Taller psicología laboral "el trabajo"
nicolasv1991Síntesis14 de Abril de 2016
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“EL TRABAJO”
Taller de Psicología Laboral
Contenido
Problemática
Social
Conceptual
Cultura
Histórico
Anexos
Social
Conceptual
Cultura
Histórico
Problemática
La problemática de la presente investigación fue verificar o refutar si el trabajo, organización, condiciones, retribuciones y así también las condiciones sociales y culturales de los trabajadores han evolucionado de forma favorable.
Social
Elegir el trabajo ideal es una aspiración de todos nosotros. A todos nos gustaría trabajar en algo que nos motive y haga sentir felices, pero ¿qué variables pueden influir más en nuestra búsqueda?
Autoconocimiento.
Lo primero de todo es conocerse. Este es el punto de partida. Todos nosotros tenemos potencialidades y capacidades o competencias más desarrolladas, y no tan solo una de ellas. Si bien es cierto que podemos "entrenarlas" todas, hay algunas que nos son más afines. A partir del conocimiento de uno mismo encontraremos el camino más adecuado, algo que muchas veces nos conducirá a seguir formándonos. Por otra parte, tampoco debemos limitarnos: si nos atraen varios campos y consideramos que tenemos aptitudes para varios de ellos... activemos todas las opciones. Seamos sinceros... ¿qué es lo que queremos hacer?...mejor aún: ¿qué es lo que queremos y podemos ofrecer?
Conocimiento del Mercado Laboral.
El Mercado Laboral evoluciona sin detenerse. nuevas profesiones en auge solicitan profesionales preparados. es el caso por ejemplo de los community managers, de los personal shoppers o los entrenadores personales, de los desarrolladores de apps, etc... por citar a algunos, la lista es bastante larga.. otras profesiones son las "de toda la vida y para toda la vida", existirán siempre porque son totalmente necesarias: médicos, enfermeros, maestros,... Conocer el estado del mercado laboral es un segundo paso importante en el camino... ¿lo que yo quiero hacer está siendo solicitado?
Prioridades
Una vez sabemos quiénes somos y cómo está el mercado, el siguiente paso es establecer nuestras prioridades y definir claramente qué es lo que vamos a valorar en nuestra búsqueda: ¿satisfacción personal?, ¿salario?, ¿compatibilidad con nuestra vida familiar-personal? ... estos valores son fundamentales a la hora de encontrar el trabajo ideal. ¿hasta dónde quiero llegar? ¿qué precio (personal-económico-social-emocional) estoy dispuesto a pagar?
Búsqueda Activa, Actualizada y Creativa.
Difícilmente el Trabajo ideal vendrá a nosotros. Somos nosotros quienes tenemos que salir a su encuentro. Además de las conocidas técnicas de la entrega de currículums y formalización de solicitudes, las opciones de este siglo XXI son mucho más amplias: podemos utilizar portales virtuales, las redes sociales... Si somos creativos daremos a conocer nuestro perfil a muchas personas
¿Cómo escoger el trabajo ideal?
Una de las etapas más importantes en el proceso de recolocación laboral es analizar las ofertas laborales disponibles. ¿Cómo evaluar una oferta laboral? ¿Cómo compararla versus el trabajo actual? ¿El sueldo será la única variable a tomar en cuenta? Definitivamente es una variable importante, pero no la única. Actualmente se habla de un nuevo concepto que es el “salario mental”, aquella remuneración en la que un componente fundamental es la calidad de vida privada del empleado. De acuerdo a este planteamiento, en los criterios de selección de un trabajo la retribución ya no ocupa necesariamente el primer lugar para el empleado, sino que deja abierta la inclusión de otras variables como la de generar un equilibrio entre trabajo, familia y vida personal.
En el salario mental se abordan conceptos como el tiempo libre para asuntos personales o de familia, horario laboral flexible, trabajo a tiempo parcial (para el caso de madres de familia), permiso de maternidad o de lactancia más allá de lo estipulado por ley, permiso de paternidad, flexibilidad en los días de permiso y vacaciones cortas, teletrabajo, subvención a servicios de atención a familiares (como guarderías o residencias de ancianos), beneficios sociales extra saláriales como seguros médicos, plan de jubilación, seguro de vida, ticket restaurante y otros. Existen también otras variables a tomar en cuenta a la hora de evaluar una oferta laboral, las más importantes además del salario mental y el salario real son la localización de la empresa, el gusto por las funciones a realizar, la línea de carrera, la solidez de la empresa, la capacidad personal para desarrollar las funciones, las recomendaciones del personal que ya trabaja allí y la propia intuición. Este último punto, bastante subjetivo, aunque importante porque es la opinión del subconsciente, puede ser que racionalmente sea el trabajo que más nos convenga, pero la intuición, nos dice que no, eso hace que perdamos ilusión por el cambio. El arte está en saber ponderar adecuadamente cada una de las variables descritas de forma lógica y en su justa medida a fin de tener la tranquilidad de haber elegido la opción correcta, tomando en cuenta que no existe la seguridad total. En la duda, la prudencia sugiere seguir evaluando. Una mala decisión, es la peor opción.
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- El hombre en el trabajo
El hombre es un ser indigente con obligaciones que debe satisfacer. Para saciar esa apetencia necesita realizar una actividad (trabajo) a fin de transformar los recursos que le brinda la naturaleza y que deben ser explotados. Se trata de un combate ininterrumpido que nació con él y cuyas primeras etapas están jalonadas por el descubrimiento del fuego, el uso de los instrumentos de piedra, el cultivo de la tierra, el empleo de animales domésticos, etc. Pero cuenta además con un recurso valiosísimo, su inteligencia, a través del cual está en condiciones de transformar y convertir todos los recursos naturales.
Esa tarea exige actividades de investigación para descifrar las leyes naturales, los estilos de comportamiento que impone la vida social: modas, estilos, creencias, y el desarrollo del conocimiento para aplicarlos a la realidad, a través de la producción de bienes y servicios. Esta acción se transmite mediante el proceso educativo por el que las generaciones heredan el patrimonio cultural, científico y técnico de sus antecesores. Trabajo y educación unidos dinamizan las habilidades y operan cambios.
Para tratar de comprender esos cambios analizaremos la evolución de las condiciones de trabajo en dos etapas claramente diferenciadas, la primera antes de la irrupción de la revolución industrial y la segunda a partir de ésta. Y una tercera, haciendo referencia a los actuales cambios y transformaciones operados por la globalización económica de los mercados.
PRIMERA ETAPA
Apropiación
En la antigüedad el trabajo humano se caracterizaba por atender solamente elementales niveles de subsistencia en la que cada familia procuraba satisfacer sus propias necesidades. La organización social estaba compuesta por clanes y tribus donde la caza, la pesca, y la recolección de frutos que espontáneamente se producían constituían la forma de trabajar.
Artesanal
Paulatinamente y como consecuencia del desarrollo de las ciudades se van formando grupos de personas que pertenecían a un mismo gremio: herrero, talabartero, platero, etc. constituyéndose así las corporaciones, instituciones características del medioevo originadas en el siglo once y que se desarrollan notablemente en el siglo doce, en las cuales se establecían condiciones de trabajo minuciosas y obligatorias para todo el gremio.
La producción se realizaba fundamentalmente en forma familiar y aquellos que no pertenecían a la familia del maestro vivían con él como si lo fueran. Los integrantes de las corporaciones trabajaban en pequeños talleres y de acuerdo a rigurosas reglas del oficio, siendo la jornada de trabajo de sol a sol. La característica principal del artesanado radicaba en que el productor era propietario de los sencillos instrumentos que utilizaba y quién ponía su esfuerzo de trabajo. Además era más importante la pericia del trabajador que la acción de los instrumentos, a tal punto que la cantidad y calidad de la obra dependían de la aptitud del artesano.
Es en esta época que surgen los primeros elementos de la división de capital y trabajo, que habrán de acentuarse en la etapa siguiente: las materias primas las adquiría quién efectuaba la primera fase del proceso (por ejemplo el pañero en la industria textil), y luego pasaban por manos de quienes completaban las etapas subsiguientes (hilanderos, tejedores, limpiadores, tintoreros) hasta llegar el empresario que colocaba el producto en el mercado vendiéndolo al mejor postor.
SEGUNDA ETAPA
La revolución industrial
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