Identidad universitaria ensayo

EVARISTO MORALES REZA

Conocer a la U.N.A.M., su historia, tradición y legado, así como el funcionamiento de esta, debiera ser obligatorio para todos los integrantes de su población, llámense: académicos, administrativos, funcionarios, directivos, incluso visitantes, pero más aún, para sus estudiantes de todos los niveles, escuelas y carreras, en todas las modalidades: escolarizado, sistema abierto y a distancia.

Pese a que hay cierto rechazo sobre esta asignatura, es imprescindible y de suma importancia, saber dónde se encuentra uno, tener identidad, sentirse parte de algo, saberse universitario, más aún si se es parte del “SUA”, al menos en la carrera de psicología, donde más del 50% de las materias son en línea e incluso es posible cursar toda esta a través de un computador.

De esta manera pocos son los espacios que tenemos para sentir ese espíritu “puma”, en alguna ocasión una compañera comento, “solo me siento universitaria, los sábados porque es el único día que asisto a clase presencial”, es aquí donde, como dice el dicho “me cayó el 20”, del porque y para que esta asignatura.

Este trabajo pretende evidenciar la necesidad que tenemos de conocer, un poco más, nuestra casa de estudios, quien nos ha adoptado como hijos, se busca a través de un breve recorrido por su historia y actualidad podamos sentir ese apego, ese comparable al de la familia, pues la U.N.A.M., nos recibe como una verdadera madre con los brazos abiertos, ofreciéndonos todas las bondades que posee y ha construido para nosotros.

Iniciemos con la historia, la Real y Pontificia Universidad de México, su fundación se da en la segunda mitad del siglo XVI, por mediación de religiosos ante los reyes de España, tras muchos trabajos y gestiones se instauro la universidad en la Nueva España, con la finalidad primaria de otorgar educación a los hijos de españoles, peninsulares o criollos.

Podemos destacar, que esta universidad tuvo un papel preponderante en la Independencia de México, con la aportación que hicieron algunos de sus egresados a dicho movimiento, “entre las figuras asociadas con Morelos en las campañas de independencia había muchos graduados de la Universidad de México, incluyendo a Ignacio López Rayón, Mariano Matamoros y José Sixto Verduzco”, (universidad, la Real y Pontificia Universidad de México, John Tate Landing, p. 5).

Brincamos hasta 1881, año en que Justo Sierra, propuso la integración de la Universidad de México como una institución independiente, aun cuando esta meta se cristalizo hasta 1910. En el año de 1929, se produjo un movimiento estudiantil, en protesta por algunas medidas, a su parecer, eran perjudiciales para los propios estudiantes, el gobierno resolvió el conflicto otorgando la autonomía a la universidad, siendo el 11 de julio de 1929 el día que Ignacio García Téllez toma posesión como primer rector autónomo.

Otro paso importante fue, la construcción de ciudad universitaria, esta se dio a mediados del siglo pasado, con la intervención de arquitectos e ingenieros egresados

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