Capacidad de produccion - Instrumentos de Gestión
jcperedaMonografía23 de Septiembre de 2015
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“Año de la Diversificación Productiva y del Fortalecimiento de la Educación”.[pic 1][pic 2]
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Contenido
I. Introducción 4
II. Medidas de la Capacidad 7
a. La unidad de producción 7
b. Las políticas normales de operación 9
c. Las diferentes medidas de la capacidad 9
III. Las estrategias sobre la Capacidad 11
IV. Economías de escala/des-economías de escala 12
V. Fabricas enfocadas 17
VI. Economías de alcance 18
VII. Los cuellos de botella 18
VIII. ¿Cuánta capacidad y cuándo? 19
IX. Método sistemático para la toma de decisiones sobre capacidad 21
X. Planeación de la capacidad para servicios 22
XI. Integración vertical 25
Introducción
En el presente se desarrolla lo relacionado con el tema de las estrategias y de la determinación o planeación de la capacidad de las operaciones de la organización a largo plazo; es decir, un plazo mayor a los doce meses.
Sin embargo, lejos se está de considerar a los temas de localización y de capacidad como de tratamiento individual, sino todo lo contrario. Las decisiones que se tomen sobre la localización de las actividades de producción resultan bastante inflexibles e irreversibles, son complejas debido a la gran cantidad de variables interrelacionadas y tendrán efectos positivos/negativos durante un largo periodo de tiempo. Pero, al mismo tiempo, la asignación de una determinada capacidad para una localización dad posee las mismas características de singularidad y compleja aún más el problema conjunto de toma de decisiones.
Observamos que estamos expresando, hasta ahora, asignar una determinada capacidad a un determinado lugar físico de emplazamiento. Si en cambio consideráramos, como es habitual, tener que determinar una capacidad total que puede repartirse en fracciones variables de la misma en distintas localizaciones, unas con capacidad previa, ya existentes, y otras nuevas, o todas nuevas o todas existentes, el problema es mucho más complejo.
¿Dónde ubicar cada localización, cuánta capacidad convendrá asignar a cada una de ellas, cuándo deberán estar operativas esas capacidades y cómo deberán estar organizadas o distribuidas las instalaciones en cuanto a su distribución en planta?
¿Cuál es/será nuestra estrategia en cuanto a inventarios? ¿Cuál, la referida a la capacidad de respuesta? ¿Podremos obtener en cada lugar la mano de obra necesaria en cuanto a su cantidad y en cuanto a su habilidad? ¿Cuál es el nivel de servicio que se desea brindar? ¿Cuáles serán los costos unitarios medios operativos? ¿Podremos administrar estos cambios?
A estos y a otros interrogantes deberemos darles adecuadas respuestas visto que las decisiones sobre estos temas son típicamente estratégicas, pues condicionan la competitividad futura sobre la base que:
- Posibilitan una adecuada capacidad de respuesta empresaria ante las variables demandas del mercado.
- Impactan sobre los costos de estructura de la organización.
- Permiten establecer una conveniente política en materia de inventarios.
- Caracterizarán la demanda de la fuerza de trabajo.
Otro tanto podríamos expresar para los casos en que exista no ya un aumento de la capacidad, sino una contracción de la misma.
Por otra parte, no se crea o se disminuye capacidad de la noche a la mañana; su materialización demora un tiempo variable según el tipo de actividad de la organización, el cual puede ser de sólo decenas de días (modificación de la capacidad de una panadería) o algunos meses, hasta varios años como en el caso de ampliar una siderúrgica.
¿Y si, en el ínterin, cambian los contextos interno y externo como por ejemplo, los mercados y los pronósticos de venta, las barreras de entrada, la tecnología, los precios relativos, la normativa legal/ambiental, los competidores, nuestras estrategias, etc.?
Por lo expuesto, para la adecuada toma de decisión, se deberá considerar el conjunto ubicación/capacidad además de otros aspectos importantes y esta decisión resultará de un profundo estudio que incluirá, además, el análisis de factibilidad/viabilidad, para finalmente, el decisor humano, adoptar la alternativa estimada como la más conveniente.
Sin embargo, adelantamos, que el tema capacidad no se enfoca solamente en su resolución al largo plazo; ya que también deben tomarse decisiones para el mediano y para el corto plazo, las que se apoyarán en herramientas diferentes que para el largo plazo.
Si elegimos una capacidad demasiado grande, la misma será subutilizada, permanecerá inactiva mucho tiempo, cargará nuestros costos de estructura, pero nos permitirá una mayor flexibilidad y una mayor velocidad de respuesta a la vez que posibilita dotarla de mayor seguridad y de un mantenimiento adecuado.
Si por lo contrario, la capacidad disponible es casi siempre escasa, existe la posibilidad de perder pedidos o clientes, la misma será pasible de la exigencia de una muy alta utilización, con poco tiempo dedicado para efectuar mantenimiento y con la seguridad y confiabilidad de los equipos e instalaciones disminuidos. Como beneficio, se obtendrá una menor incidencia del costo de estructura.
Ambos conceptos recién expresados, son válidos mientras sea válida la proyección de la demanda y la mezcla de productos que se elaboran. Si éstas cambian en forma importante, nuestra capacidad puede resultar o demasiado grande o demasiado pequeña, con sus correspondientes consecuencias.
Medidas de la Capacidad
La unidad de producción
En muchos casos la elección de la unidad con la que mediremos la producción no resulta sencilla; en otros, en cambio, es bastante simple. Por ejemplo, una central térmica de generación de energía eléctrica, puede medir su producción máxima en la cantidad de energía que puede entregar a la red de distribución, en MWh (megavatios hora), o una potencia garantizada medida en MW durante un cierto tiempo. La energía podría ser su único producto tal como en el caso de una planta productora de papel para diarios, en la cual su producción máxima podría ser cierta cantidad anual medida en toneladas de papel elaborado.
En transporte carretero se habla de toneladas x kilómetro (léase toneladas por kilómetro) por día o por semana, es decir, la cantidad de toneladas que pueden transportarse a determinada distancia en una unidad de tiempo-
En el caso de una pizzería, su producción podría estar medida en la cantidad de pizzas que puede entregar a sus clientes en un período dado de tiempo, por ejemplo, 45 pizzas por hora. Para su determinación debió buscarse cuál era el proceso u operación que limita su producción o sea, aquello que constituía un cuello de botella que supongamos, lo sea el proceso de horneado, es decir, el tamaño del horno con su actual tecnología, aunque podría serlo el amasado o cualquier otra actividad dentro del proceso general.
Pero, si al mismo tiempo, además de pizzas de diferentes variedades, se elaboraran fugazzas y calzones, deberemos verificar que la unidad sea representativa de la producción del establecimiento, por ejemplo, kilogramos de harina. Otro ejemplo lo podemos encontrar en una usina láctea en la que se elabora leche de diversas características o calidades, cremas y/o mantecas y/o yogures, en diferentes tamaños de envases y también medidos en diferentes unidades físicas (litros, cm3, gramos) para las que deberemos encontrar una unidad que homogenicé la demanda y la oferta la cual podría ser hectolitros de leche en vista que se conocen las cantidades de leche necesarias para elaborar una unidad de los otros productos.
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