Caminando hacia lo prodigioso en la enseñanza

Caminando hacia lo prodigioso en la enseñanza

por Cynthia Rothschild

Traductor: Mabel González, Ecuador

ENSAYO

A través de las caminatas de observación los estudiantes descubren lo que hay de extraordinario en lo ordinario y desarrollan una conexión personal con el mundo que los rodea.

Todos los días camino durante veinte minutos hacia la escuela a lo largo de las calles de Brooklyn. Día tras día, camino por las mismas aceras y las mismas calles. A menudo, me encuentro perdida en mis propios pensamientos- generalmente repasando mis planificaciones para las clases o haciendo listas mentales de cosas pendientes. Algunas veces voy tan a prisa, que me encuentro prácticamente trotando. Pero la mayoría de días, trato de reservar este tiempo para presenciar los detalles de mis alrededores. Cada día, cada caminata, es diferente –un puñado de hojas que han caído de un castaño; alguien que ha perdido su guante gris en el suelo; un gorrión que disfruta del agua de la lluvia en su pequeña casa. Cuando comienzo a ver estos signos, se que he abandonado mi prisa habitual y he entrado en la realidad del caminante que observa. Cada nuevo detalle hace de este habitual viaje una verdadera aventura. Miro los paisajes de cada día con ojos nuevos, mis sentidos se agudizan y comienzo a absorber mis alrededores. De esta manera, mi caminata diaria me ayuda a hacer contacto con mi medio ambiente y con los delicados y milagrosos sistemas que existen dentro de él y a sus alrededores.

¿Para que enseñar “Las caminatas de observación”?

Las caminatas de observación no son el tipo de caminatas que generalmente hacemos y pueden ser incluso una experiencia completamente nueva para algunos de nuestros estudiantes. Aún mas, aprender a caminar concientemente puede abrirnos a un mayor sentido de conexión con nuestro medio ambiente y darnos la oportunidad de encontrar gozo en los detalles de nuestra vida cotidiana. Para nuestros estudiantes, esta conexión especial con su lugar inmediato puede ser el comienzo de una vida de cuidado por el medio ambiente. Tomar tiempo de nuestras clases para ayudar a nuestros alumnos a observar maravillados el mundo que los rodea, puede darles una nueva manera de ver lo ordinario como extraordinario y finalmente de ver la conexión que ellos tienen con el medio ambiente y tomar conciencia acerca de cómo quieren relacionarse con el.

Ya sea un paraje urbano o rural, hay muchas oportunidades de integrar a las caminatas de observación en el programa de estudios.

Las caminatas de observación pueden ser parte de una clase de Ciencias Naturales orientada hacia la observación científica; estas caminatas pueden también formar parte de una unidad de Estudios Sociales que se centra en la historia de un lugar determinado o como yo las uso, pueden ser parte del programa de estudios de Ética ambiental, para ayudar a los alumnos a explorar aquellas preguntas acerca de la relación entre los seres humanos y el planeta Tierra. Ge descubierto que estos ejercicios reobservación son útiles como presentación de un curso, como introducción de las lecturas más complejas de la asignatura o como tarea semanal. Aunque las actividades aquí descritas funcionan mejor con alumnos de 13 años o más, pueden modificarse para estudiantes de menor edad al darle más importancia a las discusiones grupales en lugar de a la lectura y redacción.

Las caminatas se pueden asignar individualmente a cualquier estudiante como tarea o asumirse como actividad grupal o para todos, durante la horade clase.

Antes de las caminatas

Las caminatas de observación para ser más efectivas, deberían ser precedidas por lo que yo llamo PRE-CAMINATA. Esta etapa de la actividad consiste en lecturas y discusiones grupales acerca de cómo caminar como un observante activo. He descubierto que es más fácil comenzar cuando obtengo información de las experiencias de mis alumnos y les pido que recuerden las veces en las que se han sentido concientes de lo que les rodea. Frecuentemente ellos lo han experimentado al mudarse a un nuevo lugar, al viajar o cuando han estado a punto de dejar un lugar que amaron. A veces mis estudiantes recuerdan lugares especiales cerca de sus hogares, como por ejemplo: casa construidas en árboles o algún parque donde pasaban tiempo con sus familias. Pídales a sus estudiantes, en parejas o en grupos, que piensen en dichos lugares especiales en sus vidas y que luego compartan con la clase lo que recordaron acerca de estos lugares. ¿Era el agua de la piscina que les encantaba más azul que ningún azul que ellos hayan visto jamás? ¿Eran las estrellas más brillantes la noche antes de macharse que lo que ellos hayan visto en cielo alguno? ¿Qué era diferente o especial acerca de este lugar que lo hacía resaltar?

Una conversación profunda acerca del significado de sus lugares especiales puede ayudar a nuestros estudiantes a darse cuenta de la importancia de la observación y de que ellos ya poseen un registro inconciente acerca de los lugares en los que han estado.

Otro punto es discutir acerca de viajes, cortos o largos, y de la influencia que estos viajes han ejercido en ellos. También pueden plantearse discusiones acerca de los cinco sentidos y de cómo cada uno de estos sentidos observa de una determinada manera. Lecturas, especialmente fragmentos acerca de lugares de la localidad, pueden tener características adecuadas para esta etapa de PRE-CAMINATA (algunas de mis actividades favoritas se detallan en la sección de RECURSOS)

A través de las caminatas de observación, los estudiantes descubren lo extraordinario en lo ordinario y desarrollan conexiones personales con el mundo que los rodea, con la maravilla del mundo que los rodea

Caminando libremente

De alguna manera análoga a la redacción-libre, la caminata-libre es una excelente manera de presentarles a los estudiantes la idea de caminar como herramienta de aprendizaje. Los estudiantes caminan libremente por un tiempo limitado, cinco o diez minutos, por áreas que les son familiares o lugares que consideren tranquilos. Les pido a mis alumnos que permitan que su atención divague durante estas caminatas libres y que observen que nace de ello. Una caminata-libre puede ser seguida por un ejercicio de redacción dirigido. Los estudiantes pueden escribir, sin hacer pausas, acerca de lo que llamó su atención mientras caminaban y cuales pensamientos o recuerdos estas observaciones avivaron en sus mentes.

Caminatas

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