¿Porque Es Un Problema El Aprendizaje En El Aula?

RESUMEN

¿POR QUÉ ES UN PROBLEMA EL APRENDIZAJE EN EL AULA?

Presentación

El presente es un resumen de la lectura ¿Por qué es un problema el aprendizaje en el aula? Este presenta algunas teorías obre aprendizaje y como el maestro valerse de ellas en su quehacer docente, tratando de clarificar primeramente lo que significa aprender y como aprendemos.

APRENDIZAJE

El aprendizaje es un cambio duradero en el individuo mismo, no es afectado por la herencia genética. Puede ser un cambio en la conducta, la percepción, la motivación, o alguna combinación de esas características o capacidades. Influye en nuestras vidas en todos sus aspectos representando lo peor y lo mejor de los seres humanos, así como lo peor y lo mejor de nosotros mismos.

El hombre, en comparación con los animales inferiores, tiene ciertas características distintivas, que lo hacen especial. Primeramente habla, está ligado al tiempo – su pasado y su futuro forman parte de su percepción actual de las cosas-, es un ente cultural, tiene la capacidad de interactuar socialmente con sus congéneres, y lo más significativo es su proceso perceptual, ya que, puede verse a sí mismo como sujeto y objeto, conocedor y conocido. El hombre, es un ser biológico con superioridad ante las otras especies animales por su capacidad de conocimiento y discernimiento.

Los miembros de todas y cada una de las generaciones construyen sobre la generación precedente. La cultura, herencia social de una sociedad, es el resultado del aprendizaje acumulado de muchas generaciones. Constantemente estamos aprendiendo, con intencionalidad o

no, ya que este aprendizaje ocurre cuando la experiencia produce un cambio relativamente `permanente en el conocimiento o la conducta del individuo, modificación que puede ser deliberada o no, para mejorar o para empeorar. Este cambio puede ser producido por la experiencia o la interacción de la persona con su entorno y los resultados de este cambio se encuentran en el conocimiento o la conducta.

Los psicólogos cognitivos, que resaltan el cambio en el conocimiento, consideran que el cambio es una actividad mental interna, no observable de manera directa; y, los psicólogos que hacen énfasis en la conducta suponen que le resultado del aprendizaje es un cambio conductual y subrayan los efectos de los acontecimientos externos sobre los individuos.

¿OMO APRENDEMOS?

1) Primera explicación: Contigüidad y condicionamiento clásico.

El principio de contigüidad aparece en todas las explicaciones de aprendizaje asociativo. Este principio afirma que dos o más sensaciones quedaran asociadas, siempre que ocurran juntas y con la frecuencia suficiente: más tarde, cuando ocurra una (estímulo) la otra también será recordada ( Rachlin, a991).

El condicionamiento clásico se concentra en el aprendizaje de respuestas fisiológicas o emocionales involuntarias y automáticas como respuesta al estímulo. Este proceso consiste en presentar un estimulo neutral primeramente y junto con un estimulo incondicionado, para dar lugar a la respuesta que por sí solo daría el estimulo incondicionado. Al hacerlo así durante las veces suficientes, llega un momento que por sí solo el estimulo neutral, provoca la

respuesta física o emocional automáticamente, convirtiéndose este en el estímulo condicionado que da lugar a una respuesta condicionada, en ausencia del estimulo incondicionado inicial. Recordamos aquí los experimentos de Pavlov, (quien descubrió el condicionamiento clásico en la década de los veinte), con perros, a quienes alimentada después de sonar un diapasón (estimulo neutral). Después de hacerlo algunas veces de esta manera, los perro empezaban a salivar (respuesta condicionada), aun cuando no habían recibido alimento.

Aprendemos por acondicionamiento clásico en muchas de nuestras reacciones emocionales a diversas situaciones, y estas pueden interferir a veces con el aprendizaje académico. Es posible utilizar los procedimientos basados en condicionamiento clásico para ayudar al alumno a aprender respuestas emocionales más adaptativas.

2) Condicionamiento operante: La búsqueda de nuevas respuestas

La mayor parte de las conductas no son provocadas por estímulos, sino emitidas o producidas a voluntad. La gente “opera” de manera activa en su entorno para producir diferentes consecuencias. Se llaman operantes a estas acciones deliberadas y condicionamiento operante al proceso de aprendizaje relacionado con este comportamiento, porque aprendemos a conducirnos de ciertas maneras al operar en el medio.

“Conducta” es lo mismo que “respuesta” o “acción”, un término referido a lo que hace cada persona en una situación. Podemos pensar en una conducta como si estuviera entre dos conjuntos de influencias ambientales (sus antecedentes) y las que siguen (sus consecuencias (Skinner, 1950).

Esta relación puede presentarse muy simplemente como antecedentes- conducta- consecuencias. Nuestra conducta operante puede ser modificada haciendo cambios en los antecedentes, las consecuencias o ambos.

Según la postura conductual, las consecuencias determinan en gran medida si una persona repetirá el comportamiento que la llevó a obtenerlas. Siempre que una conducta persiste o aumenta con el tiempo, se concluye que las consecuencias refuerzan al individuo que las realiza, por lo que las consecuencias que intensifican la conducta asociada son reforzadoras.

Hay dos clases de reforzamientos: reforzamiento positivo y reforzamiento negativo. El reforzamiento positivo es cuando la consecuencia que favorece a la conducta es la aparición (adición) de un estimulo; y el reforzamiento negativo es cuando lo que fortalece a la conducta es la desaparición o sustracción de un estimulo. Si a determinada acción le sigue la terminación, evitación o escape de una situación inversiva, es probable que la acción se repita en una situación similar. Lo “negativo” del reforzamiento negativo no implica que la conducta reforzada sea por fuerza inadecuada. Asimismo con frecuencia se confunde el reforzamiento negativo con el castigo. El proceso de reforzamiento positivo o negativo, siempre implica el fortalecimiento de la conducta, siempre está asociado con aumentos de la conducta; mientras que el castigo supone la disminución o supresión de la conducta.

En el condicionamiento operante, los antecedentes, los acontecimientos que preceden al comportamiento, brindan información acerca de que conductas

conducen a consecuencias positivas y cuales a resultados negativos.

Las señales antecedentes o la señalización nos ayudan a discriminar, es decir interpretar las situaciones antes de proceder a una conducta determinada. El maestro puede usarlas deliberadamente en el aula para influir en el comportamiento de los alumnos y establecer las condiciones para conductas que deben ocurrir en ciertos momentos pero que se olvidan con facilidad. Una buena estrategia consiste en proporcionar una señal adicional, o instigador, después de la primera Deben seguirse dos principio (Becker, Englemann y Thomas, 1975): primer, debe asegurarse de que el estimulo ambiental que desea convertir en señal, ocurra inmediatamente antes que el instigador que está empleando, de modo que los estudiantes aprendan a responder a la señal y no se confíen solo del instigador. Segundo, desvanezca el instigador tan pronto como sea posible para evitar que sus alumnos se vuelvan dependientes. Entregar a los alumnos una lista de verificación o desarrollo es un ejemplo del uso de señales o instigadores. Conforme se van aprendiendo los procedimientos, el maestro puede dejar de servirse de la lista de verificación, pero seguir recordando los pasos; cuando los alumnos ya no necesitan instigadores orales o escritos se dice que han aprendido a responder en forma apropiada a la señal ambiental.

3) Análisis conductual aplicado

Es el uso de principios conductuales de aprendizaje para la modificación del comportamiento. Requiere especificar con claridad la conducta que hade modificarse, su medición cuidadosa, el análisis de los

antecedentes y los reforzadores de la conducta inapropiada o indeseable.; supone también intervenciones basadas en los principios conductuales para cambiar la conducta y cuidadosa medición de los cambios. Por lo regular los maestros en las aulas, no están en condiciones de seguir estos pasos.

METODOS PARA PROMOVER CONDUCTAS

a) Reforzar con la atención al maestro. Consiste en alabar a los estudiantes con buen comportamiento e ignorar los errores y la mala conducta. Para ser eficaz el elogio tiene que ser contingente a la conducta que se quiere reforzar, especificar con claridad la conducta que es reforzada y ser creíble; en otras palabras: el elogio tiene que ser reconocimiento sincero de una conducta bien definida.

b) Selección de reforzadores: el principio de Premarck. Igual que con los elogios, el maestro puede aumentar en forma considerable el aprendizaje y las conductas deseables si hace que los privilegios y recompensas estén asociados directamente con estos. Según el principio de Premarck, una conducta muy frecuente (actividad preferida) puede ser un buen reforzador de una conducta menos común (actividad menos preferida). Para que este principio funcione, la actividad menos preferida debe ocurrir primero.

c) Moldeamiento. El maestro debe descomponer en una serie de pequeños pasos la conducta compleja que se espera que el estudiante domine al final, por medio del análisis de tareas. Un análisis de tares presenta una imagen de la secuencia lógica de los pasos que llevan a la meta final. El conocimiento de esta secuencia puede ayudar a los maestros a garantizar que los

estudiantes

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