ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Enseñanzas Para Jovenes


Enviado por   •  1 de Julio de 2013  •  1.241 Palabras (5 Páginas)  •  304 Visitas

Página 1 de 5

QUÉ TIPO DE CORAZÓN TIENES?

Lectura: Mateo 13:1-9.

Por favor cambia tu mente a la forma de la de un niño para que puedas entender la Palabra que Dios tiene para ti hoy.

Una de las parábolas más famosas de Jesús (y de paso, una de mis favoritas) es la parábola del sembrador. Esta parábola encierra una profunda y maravillosa enseñanza que quisiera compartirles. La historia habla acerca de un sembrador, que es Dios; una semilla, que es la Palabra de Dios; y cuatro terrenos en los que cayó la semilla, que son cuatro tipos de corazones o formas de recibir la Palabra de Dios. ¿Qué tipo de corazón tienes? ¿Cómo estás recibiendo la Palabra de Dios? A continuación una explicación de cada uno de los cuatro tipos de corazones; mientras lees la explicación, pídele al Espíritu Santo que te revele qué clase de corazón tienes y analízate, en busca de llegar a tener el corazón que Dios quiere para que su Palabra dé fruto en ti.

1. Un corazón carnal (Mateo 13:4)

El primer terreno en el que cayó la semilla, fue en el camino; y luego vinieron las aves y la comieron. Un corazón carnal se refiere a un corazón que tiene tanto ruido que no puede entender la voz de Dios.

Veamos un ejemplo que nos puede ayudar a entender este tipo de corazón. ¿Conoces la historia de Nicodemo? Nicodemo era un fariseo, maestro de la ley en Israel y principal entre los judíos. Una vez, fue donde Jesús de noche, (Juan 3:1-15) y Jesús le dijo que tenía que nacer de nuevo para poder entrar al reino de Dios. Nicodemo no entendió lo que Jesús le quería decir, porque no tenía su mirada en las cosas de arriba, sino en las de la tierra; no tenía un corazón dispuesto a creer, sino uno predispuesto a preguntar y a dudar. Pese a que Nicodemo tenía tanto conocimiento de Dios, no podía entender su Palabra, sencillamente, porque la estaba intentando interpretar con su propio conocimiento y saber; y, ese conocimiento, lo cegaba para no ver las verdades del reino. Si leemos el texto, vemos que Nicodemo siempre preguntaba “¿Cómo…?”; esto implica una actitud de una persona que quiere entender la verdad de Dios a su manera y que no rinde su ser en plena obediencia y fe. Este es un corazón carnal.

Una persona con mente carnal, quiere entenderlo todo a su manera, siempre tiene preguntas y dudas, su mente no está tranquila y quiere razonarlo todo. Una persona así no puede creer, pues la fe implica sacrificio de uno mismo por la aceptación de una verdad más grande; y, al estar tan apegada a su propio saber, fácilmente llega el malo (las aves) y arrebatan la palabra que fue sembrada.

2. Un corazón olvidadizo (Mateo 13:5-6):

El segundo terreno son los pedregales, donde la semilla brotó pronto pero luego vino el Sol y la quemó, porque no tenía raíz. Un corazón olvidadizo es aquel que recibe la Palabra con emoción y gozo, pero que, cuando vienen las dificultades, se olvida de ella.

Una persona con corazón olvidadizo, tiene un principio muy fuerte, de hecho, crece rápidamente; a los ojos de los demás, parece que va a ser un gran líder de la iglesia; con poco tiempo de conocer la verdad de Dios, ya está predicando, ministrando, orando y trabajando en la iglesia con mucha pasión. Sin embargo, cuando viene una dificultad y la aflicción, cuando viene la persecución por causa de la Palabra que promulga, cuando viene el tiempo de la prueba; decide renunciar a todo y volver atrás porque no tiene la suficiente firmeza para seguir adelante. La fe no es cuestión de emociones, sino de firmeza.

En Juan 6:66, nos habla de un grupo de discípulos que no pudieron soportar la verdad que Jesús vino a enseñar

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (7 Kb)  
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com