Dios?, en todo caso, te escucharé.

*Tolstoi se sienta en una silla, mientras que invita a Pahom muerto a que se siente en una silla en frente de él.*

*Pahom muerto se siente y empieza a relatar*

Pahom muerto: Hace unos años había un hombre llamado Pahom…

Segunda escena

Todo por tierra

Pahom muerto: Se ve a Pahom y a su esposa, Pahom arando una tierra, para un momento y se seca la frente sudorosa, su esposa le da un vaso de agua

Pahom: Tanto tiempo trabajando, desde niño llevo trabajando esta tierra y no tengo mis propias tierras.

Nosotros debemos morir como vivimos, sin nada propio. Las cosas serían diferentes si tuviéramos nuestra propia tierra.

Esposa: Pero qué podemos hacer, vivimos así y no necesitamos más, desde que estemos juntos y con algo de comer no sufriremos.

*Pahom toma el agua y le da el vaso a su esposa, ella entra a la casa y Pahom sigue arando*

Pahom muerto: Pahom termina de arar y va a la casa, empieza a conversar con su esposa.

Pahom: ¿Has oído lo de la vecina?

Esposa: Está vendiendo su tierra, te lo he dicho esta mañana, despistado.

Pahom: Está vendiendo su tierra, y dicen que muy barato, ¿será este el momento de comprar nuestras propias tierras, mujer?

Esposa: Pues no veo necesidad.

Pahom: La tierra se vende, y yo no obtendré nada.

Otras personas están comprando, y nosotros también debemos comprar unas diez hectáreas. La vida sin tierras no se puede vivir.

Esposa: *Suspira* Si lo ves tan necesario, pues te apoyo, pero… Debemos contar cuánto dinero tenemos y como hacemos para conseguir el resto.

Pahom muerto: Contaron dinero, y para reunir un poco más vendieron parte de su ganado.

Esposa: Tenemos 100 rublos, vendimos un poco de ovejas, y un potrillo, no cambió mucho la cantidad de dinero.

Deberíamos dar a uno de nuestros hijo como peón, y pedir un adelanto del pago, también podemos decirle a mi hermano que te preste.

Pahom: Yo hablo con nuestro hijo, tú con tu hermano.

Tercera escena

Todo lo que brilla es oro

Pahom muerto: Pahom está esperando a su hijo en la casa, este entra y es acosado por Pahom.

Pahom: Hola campeón, ¿cómo te fue con el arado?, hoy estás más brillante que nunca.

Hijo: Bien apá, ahí vamos, pero me faltó un poco.

Pahom: Lo importante es que terminaste la mayoría, ¿quieres un poco de comida?

Hijo: Claro, ¿y mi madre?

Pahom: Está arreglando unas cosas.

Hijo: ¿Se demora?

Pahom: Llega en un par de horas, ¿para que quieres verla?

Hijo: Solo quería verla, pero pues la espero.

Pahom: Toma.

Hijo: Gracias, y ¿que haces acá papá?

Pahom: Me tomé un descanso, debo hablar de algo contigo.

Hijo: Claro, dime apá, ¿que quieres?

Pahom: A ti te gusta trabajar, ¿cierto?

Hijo: Claro que sí.

Pahom: Pues tu madre está arreglando que vayas a trabajar a otra finca y nos darán un pago adelantado.

Hijo: Si, ¿pero en dónde y cuánto?

Pahom: Es algo alejado, pero tendrás allá todo, y no será por mucho.

Hijo: No iré, yo amo estar con ustedes, no me falta dinero, me encanta tener su cariño.

Pahom: Pues no es una elección, por favor, esto será bienestar para todos, con tu dinero compraré algunas tierras y cuando yo muera, todo será tuyo.

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