Factores socio-afectivo en la ansiedad escolar

Factores socio-afectivo en la ansiedad escolar en los niños de 3er ano 4to ano y 5to ano de educación básica de la institución educativa eugenio espejo de la ciudad de chone en el periodo 2023 2024

En las culturas individualistas competitivas, las personas disfrutan de mayor libertad personal, tienen más orgullo de sus logros, disfrutan de más privacidad y se sienten más libres de elegir sus propios estilos de vida. Sin embargo, el costo personal es, entre otros, mayor vulnerabilidad ante los síntomas y enfermedades relacionadas con la tensión emocional.

Toda demanda del ambiente que crea un estado de tensión o amenaza y que requiere de cambio o adaptación provoca trastornos de ansiedad en algunos individuos. La presión que sienten los alumnos por obtener un buen rendimiento escolar puede provocar en ellos una exacerbación de la ansiedad.
La evidencia empírica indica que las personas que sienten que no están en control de los sucesos estresantes en sus vidas, son más propensas a experimentar trastornos de ansiedad que aquellas que creen tener control sobre esos sucesos.

Cada vez con mayor frecuencia, observamos en algunos estudiantes signos claros de alteraciones emocionales provocados por experiencias de la vida cotidiana. En las escuelas, la conducta disruptiva y la agresividad emergen de manera sorprendente, tanto por su complejidad como por su heterogeneidad.

La prevalencia de los trastornos ansiosos es incierta, ya que a menudo los estudiantes a quienes se les diagnostica algún trastorno ansioso suelen responder, además, a criterios de una o más perturbaciones adicionales Existen también, combinaciones de problemas conductuales que coinciden con concepciones de trastornos ansiosos en niños y adolescentes. Al mismo tiempo, cada niño y cada adolescente muestran distintos síntomas ansiosos y con diversa intensidad. Pueden variar también tanto en su persistencia como en el período en el que se presentan, obedeciendo a tres sistemas de respuestas: motoras, fisiológicas y subjetivas. Asimismo, no todos los niños y adolescentes experimentan el mismo patrón o intensidad de la sintomatología; las reacciones pueden variar en cuanto a su duración, persistencia y fluctuación a lo largo del tiempo.

Altos niveles de ansiedad reducen la eficiencia en el aprendizaje, ya que disminuyen la atención, la concentración y la retención, con el consecuente deterioro en el rendimiento escolar. Los muy ansiosos tienen dificultades para poner atención, se distraen con facilidad. Utilizan pocas de las claves que se otorgan en las tareas intelectuales. A medida en que van procesando la información, no organizan ni elaboran adecuadamente los materiales y tienden a ser poco flexibles para adaptarse a los procesos de aprendizajes. Aquellos con una inteligencia promedio sufren mayormente de dificultades académicas, ya que los mejores dotados intelectualmente pueden compensar la ansiedad. El fracaso es fuente de frustración en una escuela que estimula la competitividad en sus estudiantes. La frustración es uno de los factores que pueden llevar a la conducta agresiva, ya que fomenta la hostilidad entre los alumnos. La competencia por las calificaciones académicas aumenta la tensión emocional. La competencia entre los estudiantes genera hostilidad y está vinculada con la agresión, de tal manera que cuando los estudiantes compiten por rendimiento académico la violencia intraescolar aumenta (G Jadue · 2011).

La ansiedad en niños es una emoción que se presenta constantemente y por diversas razones en la que ellos se sienten amenazados o inseguros dentro del entorno en el que se encuentran, inicialmente se ejerce una función protectora ante el peligro, es normal que el niño sienta esta emoción al momento de iniciar la escuela, o que la madre lo deje al cuidado de otra persona, la emoción es difícil de controlar por él y se vuelve un trastorno de ansiedad que necesita de ayuda profesional para poder manejarlo, los padres de familia deben estar atentos a los cambios que surjan y de esa manera se podrá proporcionar el tratamiento adecuado. La ansiedad se manifiesta con nerviosismo, angustia ante un estresor real o imaginario, es un sentimiento de miedo, confusión, para los niños y es desagradable, los síntomas se hacen presentes con frecuencia los niños no saben cómo actuar. El niño puede presentar síntomas somáticos como: palpitaciones, dolor de estómago, sudoración, inquietud, malestar estomacal, hiperventilación. Se menciona que la ansiedad patológica se hace presente muchas veces sin que haya un desencadenante o estresor. El rendimiento escolar sirve para observar el avance educativo de los estudiantes, de acuerdo a las notas que ellos reciban se puede conocer si su rendimiento es alto, o bajo un buen estudiante presenta una excelente capacidad a los estímulos que esté reciba en su clase, se encuentran diferentes factores que influyen en rendimiento académico, estos pueden ser el exceso de tareas o evaluaciones y como se mencionaba la falta de técnicas adecuadas, el factor psicológico influye de gran manera en este proceso ya que no reciben la motivación necesaria, tienen muchas distracciones, hay desinterés por parte de los alumnos, la manera de calificar del docente interviene de gran manera en el desarrollo de los alumnos en el rendimiento escolar ya que algunos cursos deben ser explicados ampliamente, el bajo rendimiento escolar no es que tengan poca capacidad de retener información o que no sean buenos estudiantes ya que cada estudiante responde a una manera diferente esto basado en estímulos que pueda recibir dentro del aula y en el hogar. La ansiedad y el rendimiento escolar están relacionados ya que este trastorno puede influir en el desenvolvimiento escolar en el rendimiento de los niños. (Paredes-Mildred 2018)

La ansiedad es una emoción frecuente que todos experimentamos como temor, peligro y miedo, como respuesta a situaciones nuevas o amenazantes que experimentan los niños y adolescentes. Ayuda a la preparación, conservación y a enfrentarnos a condiciones estresantes. La asociación entre ansiedad y el rendimiento académico presenta una relación estrecha e inversa. Es decir, cuando se presentan niveles altos de ansiedad, el rendimiento académico disminuye. Un rendimiento deficiente puede traer como consecuencia estados emocionales como la disminución de la autoestima, anticipación al castigo, excesiva preocupación por el desempeño y sentimientos de vergüenza o culpa. Del mismo modo, estados ansiógenos intensos pueden producir bloqueos intelectuales y dificultades significativas en el desempeño académico.(  García Heredia · 2017 )

El rol que cumplen los padres, madres y entorno familiar en el desarrollo socioafectivo de los niños y niñas es decisivo, pues los infantes imitan y aprenden la conducta de aquellas personas con las que conviven, y esto se ve reflejado en la interacción con sus pares; cuando este ambiente no es el más óptimo, el actuar de los niños tampoco lo es y se ve afectado tanto en el ámbito educativo como en el social. Con respecto al ámbito socio-afectivo, los comportamientos presentados por los infantes, los cuales no son favorables en la convivencia armoniosa con los compañeros de clase, provoca desunión del grupo pues en ciertos casos no son incluidos, lo que repercute en su autoestima y autoimagen, es decir que se ven afectadas las relaciones tanto interpersonales como las intrapersonales. ( Corella Díaz · 2017 )

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