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Orígenes De La Educación Para La Paz, Motivaciones Teóricas.

maelpapi16 de Mayo de 2014

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TEMA I

Orígenes De La Educación Para La Paz, Motivaciones Teóricas.

1.1 Teoría y educación para la paz.

Al finalizar el siglo XX, el concepto de paz se define como un estado de armonía del ser humano consigo mismo, con su entorno natural y con sus semejantes. La armonía que se hace presente cuando las necesidades del ser humano se satisfacen en el marco de estructuras y procesos que no obstaculizan el desarrollo de la persona individual ni del colectivo. Por consiguiente, este concepto de paz, obliga a la integración de la teoría del desarrollo, con la teoría de las necesidades y la teoría de la paz.

No es posible hablar de la paz sin incluir conceptos como derechos humanos, democracia, desarrollo, moralidad y ética, equidad, identidad, autoridad, violencia, responsabilidad, disciplina, diversidad, etc.

El desarrollo y auge del modernismo a partir del modelo cartesiano-newtoniano trajo consigo los beneficios de la comodidad y el bienestar material para un importante segmento de la población mundial. Superó la cosmovisión de la Edad Media y desarrolló una cosmovisión analítica- positivista que fragmentó al planeta, recortándolo en territorios de los cuales algunos se consideran propietarios. Fragmentó al hombre dividiéndolo en cuerpo, emociones, razón e intuición. Fragmentó el conocimiento en ciencia, filosofía, arte, religión (todas estas subdivididas en fragmentos hasta conformar una babilonia).

1.2 El concepto de paz.

Paz (del latín pax), definida en sentido positivo, es un estado a nivel social o personal, en el cual se encuentran en equilibrio y estabilidad las partes de una unidad; definida en sentido negativo, es la ausencia de inquietud, violencia o guerra.

En el plano individual, «paz» es lo contrario de la guerra estado interior (identificable con los conceptos griegos de ataraxia y sofrosine) exento de sentimientos negativos (ira, odio). Ese estado interior positivo es deseado tanto para uno mismo como para los demás, hasta el punto de convertirse en un propósito o meta de vida. También está en el origen etimológico de los saludos: shalom en hebreo y salam en árabe significan «paz» o «la paz esté contigo o con vosotros», y también se emplean como despedida, significando entonces ve en paz o id en paz; en cambio, salve, el saludo latino, es un deseo de salud, concepto también muy relacionado. El saludo de paz o beso de la paz es una parte de la misa en que los asistentes «se dan la paz».

1.3 Paz negativa, paz positiva y no violencia.

La paz negativa es latente en nuestras sociedades de forma peligrosa e insidiosa debido a que no somos capaces de diferenciarla correctamente de la paz positiva. La paz negativa convive silenciosamente entre nosotros y se da, por ejemplo, cuando en nuestros hogares permitimos de forma tácita el abuso y opresión por parte de padres violentos o cuando callamos y somos indiferentes ante el abuso que es sometido aquel pobre niño trabajador que pulula en las esquinas en búsqueda de unas escasas moneadas que paliarán su hambre y que aún en su situación de miseria, no somos capaces de hacer algo para cambiar la realidad de ese niño. Cuando en la periferia de nuestras ciudades dejamos que recursos tan elementales como el agua y demás servicios básicos se vean condicionados a la entrega de altas sumas de dinero, ocasionando que contradictoriamente sea el que menos tiene el que pague más por el servicio. Cuando permitimos que la corrupción empiece a ascender peligrosamente en las instituciones estatales y de forma tácita la aceptamos y convivimos con ella, cuando se pierde esa capacidad de indignación ante casos de injusticia.

La Paz positiva por otra parte, nos lleva al estado más puro de una sociedad perfeccionista. Un encuentro perfecto de un mundo en el cual la igualdad se convierte en la ópera prima para articular la

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