Mejoramiento De La Produccion De Leche

La ganadería bovina es un sistema de producción que proporciona alimentos a la población humana: tanto de manera directa, a través de insumos como la carne o leche; como indirecta, con productos lácteos, como los quesos, de gran importancia en la alimentación del ser humano.

Aunque son varios los factores que pueden influir positivamente en el rendimiento animal, no cabe duda de que uno de los más importantes es la alimentación.

Una dieta bien balanceada y un manejo alimenticio adecuado optimizan la producción de leche y la salud de la vaca. La tarea del productor es alimentar a los animales, según sus necesidades y en forma económica.

Mejorar la producción de leche a través de un buen manejo alimenticio, que aun siendo costosa la alimentación con suplemento es una inversión retornable con un incremento favorable al productor.

El ciclo productivo de la vaca comienza con el parto y comprende la lactancia hasta el período seco, comprendiendo un descanso en este periodo.

Las principales razas de ganado lechero de las cuales dispone el país son las Holstein, Pardo Suizo y la raza Carora.

En su condición de raza lechera tropicalizada, la raza Carora presenta una serie de ventajas para el productor agropecuario interesado en el mejoramiento de calidad y cantidad, la producción lechera de su finca.

El ganado Carora posee una serie de características fenotípicas que lo difieran e identifican de cualquier otra raza lechera del mundo, al mismo tiempo, revelan su grado de adaptación a los climas tropicales, como son el pelaje claro y sus ubres funcionales.

El suplemento cubre las deficiencias que pueda presentar un recurso forrajero básico, el suministro en cantidades masivas sin racionalizar su uso, atenta contra la eficiencia física y económica de cualquier sistema de producción ya que es un insumo costoso.

La suplementación posee objetivos disimiles. Por ello, es necesario definir que se pretende con la suplementación.

La suplementación puede realizarse con alimentos energéticos (granos), fibrosos (heno, silajes, entre otros.), concentrados proteicos (harinas de oleaginosas), concentrados minerales y/o vitamínicos.

En nuestras condiciones, donde la dieta básica de los animales son las pasturas, la suplementación con heno y silo busca fundamentalmente cubrir los periodos de déficit en cantidad y calidad de las pasturas en el tiempo.

América latina con aproximadamente el 25% de la población mundial de vacunos (Shert, 2007) y en ellos coexisten países con énfasis exportador, Brasil, primer exportador a nivel mundial, argentina 4º, Uruguay 7º, entre otros (Rearte 2007) e importadores, sin embargo, en todos ellos la producción de leche bovina es un rubro importante del sector pecuario y la cría se realiza fundamentalmente en sistemas pastorales sin subsidios.

Las fluctuaciones en la producción lechera entre años refleja la influencia del clima, manejo, alimentación, por lo que se han convertido en prioridades del sistema de producción. La mayoría de los países latinoamericanos, miran al mejoramiento del manejo alimenticio y a su vez al crecimiento de la población lechera. Cualquier opción para lograr este objetivo debe tener presente que la producción lechera forma parte del sector exportador, por ellos estas prácticas deben ser compatibles con la producción de leche con denominación del origen y amigables con el medio ambiente.

Se conoce desde hace mucho tiempo que la nutrición y la lactancia tienen efectos sobre la producción de los bovinos. Teniendo quizás como uno de los mayores desafíos a los que se enfrenta la ganadería en relación a la producción lechera.

El manejo alimenticio de las vacas lecheras es uno de los factores que tiene mayor incidencia en la producción de leche. Esto se hace más importante si se considera que el costo alimenticio incide por lo menos en un 50% del costo total del litro de leche. Por otra parte, una buena alimentación permite una mejoría en la producción de leche en el ganado lechero.

El proceso productivo del sector de la producción, engendra un sistema de difícil transformación, el cual presenta fuertes obstáculos para innovar, intensificar y mejorar la productividad y calidad de sus productos a costos razonables.

La estructura productiva actual, está llena de desperdicios, retardos y pérdidas, por consiguiente, es ineficiente, dentro de una altísima variabilidad, hay tecnologías exitosas que usan y manejan los recursos de manera más eficiente.

El país dispone de una ganadería adaptada que intervenida correctamente se logran cambios significativos en la producción y productividad. Las posibilidades del desarrollo son tangibles, pero pasan por; comprender su evolución, modificar sus actuales escenarios, como ordenar el mercado, precios justos, asistencia técnica e investigación efectiva, acciones que deben ser organizadas con los productores para enfrentar problemas que van desde la inseguridad en el campo, pasando por los aspectos tecnológicos esenciales, hasta los altos costos del dinero y de los insumos; que logren quitarle el conjunto de restricciones que tienen actualmente el sector primario, así será factible que exprese su potencial.

La producción de leche es un fenómeno complejo dinámico, que no puede ser estudiado por métodos convencionales, se conocen por aproximaciones sucesivas y es fácil caer en sesgos con la realidad. Este peligro reafirma el compromiso con la verdad, en la búsqueda de comprender y conocer lo que sucede, para realizar proposiciones de cambio favorables, que sistemáticamente se mejore globalmente la unidad de producción a través de una restructuración integral dentro de un permanente mejoramiento continuo del proceso productivo. Es oportuno revisar y corregir los enfoques y seguir trabajando este tema tan importante que tienen implicaciones

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