ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El proceso de maduración del niño


Enviado por   •  2 de Diciembre de 2022  •  Ensayos  •  1.548 Palabras (7 Páginas)  •  43 Visitas

Página 1 de 7

Ensayo

Leticia Monserrat Rodríguez Jiménez

Universidad del Centro del Bajío

Desarrollo infantil I

Jorge Heriberto Mendoza Ramírez

1 de diciembre de 2022

 

Introducción

¿Qué ocurre cuando las explicaciones de un psicoanalista que revolucionó la forma en que se veía el desarrollo de las relaciones interpersonales a partir de la infancia no son suficientes para explicar procesos observados posteriormente? Esto ocurrió con el pediatra, psiquiatra y psicoanalista Donald Woods Winnicott, quien nació en Plymouth el 7 de abril de 1896 y tuvo un fuerte interés en la manera en que el contexto de cómo se desenvolvía la infancia de un adulto, intervenía en el futuro desarrollo del mismo.

Así pues, con este ensayo se busca exponer el trabajo de este psicoanalista que influyó tanto en la visión que hoy en día se tiene del desarrollo infantil, y que además contribuyó tantas cosas que sirvieron bastante para poder seguir descubriendo e investigando cosas que en su momento no tenían una explicación clara.

Desarrollo

Para comenzar, es sumamente necesario aclarar que Winnicott comenzó su carrera profesional con siendo un médico con especialidad en pediatría, y gracias a las observaciones que hizo con sus pequeños pacientes, fue que esto dio paso a su interés por el psicoanálisis; lo que al final contribuyó al desarrollo de sus teorías.

De esta manera, es que se puede observar que sus teorías se basan en la premisa de que los principales conflictos psíquicos se deben a fallas ambientales, es decir, a los déficits en los cuidados ejercidos por la madre ante las necesidades de su bebé (Eleia, 2019).

Es por esto, que, para Winnicott, el desarrollo temprano es primordial, aspecto que comparte con Melanie Klein y respecto del cual se distancia de Freud, aunque como se verá posteriormente, fue gracias a los aportes de Freud sobre la infancia, que este psicoanalista logró desarrollar sus propias teorías, y es que, como él mismo lo dice:

Quiero advertir al lector que soy producto de la escuela freudiana o psicoanalítica. Ello no significa que acepto ciegamente todo lo que Freud dijo o escribió, lo cual sería absurdo ya que Freud desarrolló, eso es, modificó, sus puntos de vista (en forma ordenada, como cualquier otro científico) ininterrumpidamente hasta su muerte en 1939 (Durieux, 2005).

 

En consecuencia, es que Winnicott comienza a realizar sus propias observaciones, lo que posteriormente lo lleva a sacar sus propias conclusiones y teorías sobre el comportamiento de los niños, y es que, menciona desde las primeras palabras de “El proceso de maduración del niño” (obra en que se basa este trabajo), que la culpabilidad es un fuerte sentimiento que conduce a las personas a reducirse en impotencia y a contraer de cierta manera, melancolía y neurosis obsesiva, tomando en cuenta lo mencionado en el libro, se puede llegar a la conclusión de que ambos trastornos y sentimientos se deben a que el paciente siente más odio que amor dentro su cabeza, lo que lleva a que la culpabilidad tome más fuerza y arrase con los planes y el obrar común de las y los niños, y es que de no tratarse  tiempo, esto terminará destrozando la vida de los pacientes al poder llevarlos a un punto donde eviten realizar ciertas actividades por el peso de la culpa atribuida a cualquier hecho o persona.

Posteriormente, Winnicot menciona que (este) conflicto que tiene su origen en las ideas destructivas que acompañan al impulso amoroso. Como es natural, se trata de una fase pre-edípica; es decir, anterior a la instauración del complejo de Edipo (Winnicott, 1981).

Es en esta parte del texto, que ya se puede notar cómo es que su explicación acerca de la causa de estos trastornos no la localizó en el complejo de Edipo (tal y como lo hizo Freud); sino que su explicación al respecto se basa en las experiencias vinculares de los primeros meses de vida. Así pues, es que se puede observar que su obra completa se centra en la relación altamente cercana entre madre-hijo, aunque no excluye al padre, ya que lo consideran como un sostén para el mantenimiento del núcleo familiar. Sin embargo, el punto de las investigaciones de Winnicott, llevaron a que sacara las conclusiones de que la madre es una figura fundamental en el desarrollo psicológico del menor, siendo la conducta emocional de ésta la que va a determinar si el bebé puede alcanzar su verdadero self al servirle de yo auxiliar (Mimenza, 2017).

Más adelante, Winnicott establece que a lo largo del desarrollo el ser humano pasa por diferentes fases; existiendo en un primer momento una dependencia absoluta del bebé hacia los progenitores en la que no es capaz de contener la angustia, para a partir de los seis meses empezar a ser consciente de la necesidad de éstos y sus cuidados y a expresar su necesidad, hasta que finalmente se va avanzando hacia una independencia cada vez mayor. Y es en este apartado que menciona lo siguiente:

El desarrollo emocional del niño tiene lugar cuando se han provisto las condiciones adecuadas para ello; el impulso a desarrollarse nace del mismo niño, de su interior. Las fuerzas que impelen hacia la vida, hacia la integración de la personalidad, hacia la independencia, son inmensamente potentes y hacen que el niño, en condiciones favorables, haga progresos; cuando las condiciones no son suficientemente positivas, estas fuerzas quedan retenidas en el interior del niño, al que, de una forma u otra, tienden a destruir. (…) Si la salud es madurez, entonces la inmadurez, de la clase que sea, es mala salud mental y, por ende, una amenaza para el individuo y una pérdida para la sociedad. (Winnicott, 1981, p. 39).

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (9.9 Kb)   pdf (103.5 Kb)   docx (12.1 Kb)  
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com