Modelo de inteligencias múltiples y programación neurolinguistica

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD PEDAGOGICA EXPERIMENTAL LIBERADOR

INSTITUTO DE MEJORAMIENTO PROFESIONAL DEL MAGISTERIO

NÚCLEO ACADÉMICO SUCRE

EXTENSIÓN CUMANÁ

LA INTELIGENCIA

Cumaná, 20 de diciembre de 2019

Los seres humanos tenemos diversas cualidades que nos caracterizan como especie, aquello que nos hace quizás únicos no es el poder comunicarnos, movernos u otras cosas que podamos ser o hacer; por el contrario, aquello que nos hace únicos es la capacidad de aprender, de transformar lo aprendido, de mejorarlo, reinventarlo e innovarlo constantemente, y esto ha sido sin duda alguna el motor de avance de la humanidad, entre más aprendemos más entendemos y más seguimos buscando comprender esos vacíos que existen en la naturaleza y en la existencia, este poder lo llamamos “inteligencia”, esta inteligencia se encuentra innata en el hombre desde su nacimiento, y pese a ser el fenómenos determinante para el avance, también es un fenómeno objeto de estudio.

En ese sentido, la inteligencia es un concepto estudiado desde la antigüedad, los primeros intentos por describir esta particularidad humana surgieron de los griegos, quienes constituyeron inicialmente el término como una la unión de los términos logos y nous. Logos significa recoger, reunir, juntar, elegir, escoger, contar, enumerar, computar, referir, decir, hablar, y corresponde al desarrollado en un discurso argumentado. En cuanto al término nous, este se relaciona con la facultad de pensar, reflexionar, meditar, percibir y memorizar.

En la psicología, la inteligencia se define como la capacidad de adquirir conocimiento o entendimiento y de utilizarlo en situaciones novedosas. La inteligencia, se puede entender desde dos perspectivas: una cuantitativa donde podemos medirla y ajustarla a parámetros establecidos, y una cualitativa, donde la inteligencia es multidimensional y multidisciplinaria, esta no puede ser simplemente medida a través de los números, si no, que evoluciona en el ser constantemente, esta visión, un tanto cualitativa daría paso a teorías distintas entre las que destacan las “inteligencias múltiples”, que se estudiaran en breve.

Por otro lado, L. S. Gottfredson (1998) definió la inteligencia como aquella “Capacidad mental general que incluye la habilidad de razonar, planificar, resolver problemas, pensar en abstracto , comprender ideas complejas , aprender rápido y aprender de la experiencia, que es más que una destreza académica o del aprendizaje por medio de libros”.

Aunque existe una abrumadora cantidad de autores que definen y contextualizan a la inteligencia humana en variadas formas y con múltiples terminologías, la inteligencia tiene un grupo de peculiaridades igualitarias que le caracterizan como aquella capacidad de lógica, comprensión, autoconciencia, aprendizaje, conocimiento emocional, razonamiento, planificación, creatividad, pensamiento crítico y resolución de problemas. En términos más generales, se puede describir como la capacidad de percibir o inferir información, y retenerla como conocimiento para aplicarlo a comportamientos adaptativos dentro de un entorno o contexto.

Este fenómeno despertó gran inquietud en los investigadores dando la génesis de visiones diversas y con variados argumentos, hoy día podríamos exponer que estas teorías sobre la inteligencia develan formas, estructuras y buscan explicar la génesis de la inteligencia en el hombre, entre ellas tenemos: Teorías psicométricas, Teorías biológicas, Teorías del desarrollo y las Teorías de las inteligencias múltiples.

Por un lado las teorías psicométricas se relacionan con el desarrollo de las pruebas de inteligencia y con el análisis factorial. Estas teorías, no pueden verse en forma separada de las pruebas de inteligencia. Las pruebas de inteligencia son concebidas como instrumentos que permiten obtener una medida objetiva, confiable y válida de facultades psicológicas superiores, mediante el registro y análisis de las respuestas. El problema quizás, se encuentra en el que todos los seres humanos tienen una dinámica de aprendizaje distinto al otro, desarrollan habilidades y facultades en ámbitos diversos, las pruebas de inteligencia solo se basan en el análisis de una perspectiva tradicionalista del fenómeno de la enseñanza-aprendizaje.

En las teorías biológicas la inteligencia se ha estudiado desde la perspectiva del desarrollo en diversas especies, y en relación con aspectos como tamaño del cerebro, herencia, raza, y potenciales evocados cerebrales, entre otros. En los momentos actuales, los estudios en este campo se han dirigido hacia la búsqueda del sustrato neuronal de la inteligencia, la cual podría estar localizada en el córtex prefrontal (García-Molina, Tirapu-Ustárroz, Luna-Tario, Ibáñez & Duque, 2010).

Por otro lado, las teorías del desarrollo constituyen otro amplio grupo que estudian la inteligencia humana desde el desarrollo, Jean Piaget y Lev Vigotsky. Piaget fueron dos grandes exponentes de esta corriente. En el caso de Piaget, este no consideró la inteligencia como innata. Propuso, en cambio, un desarrollo gradual desde el nacimiento hasta la adultez; proceso en el cual intervienen dos factores individuales: la interacción con el medio y la dotación genética. Dicho desarrollo consta de cuatro estadios: sensoriomotor, preoperacional, operaciones concretas y operaciones formales. En cada estadio, aparecen estructuras nuevas, que se van construyendo a partir de las anteriores y permiten su diferenciación.

No obstante, Vigotsky, considera que el desarrollo humano es la resultante de la síntesis producida por la unión de dos factores distintos: la maduración biológica (Línea natural), y la histórica cultural (línea cultural). El desarrollo cognitivo, por su parte, es producto del aprendizaje logrado a través de la mediación, de pares y mayores que apoyan y estimulan su comprensión y destreza para utilizar los instrumentos culturales.

Para Vigotsky, casi todo lo que las personas deben hacer se encuentra implícito en el contexto en el cual viven, pertenece a su cultura. Por ejemplo, los niños aprenden el idioma materno y diferentes guiones sociales, como saludar y pedir algo, por estar culturalmente expuestos a ellos. Afirmó que las actividades conjuntas, realizadas entre niños y adultos, permiten a los primeros comprender y participar en forma más rápida en las actividades sociales y culturales.

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