Analisis de Karen Horney y Erik Erikson

Conclusiones

Karen Horney

Fue una psiquiatra estadunidense de origen alemán y principal representante del neofreudismo. Caracterizada por combatir las ideas de Freud sobre la sexualidad femenina y por desarrollar sus propias teorías sobre las neurosis. Elogiada por muchos como un modelo para las mujeres, y odiada por otros al ser disidente del psicoanálisis.

Karen Horney creía firmemente en que muchos problemas psíquicos tenían su origen en la infancia, etapa en la cual la seguridad y afecto por parte de los cuidadores primarios serian fundamentales para el resto de la vida, ya que estos determinarían en conjunto con la cultura y las pautas sociales, la prevalencia de una personalidad sana o, por el contrario, una personalidad neurótica. Y algo a destacar de su teoría, fue su orientación cultural, antropológica y sociológica mediante las cuales rechazo las fuerzas instintivas y pulsiones sexuales, así como la omnipresencia del factor biológico como único determinante. Gracias a lo anterior, construyo su modelo de la personalidad, destacando la importancia de los factores innatos, pero también de los adquiridos, considerando al miedo y la angustia como las emociones fundamentales.

Una de las críticas más importantes a su teoría es el que utilizara como ejemplo su vida y experiencias personales para estructurar su teoría de la psicología femenina, en donde se le culpa de anteponer inconscientemente sus sentimientos personales e ira, a las pruebas objetivas. Pues Karen Horney mencionaría que la falta de afecto por parte de su padre seria determinante para el resto de su vida, cuestión que retomaría en el origen de las neurosis a causa de las deficiencias en la seguridad y el afecto en la infancia, y que para los seguidores de Freud no sería más que el deseo de culpar a su padre.

No obstante, Karen Horney retomo algunos puntos centrales del psicoanálisis ortodoxo y los implemento en su propia teoría, además de que estudio la psicología de la mujer, figura que socialmente vivía opacada ante la figura omnipotente del hombre, centrando todos sus trabajos en la explicación y defensa del comportamiento femenino; atreviéndose a tocar un tema que ni siquiera se había puesto en duda. Dicho de otra manera, fue una mujer revolucionaria que se atrevió a poner en tela de juicio las bases de la psicología de su época, enfrentándose a la fracción más conservadora de la ciencia y a la corriente psicológica más influyente del momento; el psicoanálisis. A su vez, se adentraba en un mundo dominado por los hombres, quienes criticaban sus teorías de la psicología femenina, minimizando sus aportes a las teorías de la personalidad y al desarrollo humano en general. Pues si bien fue una figura poderosa y emblemática, también fue ignorada y olvidada por muchos años hasta que en 1967 se publicó Psicología femenina, una colección de ensayos relativos a su pensamiento teórico y liberal. Actualmente se ha destacado su conocimiento teórico para el diagnóstico y tratamiento de las patologías de la personalidad, como figura del feminismo y como explicación al comportamiento humano, incluso ahora se sigue enseñando su teoría en las aulas de clase, demostrando el valor de sus ideas, la importancia de la infancia como determinante del desarrollo humano y la necesidad de estudiar a la mujer al igual que al hombre.

Personalmente esta autora me ayudo a hacer conscientes mis necesidades neuróticas, para poder

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