COMPETITIVIDAD DE LAS EMPRESAS A NIVEL MUNDIAL Y NACIONAL
cinher7 de Abril de 2014
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CAPITULO 1
1.1 ORIGEN DE LA COMPETITIVIDAD
De acuerdo con la investigación que realizamos podemos decir que la competitividad tiene su origen en la variedad de cambios que ha tenido la sociedad y que han afectado y modificado la forma de realizar sus actividades cotidianas. La globalización y la aceleración de los procesos han influido de manera determinante para examinar los hechos que ocurren alrededor del mundo, como una fuente de perturbación en nuestra vida, en nuestro país y en las empresas o centros de trabajo en que nos desarrollamos.
Definamos el concepto de globalización
La globalización es un fenómeno moderno que puede ser analizado desde diversos ángulos. El término proviene del inglés globalization, donde global equivale a mundial. Por eso, hay quienes creen que el concepto más adecuado en castellano sería mundialización, derivado del vocablo francés mondialisation.
Globalización a grandes rasgos, podría decirse que la globalización consiste en integración de las diversas sociedades internacionales en un único mercado capitalista mundial. Por eso, el fenómeno es defendido desde teorías económicas como el neoliberalismo y por entidades como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial lo cual para las empresas y para las personas tiene gran impacto ya que al abrir los mercados internacionales con la globalización se le exigen que los individuos y las empresas se encuentren mayor capacitados y con más características que les favorezcan para poder enfrentar a los cambios y poder sobre salir en este proceso
La sociedad así como sus formas de consumo se transforman cada vez más aceleradamente, por tanto, la información juega un papel determinante como instrumento para afrontar un medio ambiente dinámico. Esto implica que las organizaciones deben ser capaces no sólo de adaptarse rápidamente a los cambios sino que deben tratar de pronosticarlos para actuar en escenarios inciertos y distintos a los actuales.
El origen histórico de la globalización se remonta a 1492, cuando Cristóbal Colón llegó a América. A partir de allí, la voluntad expansiva de Europa se tradujo en una serie de imperios y el comercio global se intensificó año a año. Las potencias se basaban en la teoría económico-política del mercantilismo, que suponía la competencia por una cantidad finita de riqueza y la necesidad de un control estricto del comercio. Las tensiones y enfrentamientos dieron lugar al primer tratado global de la historia (Tratado de Tordesillas), donde España y Portugal acordaron como repartirse los territorios conquistados.
El avance de la tecnología, el auge de las telecomunicaciones e Internet y el desarrollo de los medios de transporte ha permitido que el fenómeno de la globalización sea una realidad ineludible en el mundo actual.
1.2 CONCEPTO DE COMPETITIVIDAD
La competitividad los autores lo definen como un concepto que no tiene límites precisos y se define en relación con otros conceptos.
La definición operativa de competitividad depende del punto de referencia del análisis -nación, sector, firma-, del tipo de producto analizado -bienes básicos, productos diferenciados, cadenas productivas, etapas de producción- y del objetivo de la indagación -corto o largo plazo, explotación de mercados, reconversión, etcétera lo que quiere decir que Significa la capacidad de las empresas de un país dado para diseñar, desarrollar, producir y colocar sus productos en el mercado internacional en medio de la competencia con empresas de otros
Todas las empresas para poder mejorar la competitividad deben adecuar sus estrategias y su estructura organizacional al entorno dinámico de la economía actual. El éxito de las empresas dependerá, en gran medida, de su capacidad para dotarse de recursos y habilidades adecuadas para conseguir nuevas ventajas competitivas (calidad, capacidad tecnológica, innovación, capital humano, conocimiento, etc.), con el objetivo permanente del crecimiento y la diversificación. Sin embargo, muchas empresas se cuestionan si estas acciones competitivas que llevan realmente a cabo un incremento de la inversión, van resultados suficientes en los niveles de eficiencia y rentabilidad.
La comercialización internacional y por consecuencia la gran variedad de productos que se intercambian entre esos bloques ha originado que el medio ambiente se torne más agresivamente competitivo, al tiempo que se transforma con mayor rapidez.
Se debe conocer a la perfección las necesidades para así posibilitar el desarrollo de nuestros puntos fuertes y sobrevivir en un mercado que es distinto cada vez en lapsos más cortos de tiempo. La clave es adaptarse y responder a estos cambios cada vez más rápido e inclusive preverlos las empresas deberán de prever las nuevas necesidades de la sociedad para así poder adelantarse a ellas y cuando la sociedad se dé cuenta de la necesidad la empresa ya tenga la forma de como satisfacerla, hasta que las organizaciones sean capaces de brindar soluciones inmediatas a escenarios inciertos y variables.
Si somos observadores en las empresas que tenemos en nuestro entorno podemos ver que que las empresas industriales más eficientes y rentables realizan un plan estratégico, tienen una elevada inversión en el aspecto tecnológico, cuentan con un proceso tecnológico flexible e innovador, disponen de certificación de calidad o están en proceso de conseguirla, siguen una estrategia exploradora o analizadora, forman a su personal, tienen capacidad para desarrollar nuevos productos, habilidades para dirigir y trabajar en grupo y capacidad para obtener financiación. O sea que al combinar y aprovechar correctamente sus recursos obtienen satisfactorios resultados, comprobándolo en la penetración del mercado y su posicionamiento.
Como podemos observar en algunos sectores de la industria lo más común es encontrar en las empresas una buena capacidad tecnológica, innovaciones en procesos y servicios, optimización de sus inversiones en activos, desarrollo de nuevos procesos, disposición de una aceptable productividad de la mano de obra, preparación y formación al personal, además cuentan con habilidades de servicio al cliente; que es lo que marca la diferencia con otras empresas de otros sectores. También así vemos que las empresas de servicios se caracterizan por contar con certificación de calidad o estar en proceso para obtenerla; por mostrar especial interés en la calidad y perfeccionamiento continuo del servicio, utilizan medios adecuados para establecer relaciones comerciales con clientes y proveedores, aplazan más los cobros a sus clientes.
Por lo cual podemos definir a la competitividad como:
•Conquistar, mantener y ampliar la participación en los mercados
•Conjunto de habilidades y condiciones requeridas para el ejercicio de la competencia, entendida esta última como la rivalidad entre los grupos de vendedores y como parte de la lucha económica.
•Capacidad de un país, un sector o una empresa particular, de participar en los mercados extremos
•Habilidad sostenible de obtener ganancias y mantener la participación en el mercado
1.3 COMPETITIVIDAD A NIVEL PERSONAL
El concepto de la competitividad puede ser y debe de ser adoptado ´por las personas ya que solo con personas con las mejores cualidades, las empresas podrán ser competitivas ya que el factor humano en una organización es de suma importancia para poder lograr sus objetivos.
Competitividad es un conjunto de conocimientos, habilidades y aptitudes. Ser competitivo permite incursionar en el mundo laboral de forma directa. Así también, la ventaja competitiva de un individuo descansa en la forma de pensar y en todo aquello que le permita tener expectativas a futuro para un crecimiento personal.
La competitividad se confunde con términos que tienen relación directa o indirecta con ella, por ejemplo, eficiencia, eficacia, calidad total, productividad, estrategias, entre otros
Es un hecho, es que debemos de prepararnos día con día. Lo anterior significa leer, estudiar, escribir y adquirir un cúmulo de conocimientos y habilidades que faciliten la pertenencia al mundo global de hoy. Esa superación personal y espiritual implica una mayor competitividad del individuo.
No podemos sólo conformarnos con lo aprendido en la escuela sino que debemos ir más allá de lo establecido por la educación formal y por nosotros mismos. Hay que auto permitirnos competir rompiendo nuestros prejuicios y adaptándonos a la situación actual. No basta con hacer lo que nos toca.
Tenemos que hacer actividades extras que permita hacer la diferencia entre lo que somos y hacemos, y lo que los demás demuestran. El reflejo y la gama de recompensas a esa competitividad podrán ser desde un reconocimiento verbal, hasta una remuneración económica, y proyectar al individuo en la organización y la sociedad como candidato a adquirir mayor autoridad.
El ser más competitivo brinda seguridad y permite incursionar en ámbitos con los que antes no era posible imaginar e interactuar. Esa manera de aceptar la competitividad nos abrirá la mente y nos da la pauta de conocer y experimentar lo aprehendido.
Al hablar de competitividad también incursionamos en temas como la globalización, que no podemos ni debemos evadir, porque de ser así, simplemente quedaríamos extintos para el resto de nuestra vida
CAPITULO 2
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