TP evaluativo II entrevista psicológica (caso Elena)

CASO ELENA

Edad: 36 años

Escolaridad: secundario completo. Terciario interrumpido

Lugar de origen: ciudad pequeña de la provincia de Córdoba

Grupo familiar: Padre: 65 años, jubilado

                   Madre: 62 años, ama de casa.

Hermanos:        varón: 39 años, casado, abogado.

                      Mujer: 37 años, casada, ama de casa.

                   Varón: 33 años. Soltero, no trabaja.        

1- Identifique síntoma/s y Rasgo/s patológico/s de carácter. Fundamente.

2- Indique crisis y problemática vital. Fundamente.

3- Identifique estilo/s comunicativo/ y el subcomponente estilístico. Fundamente.

4- A partir de lo desarrollado anteriormente, acerque un pronóstico del caso. Fundamente.

 Es necesario tener en cuenta lo que plantea Liberman respecto de las entrevistas previas correctamente evaluadas ya que estas permiten tener cierta visión pronostica de lo que podemos esperar que sucederá en las primeras fases del análisis.  

Estas entrevistas poseen una doble finalidad. Por una parte, en lo referente al paciente posibilitan que él incorpore un tipo diferente de interacción comunicativa. Por otro lado, en lo referente al terapeuta, permitirá plantear algunos criterios para determinar qué podemos esperar del paciente en el tratamiento analítico. Es decir que el terapeuta va a poder formar un criterio referido a los rasgos esenciales del paciente y observar el impacto de las entrevistas en el paciente como experiencia contrastante con el proceso analítico posterior.

Las entrevistas previas dan la posibilidad de que dos personas se reúnan para comprometerse a realizar una tarea en beneficio del auto-conocimiento de una de ellas.

La evaluación de estas entrevistas permite formarnos un criterio lo más objetivo posible de lo que podemos esperar del analizado y así poder ver que es lo que necesitara de nosotros.

1.  Liberman, considera que el síntoma es lo que molesta a la persona  y el yo los siente como ajeno, algo que se impone, es decir, que es contrastante con el rasgo de carácter, considerando a este, aquel síntoma que ha perdurado en la vida de una persona y ha llegado a convertirse en un rasgo de carácter (de su personalidad) porque el yo ha incorporado a los rasgos de carácter para mantener  las defensas  adecuadas frente a los síntomas.

En el caso Elena llega con síntomas de carácter orgánica aunque por indicaciones médicas no tiene problema alguno. Se lo observa en el siguiente fragmento del discurso de la paciente:

 “Mire, yo consulte aun clínico por mis problemas. Tengo palpitaciones a la mañana y a la noche. El Dr. Me dijo que era un problema nervioso, que tenía que consultar con un psiquiatra.”

   Nombramos las palpitaciones, también le tiene miedo a la muerte.

“siempre he tenido temores a la muerte, desde chica. Me acuerdo que a los seis años me daba miedo que mis padres y mis hermanos salieran porque pensaba que podía pasarles algo, que podían morirse. Esos temores los siento mucho últimamente, tengo miedo a morirme…”

          En la segunda entrevista  cuenta que  desconoce el cambio generado en su personalidad, se reconoce como alegre y divertida pero ahora se muestra más seria y callada, mas introvertida. Esto se logra observar en el discurso cuando dice:

“… antes era alegre y espontanea pero después me volví tímida, empecé a tener dificultades para entablar conversaciones, para salir. Siempre fui muy nerviosa, de querer decir algo y no poder, de retorcerme toda.”

Con todo lo nombrado anteriormente podemos considerar que estos son  los síntomas con los que llega Elena al consultorio ya que son determinados conductas y pensamientos que de alguna manera molestan al yo de la paciente.

En cuanto a los rasgos de carácter se dice que el yo ha claudicado en mantener defensas adecuadas frente a los síntomas, esto paso como consecuencia de la persistencia previa durante una época de la vida de determinado síntoma. Cuanto más marcados son los rasgos de carácter, menor es la calidad de vida, la capacidad de adaptación a los cambios y el bienestar emocional ya que la persona llega a organizar su vida de acuerdo a este rasgo. En el presente caso podemos considerar como rasgo de carácter  en Elena el hecho de que su inseguridad y desconfianza en cuanto que relata que ella siempre se siente usada por los hombres cuando emprende una relación de pareja.  A esto lo podemos apreciar cuando dice:

“…me parece que mi principal problema son las parejas, estoy sola y cansada de que me vaya mal. Desconfío de los hombres…”

“…conocí a un chico de mi edad, el decía quererme. Estuvimos juntos mucho tiempo, me propuso casarnos y al poco tiempo pretendió que tuviéramos relaciones sexuales. Lo deje porque me sentí usada, maltratada.”

“también estuve con otro muchacho, contador, a él directamente no lo puede llegar a querer. Salió con lo mismo. Me perseguía con el rema de las relaciones sexuales, eso siempre fue un problema serio para mí. De allí viene la desconfianza, me parece que los hombres solo quieren cama y sexo. Y yo digo: que busquen otra, conmigo no.”

De acuerdo a lo citado se podría considerar como rasgo de carácter al hecho  que la desconfianza que Elena siente hacia los hombres condiciona de alguna manera todas las relaciones que se le van presentando y repitiendo siempre los mismos fracasos y por el mismo motivo.

Otro rasgo de carácter que logro detectar es en la segunda entrevista cuando Elena cuenta como las palpitaciones condicionan su calidad de vida.

“No sé qué me pasa, las palpitaciones me asustan, no quiero pensar, solo quiero dormir, fumo mucho. Yo creo que lo mío es orgánico, no me gusta salir, prefiero quedarme en casa. Me da miedo descomponerme en la calle, que me pase algo.”

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