LAS COLECTIVIDADES ESTRUCTURALES: LOS GRUPOS

LAS COLECTIVIDADES ESTRUCTURALES: LOS GRUPOS

Decirnos que una colectividad es estructurada -o, lo que es equivalente, que constituye un grupo- cuando sus miembros están unidos unos a otros por relaciones suficientemente definidas. Dichas relaciones pueden haber sido organizadas voluntariamente, como en el caso en una empresa profesional o, por el contrario, ser espontáneas, como en una familia. En todos los casos, los miembros tienen en el grupo una situación determinada que denominamos su status particular1. Así pues, existe un verdadero ajuste de las parta en el todo y una interdependencia de las partes: es lo que constituye la estructura.

Esta interdependencia puede no ser percibida o sentida por los miembros como formando para ellos un todo en el que se integren; entonces permanecen en una posición de cada uno para sí y de «relaciones-con-el-otro». Por el contrario, puede ser percibida y sentida al menos de un dato confuso y constituir entonces una sociabilidad por fusión parcial, un «nosotros». Así, el aspecto funcional del grupo es la consecuencia de la actitud de los miembros frente a la estructura.

Pero se debe considerar también al grupo bajo su aspecto funcional. Todo grupo realiza una función social de la que sus miembros tienen o no consciencia. Esta función puede ser enteramente general o enteramente especializada. Si tomamos el caso de una familia tradicional, que vive en un pueblo, sin gran relación con los vecinos, la familia suministra a sus miembros o por lo menos contribuye en gran manera en suministrarles todo lo que la vida social implica: acogida, aprendizaje social, bienes necesarios, seguridad, distracciones, religión. Si tomamos el caso de una empresa profesional moderna, este grupo, por e) contrario, sólo suministra a sus miembros asalariados a cambio de su trabajo una suma de dinero y nada más. A la colectividad más extensa, suministra sus productos o servicios mediante retribución.

1. sobre la cuestión de los estatus, cf. capitulo noveno.

De este modo, los grupos o colectividades estructuradas pueden corresponder a dos tipos principales de relación: fusión parcial y oposición parcial; también pueden corresponder a dos tipos funcionales principales: la generalidad y la especialización. Teóricamente deberían resultar cuatro clases de grupos2. Pero, de hecho, se encuentran principalmente colectividades globales con relaciones comunitarias y colectividades especializadas con relaciones asociativas, es decir con una actitud relacional de oposición parcial3. A las primeras, se les da generalmente el nombre de comunidades; a las segundas, el de asociaciones. Así las llamaremos en adelante.

2. Teóricamente, se podrían encontrar: colectividades globales con fusión parcial; colectividades especializadas con fusión parcial; colectividades globa1es con oposición parcial; colectividades especializadas con aposición parcial.

3. Recordemos que el término oposición, en este contexto, no tiene necesariamente el sentido de antagonismo; sino solamente el de relación entre personas o grupos que conservan su independencia en dicha relación, y pueden tanto cooperar o hacerse concesiones como “oponerse” unos a otros, pero conservan siempre el sentido de su independencia.

I. LAS COMUNIDADES

Puesto que acabamos de caracterizar las comunidades, colectividades estructuradas, tanto por su aspecto funcional como por su aspecto relacional, no nos extrañará que los autores insistan ya en un aspecto ya en otro, según el tipo de estudios que hagan. Por ejemplo, el aspecto funcional es puesto de relieve en particular por ciertos autores americanos que definen la comunidad como una unidad de seres humanos que mantienen relaciones recíprocas para la satisfacción del conjunto de sus necesidades sociales4.

Estos autores señalan que la colectividad, llamada así comunidad, no es necesariamente una autarquía, es decir, un grupo que por sí mismo satisface por entero todas sus necesidades sociales, sino sólo un grupo que participa parcialmente en la realización de todas esas necesidades. Una pequeña comunidad puede estar incluida en comunidades más amplias, como la familia está incluida en la localidad, la localidad en la provincia, etc. Para que dicha colectividad sea comunitaria, es preciso y basta que participe en la satisfacción de todas las necesidades sociales; no es necesario que las realice plenamente ella sola. El ejemplo más típico sigue siendo, en las sociedades primitivas, el de las familias que se integran en los clanes, y los clanes en las tribus, con un mínimo de organización especializada.

El aspecto relacional es puesto más de relieve por otros autores. Por ejemplo: Tönnies, en su célebre distinción entre comunidades y sociedades «el querer natural, orgánico, inherente al ser, etc.», que caracterizan a la comunidad y «el querer de elección, el querer facticio o la voluntad reflexiva», que caracterizan lo que denomina «sociedad». Así para él la comunidad se manifiesta por un querer espontáneo e irreflexivo de estar juntos; cuando los miembros cobran consciencia de la comunidad, la ven necesariamente como un todo del que son miembros, y su integración a este todo precede su toma de consciencia en tanto que personas.

Esta dualidad de aspectos, contenida en la idea de comunidad, puede conducir a confusiones, si no se tiene cuidado en explicar como se define. Ocurrirá que un autor, por insistir más que otro en uno de los dos aspectos, excluirá lo que otro ha incluído formalmente. Deberemos, pues, estudiar las características secundarias de la comunidad bajo cada uno de tales aspectos.

4. Este aspecto funcional de la comunidad es el que retiene la atención de FICHTER: Comunidad es un grupo territorial de personas con relaciones recíprocas, que se sirven de medios comunes para lograr fines comunes (trad. castellana, P. 155). Aún se destaca más en la descripción que hacen de la comunidad MAC IVER y PAGE: «Cada vez que los miembros de un grupo, pequeño o grande, viven juntos de tal manera que comparten no solamente tal interés particular, sino también las condiciones básicas de una vida común, llamamos a este grupo una comunidad. La característica de una comunidad es que la vida de cada uno puede vivirse enteramente en ella. No puede vivirse la totalidad de una vida en una empresa de negocios o en una iglesia; si puede hacerse en una tribu o en una ciudad. El criterio básico de la comunidad es pues, que en ella puede darse un sistema completo de relaciones sociales». (Society, p. 8-9).

1. CARACTERÍSTICAS FUNCIONALES

El aspecto esencial de la comunidad o colectividad funcional global consiste

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