Desarrollo Actividad de Evaluación de Desempeño

Desarrollo Actividad de Evaluación de Desempeño 1

        Jesús Manuel Julio Ospino.

        Abril 2020.

Servicio Nacional de Aprendizaje SENA.

Centro de Gestión Administrativa.

Promover la Interacción Idónea – Comunicación.

INTRODUCCIÓN

El auge de la comunicación en las organizaciones como parte del éxito empresarial e indiscutible. Poco a poco los directores y gerentes se han dado cuenta de que el buen funcionamiento y logro de objetivos de su compañía, sea cual sea su giro, se basa no solo en la calidad de su producto o servicio, sino también en el buen funcionamiento y adecuada estructura de sus redes de comunicación.

Esforzarse por conocer y unificar la cultura organizacional, ofrecer los recursos necesarios a los empleados para que realicen satisfactoriamente su trabajo, motivarlos a hacerlos con ánimo, gusto y responsabilidad son algunos aspectos que deben ser una prioridad para los directivos de las empresas y las labores principales del comunicador organizacional.

Solución Taller individual de problematización 1.

1. Elaborar un texto narrativo que describa una situación donde se considera que se presenta un problema de la comunicación:

LA MORDIDA DEL 83

--- Reproduciendo grabación: “Oh, emmm… Un momento, por favor… Bien, ya estoy listo, y espero que ustedes también lo estén, porque lo que estoy a punto de contar… no es algo fácil de digerir... Mi nombre es Michael Afton y está es una historia que jamás pudo ser contada, una historia que falleció junto con aquel pequeño niño… Junto con aquella pequeña alma inocente de la familia… Esta es una historia de como yo, en una de mis ridículas bromas, acabé con la vida de mi hermano… Bien, aquí vamos…”

Hace ya 32 años, mi familia y yo vivíamos en un pueblo llamado New Harmony, en el estado de Indiana. Soy el hijo mayor de la familia Afton, o al menos lo fui hasta el día en el que los perdí… La menor a mí fue mi hermana llamada Elizabeth Afton, y el menor de los tres era el pequeño Sammy Afton. Los tres vivíamos bajo el cuidado de nuestro padre William Afton, el cual era el presidente de la compañía tecnológica Afton Robotics LLC, éramos solos nosotros ya a que nuestra madre murió en el parto de Sammy, sé que él no tiene la culpa de la muerte de mamá, pero supongo que no puedo evitar odiarlo un poco.

En fin, vivíamos una vida corriente y tranquila, yo era estudiante de preparatoria cuando todo eso pasó, Elizabeth estaba en la secundaria, Sammy en la primaria y papá cuidaba de nosotros como su se tratará de su propia vida. Admito que siempre fuimos una familia adinerada debido a  la compañía de papá, nunca nos faltaba nada y casi siempre cumplía nuestro caprichos con tal de hacernos felices pero, pese a todo esto, de cierta formas estábamos separados entre nosotros, era como si cada quien estuviera en su mundo y como si solo fuéramos 4 desconocidos viviendo bajo el mismo techo, y recuerdo perfectamente que cada vez que lográbamos hablar como familia, Sammy se llevaba toda la atención y Elizabeth una parte de ella, y yo, bueno, yo estaba ahí para decorar la conversación… Admito que eso me hacía sentir celoso de ellos dos, en especial de Sammy, pero solo me quedaba acostumbrarme a eso y hacer como que no importaba.

Papá tenía un amigo en su trabajo, su nombre era Henry, aparte de ser un gran amigo de mi padre, era uno de los mejores genios tecnológicos de la compañía, y en cierta forma, era considerado como uno más de la familia, inclusive yo lo llamaba Tío Henry. Desde mi punto de vista, el tío Henry era atento con nosotros, nos daba regalos y nos cuidaba cuando papá tenía que viajar por su trabajo, sin embargo, tenía el presentimiento de que él estaba un poco loco, a veces tenía una actitud muy extraña y emitía un aire perverso, como si fuera un sirviente de la maldad misma.

Un domingo, estábamos almorzando en “familia”, si es que se le podía llamar así, cuando a papá le entro una llamada a su teléfono.

¿Hola? ¡Hola, Will! – era el tío Henry – Tienes que venir ahora, acabo de hacer el mayor avance tanto para esta compañía como para el mundo, ah, y de paso tare a los niños, esto les va a encantar.

Mi padre, sin siquiera titubear un poco, respondió: - Entiendo, voy para allá.

Papá nos subió al carro e inmediatamente nos llevó a los laboratorios donde estaba Henry. Mis hermanos y yo estábamos un poco desconcertados de lo que estaba pasando, pero confiábamos los suficiente en papá como para acompañarlo hasta el fin del mundo, sin saber que íbamos directo a él, al fin de nuestro mundo.

Cuando llevamos al edificio, el tío Henry no estaba esperando en la puerta del mismo, al bajarnos, nos saludó con una alegría y una energía que parece que hubiera recibió la mejor noticia del universo, lo cual nos tranquilizó un poco.

Entramos al edificio y tomamos el ascensor, directo a los laboratorios subterráneos, Elizabeth estaba distraída jugando con su cabello, y Sammy simplemente estaba recostado en el muro del ascensor jugando con su figura de acción. Por otro lado, yo estaba pensando en qué era eso que tenía al tío Henry tan feliz y que hizo que nuestro padre nos trajera con tanto afán, así que no pude evitar escuchar una parte de su conversación.

No sabes el futuro que no espera, Will – le decía el tío Henry a mi padre – Si la sociedad los acepta, seremos más famosos que nunca, este es el futuro de la robótica.

¿El futuro de la robótica? – pensé, mientras veía a esos dos hablando como si fuera el mayor desarrollo del planeta.

Finalmente llegamos a la sección de laboratorios de la compañía, seguimos por un pasillo hasta una puerta blindada hasta que el tío Henry se detuvo y nos dijo:

Will, niños, prepárense, porque detrás de esta puerta está algo que cambiara sus mentes y su forma de pensar por completo. – decía Henry entusiasmado, mientras sacaba la llave de acceso de sus bolsillos para abrir la puerta.

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