OS SISTEMAS DE EVALUACIÓN EN AMÉRICA LÑATINA

1. ASPECTOS QUE INTERVIENEN EN SU DESARROLLO

1.1 La perspectiva de los organismos gubernamentales

En las tres últimas décadas el campo de la evaluación ha alcanzado un importante desarrollo teórico y metodológico en virtud de la necesidad de implementar mecanismos que propendan por garantizar el monitoreo de los sistemas educativos, de modo que se pueda valorar el impacto de políticas adoptadas. Uno de estos avances está relacionado con su campo conceptual: del paso de la medición, en términos de asignar puntajes, a desempeños de los estudiantes -desde visiones inspiradas fundamentalmente en la psicometría-, a concepciones de evaluación como proceso mediante el cual, con el aporte de diversas disciplinas, se puede dar cuenta del estado de desarrollo de ciertos procesos educativos y, desde los cuales, se pueden establecer estrategias importantes para mejorar su desempeño.

Sin embargo, los gobiernos no hacen explícito el hecho de que esta concepción asume que todo tipo de evaluación tiene en su base una escala de valores que es justamente la que le permite valorar, es decir, establecer una confrontación entre lo deseable de alcanzar y lo alcanzado en un determinado proceso educativo. El deber ser y el estado alcanzado, están mediados por las perspectivas teóricas en las cuales se sustentan las evaluaciones que se realizan desde campos de saber específicos. Asumir un enfoque conceptual acerca de la enseñanza del lenguaje, de las matemáticas o de los "factores asociados", implica ya un sesgo en cuanto a los tipos de resultados que se ofrecerán y a la concepción de "calidad" de la educación.

La evaluación escolar se ha empezado a asumir desde una perspectiva que implica de cierta forma un proceso de investigación y seguimiento: definición de elementos de investigación y recogida de información, de análisis e interpretación; valoración según criterios validados socialmente y adecuados al contexto educativo en cuestión, así como formulación de conclusiones, definición de políticas a implementar y validación de dichas políticas.

Otro importante desarrollo es el relacionado con el tipo de escalas que se utilizan. Dependiendo, nuevamente, de la perspectiva teórica y de los tipos de resultados que se quieran exhibir, se han utilizado escalas con referencia a la norma, para selección de estudiantes, y escalas con referencia a criterio, en el cual se da cuenta de lo que ha aprendido un estudiante. Un cambio adicional en la concepción de la evaluación educativa, se relaciona con la necesidad de impulsar estudios de tipo cualitativo, los cuales podrían complementar y profundizar en los aspectos que desde la investigación cuantitativa se aprecian como factores que aportan positiva o negativamente a un determinado desempeño. Este es el caso de estudios sobre escuelas que obtienen distintos niveles de desempeño (alto, medio o bajo) a pesar de estar ubicadas en los mismos contextos socioculturales. En Uruguay y en Chile se les han denominado estudios de escuelas eficaces frente a escuelas bloqueadas. México y Colombia también han realizado estudios en esa misma línea.

1.2 La evaluación externa en América Latina

Para los gobiernos de los países de América Latina, la evaluación se ha convertido en una herramienta en cuanto a la caracterización del estado de los procesos educativos y a la consecuente discusión respecto de la definición de políticas que aporten significativamente al mejoramiento de la educación.

Con este fin, desde finales de la década del 80, se dio especial impulso a la puesta en marcha de sistemas de evaluación: Brasil y Chile inician actividades en 1988. Durante la década de los 90s, el resto de países de la región "toman la iniciativa" de consolidar sus respectivos sistemas de evaluación: Honduras, Colombia, República Dominicana, Argentina, El Salvador, los cuales son seguidos por México, Costa Rica, Paraguay, Venezuela, Bolivia y Perú.

Estos sistemas de evaluación surgen por diferentes razones. La más recurrente: la sugerencia de los organismos internacionales que hicieron empréstitos para este sector . Dicha sugerencia se hacía con el interés de que los países contaran con una estrategia que permitiera hacer un seguimiento objetivo a las políticas de educación adoptadas y dar cuenta de sus avances. Las consideraciones sobre el tipo de mecanismo, las formas de monitoreo y las estrategias de evaluación

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