Los Diplomaticos Y Las Negociaciones Internacionales

Los diplomáticos y las Negociaciones Internacionales

Resumen

Los países han ido desarrollando instituciones y figuras que le ayudan a resolver pacíficamente muchas de las disputas que surgen entre los Estados. El arreglo directo de los conflictos que se dan entre ellos por las vías diplomáticas comunes es la forma mejor utilizada para terminar con las controversias. A este medio se le conoce con el nombre de negociación.

El Diplomático a lo largo de su carrera se ve envuelto en distintos procesos de negociaciones, con objetivos que van desde la paz entre las naciones, hasta negociaciones económicas y comerciales.

En la actualidad más que en otros momentos de la historia, el Diplomático está involucrado en una amplia gama de negociaciones. Negociar es una necesidad permanente y una de las responsabilidades de los Gobiernos.

Este ensayo plantea que el Diplomático es una figura vital en los procesos de las negociaciones internacionales y que para poder responder a los desafíos de las negociaciones en que participa, debe cumplir una serie de requisitos, que involucran desde las actitudes personales hasta las aptitudes profesionales.

Para estos fines, expondremos en este documento una breve reseña de las negociaciones internacionales, el papel que juega el Diplomático y los requisitos que debe cumplir éste para lograr una negociación exitosa.

Las Negociaciones Internacionales

De acuerdo con el criterio de Lucia Ruiz Sánchez, “la negociación internacional es un proceso en que se relacionan por la vía pacífica, dos o más sujetos del derecho internacional para establecer o modificar una situación y llegar a un acuerdo que, en la mayoría de los casos, debe ser aceptable para todos”. Con el paso del tiempo, el término negociación ha sido ampliado y hoy se entiende como “la relación entre actores que permite llegar a un acuerdo satisfactorio para las partes”.

La negociación es el medio esencial en el desempeño de la actividad diplomática. La diplomacia se distingue de otras formas de relación internacional gracias a la negociación. En efecto, cuando no hay negociación, entendiendo por tal la defensa de los propios intereses mediante la búsqueda de un compromiso o acuerdo aceptable para todas las partes afectadas, tampoco puede hablarse verdaderamente de diplomacia, aunque formalmente pudiera aparentarlo.

La naturaleza negociadora de la diplomacia expresa el carácter cooperativo que posee esta relación, ya que ninguna negociación puede desarrollarse si las partes afectadas no están dispuestas a colaborar, por lo menos en lo que tiene que ver con la búsqueda de compromisos y su posterior cumplimiento.

No obstante, es necesario aclarar en este punto que existen numerosas negociaciones internacionales que no forman parte de la diplomacia. Esto se debe a la falta de subjetividad de los actores, a la naturaleza de las cuestiones negociadas o a la falta de representatividad de los negociadores. En todos estos supuestos la negociación no es una auténtica negociación diplomática aunque en ocasiones se utilicen los canales diplomáticos como los agentes y las misiones para realizarlas.

Un ejemplo común de negociación no diplomática son las negociaciones entre ejecutivos de empresas multinacionales y miembros de la misión diplomática con vistas a formalizar la adopción de proyectos conjuntos, como son las fusiones y adquisiciones, ya sea en el propio país o en terceros Estados. Otro ejemplo de negociaciones no diplomáticas se da cuando dos gobiernos se disputan la representatividad de un Estado. En estos casos, el gobierno

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