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Fijación del salario mínimo en los países en desarrollo. Grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos


Enviado por   •  27 de Diciembre de 2018  •  Prácticas o problemas  •  3.320 Palabras (14 Páginas)  •  99 Visitas

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El derecho laboral internacional.

Fijación del salario mínimo en los países en desarrollo.[pic 2]

Grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos

Año Académico 2015-2016

Curso 3º. Grupo 2

Asignatura: Derecho Internacional Laboral

Profesora: Alfredo Pérez Alencart

Alumno: David Morón Sánchez

DNI: 28969272-J

ÍNDICE:

  1. INTRODUCCIÓN.
  2. POSTURAS DE LOS ECONOMISTAS.
  3. INDICADORES.
  4. CAUSAS DE LAS DEFICIENCIAS PRINCIPALES.
  1. CAUSAS DEL MINISALARIO MÍNIMO.
  2. CAUSAS DEL MAXISALARIO MÍNIMO
  1. CONCLUSIONES.
  2. BIBLIOGRAFÍA.

  1. INTRODUCCIÓN.

Este trabajo trata de las diferentes deficiencias y soluciones que podemos dar a las fijaciones de salarios mínimos en los países que están en desarrollo dado que una mayoría de estos países tiene unos salarios mínimos demasiado altos o bajos. La autora Catherine Saget utiliza varios métodos de medición y así comparar los niveles reales que se encuentran en unos países y en otros. También nos dice si este salario mínimo es efectivo, es decir, si cumple su función de umbral salarial del mercado de trabajo. Por último también destacamos los factores institucionales que dan lugar a dichos valores extremos y las soluciones que permitirían fijar el salario mínimo en un nivel más idóneo y eficaz.

  1. POSTURAS DE LOS ECONOMISTAS.

Dentro de la economía política de la fijación del salario mínimo, las posturas de los economistas del trabajo se dividen en dos:

  1. Los que argumentan que un salario mínimo fijado con sensatez puede conllevar a la consecución de los objetivos socio laborales sin causar distorsiones severas en la estructura del empleo.
  2. Los que defienden que la mejor política posible es dejar en libertad a la oferta y la demanda para que fijen los salarios, renunciando a toda medida legislativa o reglamentaria al respecto.

Partiendo de la primera perspectiva diremos que numerosos países en desarrollo han fijado un salario mínimo que no resulta razonable por ser demasiado alta o demasiado bajo. La calidad de los indicadores de la productividad y del salario medio pueden ser diferentes, hay varios métodos para valorar el nivel del salario mínimo en los países en desarrollo. Fijándonos en datos de más de 130 países en transición, industrializados o en desarrollo hemos detectado que hay bastantes países en donde el salario mínimo queda tan bajo en la escala salarial que no impone prácticamente ninguna obligación adicional a las empresas, es lo que se conoce como minisalario mínimo. Este se encuentra principalmente en naciones surgidas del desmantelamiento de la Unión Soviética, varios países africanos y también en algunos de América Latina. Una situación totalmente opuesta, en la que se encuentran países como Asia, otros países de América Latina y otros países africanos, en donde el salario mínimo se sitúa en la parte de más arriba de la escala salarial. Este es demasiado alto para ser considerado un salario mínimo auténtico, es por ello por lo que se denomina maxisalario mínimo.

  1. INDICADORES.

Para valorar el nivel del salario mínimo éste puede compararse con tres indicadores de los salarios y de la productividad: el PIB por habitante, el PIB por trabajador y el salario medio. La primera indicación del nivel del salario mínimo, se compara éste con un indicador general de los ingresos: el PIB por habitante en paridad de poder adquisitivo en dólares internacionales. Se estima que un país tiene un salario mínimo mini si la relación entre el salario mínimo y el PIB por habitante es inferior a 0.30, y que tiene un salario mínimo maxi, si esta relación es superior a 0.60, ambos criterios se han fijado basándose en la distribución de los valores de la relación entre salario mínimo y PIB por habitante. Lo que más llama la atención es la cantidad de países en desarrollo que tienen una relación entre salario mínimo y PIB por habitante muy baja, de 0.15 a 0.30. Este grupo incluye varios países exportadores de recursos minerales muy valorados en el mercado mundial, tales como el petróleo, que tienen un PIB por habitante alto. Estos sectores exportadores suelen contar con una densidad de capital elevada y pocos trabajadores en cifras relativas, y no son representativos de la economía de su país respectivo, ello explica en parte que los países antedichos tengan una relación muy baja entre salario mínimo y PIB por habitante.

También apreciamos que alrededor de la mitad de la diferencia de la relación se debe a la diferencia del PIB por habitante entre un país y otro, que tiene más importancia que las cifras del salario mínimo. Por lo tanto resulta importante comprender de qué manera se mide el PIB. En realidad hay un gran inconveniente para la comparación del salario mínimo con el PIB, ya sea por habitante o por trabajador: las cifras del producto están infravaloradas en algunos países en transición. Las estimaciones del PIB de estos países pueden ser incluso menos fidedignas que las cifras de empleo. Se alza un escollo parecido en bastantes países en desarrollo. Marinakis y Velasco argumentan que una de las razones del alto valor que alcanza el salario mínimo respecto del PIB por trabajador en Paraguay estriba, precisamente, en que el PIB está infravalorado.

Algunos países tienen un salario mínimo desmesurado, como lo confirman las comparaciones con los indicadores de salarios y de productividad.

El nivel del salario mínimo condiciona en cierta medida su grado de efectividad, es decir, cuáles son las proporciones de trabajadores cuya retribución es del mismo orden que el salario mínimo y de una cuantía inferior. Hay muy pocas posibilidades de que un salario mínimo muy modesto sea efectivo, porque habrá muy pocos trabajadores que cobren ese salario o uno aún más bajo. A la inversa, un salario mínimo muy elevado tendrá más posibilidades de ser efectivo, pero también habrá el riesgo de que se respete poco, es decir, de que muchos trabajadores cobren un salario inferior al mínimo legal. No hay datos de una calidad homogénea sobre la proporción de trabajadores cuya retribución sea igual o inferior al salario mínimo. Ahora bien debido a las nuevas encuestas que se publican y al resurgimiento del interés por los salarios mínimos ya se pueden hacer estimaciones de varios países en desarrollo.

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