MATRIMONIO Y UNIÓN DE HECHO

EL MATRIMONIO Y UNIÓN DE HECHO

A lo largo de la historia se ha encontrado que en todas las sociedades hay una regulación para las uniones afectivas entre un hombre y una mujer, este tipo de régimen se llama matrimonio, cuando está constituido legalmente o en su defecto, cuando existe una convivencia o unión libre; dependiendo del contexto va a tener una reglamentación y unos parámetros diferentes que no siempre van a ser uniformes, existe el caso en el que se sancione civilmente, penalmente o en el que no tenga ninguna consecuencia o sea tolerada.

El origen del matrimonio no sería cultural, sino que procede de la misma naturaleza del hombre, sería por tanto una institución y no un producto cultural, con unas características específicas como los son la unidad, indisolubilidad y apertura a la vida, que vendrían definidas por la naturaleza del amor entre hombre y mujer.

El reconocimiento civil que las leyes hacen del matrimonio debe respetar la naturaleza de esta institución, de ahí la oposición de la iglesia católica al matrimonio polígamo, poliándrico y homosexual.

El matrimonio es por tanto, una necesidad del ser humano de tener un acompañamiento afectivo de otra persona, generalmente del sexo opuesto, en donde se entra a compartir un sentimiento que genera un parentesco al que también se le atribuyen derechos y deberes sucesorios. Por lo que suele decirse que matrimonio, contrato y propiedad son tres pilares básicos de dicha sociedad.

El matrimonio es una institución civilmente única, por lo que algunos países reconozcan efectos a los matrimonios celebrados en forma religiosa, donde en su mayoría tienen fundamentos jurídicos caracterizados por:

La dualidad donde sólo es posible la unión marital entre un hombre y una mujer, unidos y vinculados en orden a su convivencia y procreación; es allí donde se empieza a conformar la familia, nacen los hijos con quienes se adquieren múltiples compromisos.

Aunque existen algunas excepciones en otras culturas, como en el caso de la islámica, donde se permite que un hombre contraiga matrimonio con más de una mujer, y lo que no genera ningún vínculo jurídico entre ellas, pero sí el de cada una con su cónyuge.

Lo que puede parecer un poco extraño para nuestro contexto, es respetable ya que las ideologías y pensamientos varían de una cultura a otra.

Otro fundamento jurídico del matrimonio es la heterosexualidad matrimonial, exige la pertenencia de los miembros de la pareja a sexos diferentes; aunque en muchos países se ha generado modificación a esto, existen uniones de parejas formadas por el mismo sexo que buscan la posibilidad de legalizar su unión, objetivo que en algunas ciudades se ha logrado.

Siendo un hecho que a la luz de muchas opiniones puede ser o no aceptado, y no es considerado normal dentro de los límites de la constitución de una familia, pues puede dificultar el desarrollo adecuado de la misma.

Pero considero, que se debe respetar el derecho a la igualdad y la sociedad debe ir adecuándose a las transformaciones que van surgiendo a lo largo de la historia; aunque es un proceso que parece extraño dentro del normal desarrollo de la vida social, en las culturas que no se ha permitido se deberían evaluar este tipo de comportamientos y analizar la

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