La Conducta Antisocial De Los Jovenes

INTRODUCCION

El cada vez más inicuo contexto económico en el que nos encontramos, inducido por la organización social elitista y disímil del sistema actual, ha provocado que se generen diversos fenómenos, como la pobreza extrema, la violencia, la delincuencia, la fluctuación familiar, etc., dichos eventos son mencionados asiduamente en los medios masivos de comunicación, y por diferentes investigadores y/o especialistas, sin embargo no se ha realizado aun un análisis profundo acerca de los verdaderos factores que provocan estos acaecimientos, o al menos los existentes no han impactado de manera apreciable para que se evalúe el tema eficazmente y así mismo se promuevan las acciones necesarias y pertinentes para un cambio en la organización social, política y cultural que nos permita suprimir dichas contingencias, esto requiere de un trabajo colectivo arduo y a largo plazo, que debe ser promovido paulatinamente por pequeñas acciones personales cotidianas.

El propósito de este escrito no es otro, si no el de analizar desde una perspectiva personal y tomando en cuenta opiniones de diversos especialistas, uno de los fenómenos más frecuentes en las últimas décadas y que se encuentra íntimamente relacionado con los mencionados anteriormente, la conducta antisocial de los jóvenes, o delincuencia juvenil de la cual existe un amplio consenso entre los investigadores y el público en general acerca de la naturaleza multi causal de dicha conducta.

En la Licenciatura en Educación Preescolar se promueve que la Educadora establezca un acercamiento directo con el alumno y su situación afectiva personal y familiar, es precisamente este contacto el que permitirá que las y los docentes intervengan directamente en la prevención de conductas perniciosas futuras, pues como lo hace notar Tremblay (1994) las actitudes y situaciones familiares desfavorables son un factor predictivo de las conductas delictivas en la juventud y adolescencia.

Así pues nos permitimos formar parte del consenso establecido acerca de las causas de dicho fenómeno, pero además pretendemos que este sencillo análisis aporte significativamente a la construcción de una imperiosa solución creando conciencia entre los diferentes actores involucrados en la problemática, es decir, la sociedad en general sin salvedad alguna.

Muchas son las reflexiones en torno a si existe un motivo generalizado por el cual los adolescentes y jóvenes opten por cometer algún tipo de conducta antisocial, entendamos primero ¿a que nos referimos con conducta antisocial? se entiende la misma como una actitud que atenta contra la integridad física de personas y/o de sus bienes, el modo de convivencia establecido actualmente en el que cada individuo lucha por su supervivencia y la de los suyos, se han llegado a establecer reglas que regularicen la convivencia entre seres humanos. Existen diferentes tipos de normas, algunas son vistas con mayor recelo, es precisamente este establecimiento lo que permite considerar una acción como “antisocial” o no.

A continuación nos permitimos exponer diferentes factores y efectos encadenados pueden envolver a los procesos que conducen a la comisión de un acto ilegal y que han sido objeto de múltiples estudios e investigaciones.

En primer lugar surge una incertidumbre acerca de la relación existente entre la comisión de delitos y los rasgos de la personalidad, Capsi et.al. (1994) y White et. al, (1990) coincidieron en sus estudios que rasgos como el débil autocontrol, impulsividad, emotividad negativa predecían una actividad delictiva en la adolescencia, tomando en cuenta que la emotividad negativa no se da de igual manera en todos los jóvenes, para algunos esta les causa un retraimiento social que los aleja de los actos delictivos, de igual manera la impulsividad se manifiesta de manera cognitiva (en la habilidad mental) y en la conducta (tal como hacer cosas sin planificar), siendo solamente la segunda una pauta para la conducta antisocial, de entre estos rasgos de la personalidad mencionaremos uno de los mas importantes y determinantes como lo es la agresividad hostil, ofensiva, factor sobresaliente en el que se tiene que prestar especial atención sobre todo en los primeros años, aunque Magnusson y Bergman (1988-1990) encontraron que la agresividad solo se relacionaba con la delincuencia solamente cuando formaba parte de una constelación de problemas de comportamiento sugiriendo así que era necesario considerar la conducta en términos de patrones generales y no solo de supuestos rasgos aparte. Pero es la agresividad la principal causante de que los niños establezcan relaciones deficientes con sus compañeros contemporáneos esto predice una inadaptación social en la edad temprana y media, aunque el rechazo de los coetáneos a una edad mas temprana predice conducta antisocial y delincuencia, la combinacion de rechazo y agresividad tiene especiales probabilidades de ir en una escalada de conducta anti social, (Patterson y Bank 1990), otro rasgo que se debe de tomar en cuenta es la hiperactividad que es la que posee una asociación mas vigorosa que las

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