Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva

Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva.

Principios del paradigma de quien vive con los 7 hábitos.

1. Rectitud
2. Integridad
3. Honestidad
4. Dignidad humana
5. Servicio o Idea de contribuir
6. Calidad o excelencia

El continuum de la Madurez

• Dependencia: Tú haces o no haces lo que debes hacer por mí. Culpar a otros por los resultados
• Independencia: Es el paradigma del yo. Yo puedo hacerlo. Yo soy
• Interdependencia: Es el paradigma de nosotros: Nosotros podemos. Cooperar, combinar talentos y aptitudes para crear algo más importante.

La Interdependencia es el paradigma más efectivo para los 7 hábitos.

CP organizacional

P=Producto, CP=Capacidad para producir

Se debe intentar pensar siempre en cuidar de la capacidad para producir. Cuidar a la gallina para que produzca huevos de oro, tratarla bien, y no ir directamente a los Huevos matando a la gallina y viendo si hay algunos dentro de ella. Cuidar CP para mejorar la efectividad y tener felices a los empleados (en el modelo empresa).

“Siempre tratar a los empleados como a nuestros mejores clientes”

Primer hábito:                Ser Proactivo

Moverse, hacer las cosas. Ser efectivo, utilizar el tiempo, tomar decisiones pertinentes, etc.

• Tomar la iniciativa.

Nuestra naturaleza básica consiste en actuar, y no en que se actúe sobre nosotros. Uno debe actuar por sí mismo, esto le da poder para crear circunstancias. Debemos elegir nuestras circunstancias como tal, y nuestras respuestas a circunstancias particulares.

• Actuar o dejar que los demás actúen por uno.

La diferencia entre personas que toman iniciativas y personas que no lo hacen representa la diferencia entre el día y la noche, es gigante. Se puede estar hablando de un 5000% de diferencia en efectividad.

• Escuchando el lenguaje.

Se pueden definir un Lenguaje reactivo y un Lenguaje Proactivo. El lenguaje proactivo sería “Voy a analizar mis alternativas/opciones” en vez de “No puedo hacer nada” que sería el producto del lenguaje de una persona reactiva.

 “Me vuelve loco” a diferencia de “Controlo mis sentimientos”

“Yo soy así” a diferencia de “Puedo optar por un enfoque distinto”

• Círculo de preocupación/influencia.

Uno debe, para ser proactivo, centrar sus esfuerzos en el centro de influencia de su círculo, haciendo más pequeño el círculo que contiene a este, y que es el de preocupación. La energía negativa hace más grande un círculo de preocupación, empequeñeciendo un circulo de influencia, una persona proactiva debe centrarse en conseguir lo opuesto de esto.

Foco proactivo y foco Reactivo

• Control directo, indirecto e inexistente.

Uno posee uno de estos tipos de control para toda situación. Para tratar por ejemplo un problema, o cambiar una situación, se debe definir qué control se tiene sobre él/ella y actuar al respecto.

-Los problemas de Control directo se resuelven actuando directamente sobre ellos, trabajando sobre nuestros hábitos.

-Los problemas de Control indirecto se resuelven cambiando nuestros métodos de influencia.

-Los problemas de Control inexistente se resuelven adaptando nuestras actitudes, es la responsabilidad de vivir con ellos sin que nos afecten, y hasta manteniendo una actitud positiva que nos enriquezca, no permitir que estos nos afecten, o aprender a vivir con ellos aunque no sean de nuestro agrado al 100%.

• Comprometerse y mantener compromisos.

Debemos mantener compromisos con otros y con nosotros mismos, así como establecer estos, pues son clave para la pro-actividad. En estos reside la esencia de nuestro crecimiento.

Gracias a la Autoconciencia y la Conciencia moral detectamos áreas en cuales debemos y podemos mejorar, áreas de debilidad, áreas de talento que podemos explotar/desarrollar, y creando compromisos con nosotros mismos, y otros, podemos lograrlo.

Segundo hábito:                Empezar Con Un Fin En Mente

Tener para todo lo que hagamos un objetivo, o intentar que así sea. Movernos por un objetivo así como no terminar realizando acciones en contra de nuestro ser a las que no les podamos conciliar un objetivo que nos satisfaga, o no les encontramos sentido siendo honestos con nosotros mismos.

• “Todas las cosas se crean dos veces”.

Se basa en este principio. Siempre antes de hacer algo están la Creación mental y la Creación física. Se debe primero trabajar con la mente, hasta llegar a una imagen clara de lo que quiere conseguir uno. Se debe encontrar el fin, el objetivo, para trabajar con toda la fuerza para cumplirlo, y desarrollarse en la actividad en concordancia con nuestros valores y ser propio.

• “Liderazgo y administración” Las dos creaciones.

“Empezar con un fin en mente” se basa en principios de Liderazgo personal.

La Administración aborda el ¿cómo hacer mejor las cosas?, y el Liderazgo personal el ¿qué quiero realizar?, en ese orden.

La administración busca la eficiencia en el desarrollo de una actividad, y el liderazgo personal el que ese desarrollo, ese objetivo mejor dicho, estén apuntando al fin correcto.

• Convertirse en su primer creador.

Nosotros nos escribimos. La conciencia moral e imaginación nos permiten escribirnos como personas y desarrollarnos libremente una vez entendemos y sentimos nuestro alrededor, y principios universales.

Se asocia al convertirse en su creador, con el que cada uno es quien desea ser. Mejor dicho: no es, pero puede ser. Puede desarrollarse de la forma que desee y llegar a ser como y quien desea, como el ex presidente de Egipto “Anuar el Sadat” que se educó en el odio a Israel y su gente, y años después en una cárcel, llego a la conclusión de que no estaba bien, y de que no es quien quería ser, para luego llegar a iniciar movimientos de paz que se volvieron muy importantes.

Nadie tiene que seguir guiones antepuestos o ajenos. Todos pueden escribir su propio Guión.

• “Un enunciado de la misión personal”.

Un método para poder palpar el fin personal, el gran objetivo. La meta de nuestras vidas como impuesta por nosotros mismo, es escribir un enunciado de misión personal.

Un enunciado en forma de párrafo corto, que se centre en quienes queremos ser y hacer. Qué carácter queremos tener o continuar desarrollando, y que logros queremos conseguir. Al enunciado, si escrito, uno puede verlo y cambiarlo día a día, para sentirse cómodo con él y reasegurado. Sentirse cómodo con uno mismo, y con los objetivos de uno.

• Enunciados de misión son muy útiles también en empresas. Para ser efectivos, se podría decir que fundamentales. Un enunciado que concuerde con los objetivos de todos, como por ejemplo uno escrito por todos, sintetizado y general que enfoque el positivismo y metas de los empleados como de los gerentes, y aptitudes para verlos convertirse en realidad, será siempre súper efectivo.

• Los centros. Definir el Centro.

Cada persona puede estar “Centrada” en diferentes objetivos, obtener diferentes cosas dentro de una categoría, así como en las influencias de gente ubicadas dentro de una categoría, por ejemplo estar centrado en la Familia. Uno debe ubicar su centro, para dirigir sus influencias, y esfuerzos. Uno puede también cambiar de centro, o estar centrado en varios temas. En definitiva, encontrar como y a qué centro/centros uno quiere prestarles atención.

El centro de uno, sea uno, o sean varios, debe estar definido de acuerdo a los Principios fundamentales que tiene uno. Debe ser honesto a lo que uno quiere y busca y considera importante.

• Usar la totalidad del cerebro

Para analizar mejor cualquier situación, uno debe analizarla con ambas partes del cerebro, la Creativa y la Lógica, en vez de analizar todo con la mitad de confort de su cerebro. Permitir que la parte Lógica (hemisferio izquierdo) analice una situación, la desglose y trate con su aptitud, así como que la parte Creativa (hemisferio derecho) cree una imagen de como uno quiere o puede proceder y que quiere conseguir. Analizar efectivamente una situación empleando la totalidad lógica y creativa para imaginar rutas, desarrollos y resultados que existen y pueden abordarse u obtenerse de la misma.

Tercer hábito:                Establecer Primero Lo Primero

Significa la puesta en práctica de los dos primeros hábitos. Primero lo primero, en contexto de hacer en orden lo que nos vuelve efectivos. Ser proactivos para poder realizar los fines en mente que nos propongamos, actuando en las áreas importantes de nuestra vida.

Primero lo primero, en contexto de actuar sobre lo más importante de nuestra vida, y no quedarnos estancados en actividades que consumen tiempo y esfuerzo, pero que realmente no nos llevan o llevaran a nada trascendental para nosotros mismos.

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