Evaluación Psicopedagógica De Niños, Niñas Y jóvenes Con Deficiencia Mental

Elección de un modelo en Educación Diferencial integral para la evaluación psicopedagógica de niños, niñas y jóvenes con Deficiencia Mental

Al estudiar distintos modelos de evaluación nos ayuda a identificar las necesidades que se deben tener en cuenta dentro de la Discapacidad Intelectual desde su definición, la cual se presentaría dentro de una edad escolar derivando a que los docentes utilicen distintos modelos de de evaluación psicopedagógicas que faciliten la comprensión del alumno o alumna y del medio que lo/a rodea, para así colocar en marcha un efectivo plan de acción.

Al momento de plantear el termino de evaluación en Educación Diferencial, inmediatamente nos surge la pregunta de ¿Qué y cómo evaluar a una persona con Discapacidad Intelectual? pero antes de responder el ¿qué y cómo evaluar? tenemos que tener en cuenta que es la Discapacidad Intelectual, la cual durante toda su historia a tenido diferentes tipos de definiciones que han ido evolucionando con el tiempo, es por esto que la definición que se encuentra más adecuada es la siguiente: Persona que posee un coeficiente intelectual bajo 70, un déficit en las conductas adaptativas y una manifestación del déficit antes de los 18 años de edad. Por lo tanto este concepto nos ayudará a desarrollar el tema, debido a que tomaremos partes de esta definición para analizar las formas de evaluación que están inmersas en la deficiencia mental.

En primer lugar si tomamos en cuenta el CI o coeficiente intelectual, que es la representación numérica de la inteligencia del individuo, que generalmente es analizado a través de una evaluación psicométrica que permite predecir el rango de CI de la persona entrevistada. Dentro de estas pruebas podemos encontrar algunas como: La Escalas Bayley de Desarrollo Infantil, Escalas McCarthy de Habilidades de los niños, Escala de Inteligencia Stanford-Binet, Escala de Inteligencia Wechsler para niños-Revisada (WISC-R), entre otras. Las cuales deberán estar estandarizadas con la clasificación CIE-10 (clasificación de trastornos mentales) que establece los rangos y categorías de la Discapacidad Intelectual, los cuales son definidos y establecidos a continuación por dictamen del decreto N° 170 Art. 58 de Educación especial:

Categoría Rango de puntaje-CI

Limite 70-79

Discapacidad Intelectual Leve 50-69

Discapacidad Intelectual Moderada 35-49

Discapacidad Intelectual Grave o Severa 20-34

Discapacidad Intelectual Profunda Por debajo de 20

(Decreto Nº 170, de educación especial, Chile, 2010) Otra variable dentro de la definición de discapacidad intelectual que se debe evaluar son sus habilidades adaptativas donde la AAMR (1992) propone 10 áreas de destreza adaptativas, que nos servirán de referencia para identificar las carencias y fortalezas en las siguientes conductas: La Comunicación, Cuidado de sí mismo, Vida en el hogar, Destrezas sociales, Uso de recursos comunitarios, Autodirección, Salud y seguridad, Destrezas académicas funcionales, Ocio y Trabajo. (Centeno, 1999)

Ahora bien, si consideramos la edad en la cual se puede adquirir o presentar la discapacidad intelectual de él niño o niña, se encuentra dentro del periodo escolar, por lo tanto debe tener un modelo de evaluación para poder presentarle una educación de acurdo a sus capacidades, es por esto que existen diferentes modelos a través de los cuales se puede trabajar la Discapacidad Intelectual, las cuales pueden ser transitorias ó permanentes.

Dentro de los modelos de evaluación existentes, podemos encontrar el psicométrico, evolutivo, conductista, ecológico, procesamiento de la información, el basado en el currículo y el multidimensional, entre otros. Cada uno de ellos se basa en diferentes postulados según sus autores correspondientes.

El modelo psicométrico que consiste en relacionar las edades cronológicas y metales del alumno (a) respecto a sus pares, teniendo así un enfoque clínico ya que su fin es categorizar la inteligencia de la persona como ya se menciono anteriormente.

El modelo evolutivo trabaja en base de etapas, en las cuales quiere lograr la equivalencia de la edad mental a la cronológica de la persona.

El modelo conductista identifica las conductas del sujeto pero a demás toma en cuenta el contexto en el cual está inmerso.

En el modelo ecológico evalúa al individuo en su contexto natural, es decir, el medio ambiente en el que se desenvuelven, donde genera relaciones desde y hacia ellos, en el cual Bronfenbrenner propone cuatro niveles o sistemas los cuales son: Macrosistema, Exosistema, Mesosistema y microsistema.

Otro modelo es el procesamiento de la información enfocándose en la adquisición, almacenamiento y utilización de la información por parte del sujeto.

La evaluación basada en el currículo está compuesto por otros modelos como el conductista y ecológico, asociando la enseñanza individual y contextual.

Finalmente el modelo Multidimensional que plantea la evaluación de los aspectos personales y ambientales, tomando en cuenta las redes de apoyo que rodean a la persona. Este modelo toma cinco dimensiones para evaluar de forma integral a los individuos, las que son resumidas en el siguiente esquema

(Alonso, 2003)

El modelo que presenta mayor validez a nuestro parecer es el modelo multidimensional, debido a que este abarca otros modelos como por ejemplo el modelo ecológico.

Desde la mirada multidimensional presenta dentro de sus áreas terminología que se menciona en la definición de Discapacidad Intelectual, es decir, se dirige hacia las capacidades intelectuales del individuo ubicándolo en rangos estandarizados, también evalúa las conductas adaptativas y genera tres directrices más, haciendo más efectiva su evaluación, pues toma en cuenta los roles sociales en los que está envuelto el individuo, su contexto y su salud.

Al

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