Resumen El Suicidio Durkheim

Resumen libro “El suicidio”

Suicidio Egoísta

Suicidios Europeos: Protestantes > Católicos. Hay que comparar ambas religiones en el seno de una misma sociedad.

En lo que respecta a los judíos, su actitud para el suicidio es siempre menos que la de los protestantes, y generalmente, es también inferior, aunque en una proporción menor, a la de los católicos. Los judíos que viven en la ciudad se dedican a profesiones intelectuales. El suicidio es un acto que no lesiona a nadie más que a la víctima. La intolerancia religiosa, cuando es muy fuerte, produce un efecto contrario: en lugar de impulsar a los disidentes a respetar más la opinión, les habitúa a desinteresarse de ella. Ambas religiones- católica y protestante- prohíben el suicidio, la autoridad viene del mismo Dios, pero la segunda es más autor de su creencia (ej interpretación de la Biblia). También cuenta con menos creencias y prácticas comunes. La judía resulta ser más fuertemente concentrada (menos suicidios) puesto que reglamenta de un modo minucioso todos los detalles de la existencia y deja muy poco lugar al juicio individual. Cuantos más dogmas y preceptos hay, cuya interpretación no se abandona a la conciencias individuales, son necesarias más autoridades competentes para definir el sentido de aquellos (ej. Hay más sacerdotes católicos en una ciudad que protestantes).

En suicidios, las profesiones liberales ocupan el 1º lugar, el 2º funcionarios públicos. Estadísticamente, en todos los países (eurocentrismo), la mujer se suicida mucho menos que el hombre, y es verdad que también es mucho menos instruída. (machista. más abajo están las razones nica escribo todas sus hipótesis).

El judío trata de instruirse, no para reemplazar por nociones reflexivas sus prejuicios colectivos, sino sencillamente para quedar mejor en la lucha (ante sus enemigos o no simpatizantes). Tampoco desorganiza la religión la instrucción que él adquiere; la necesidad de instrucción se produce en él porque la religión desorganiza. Esta instrucción no la busca como un medio para destruir las opiniones recibidas. En efecto la religión ejerce una acción profiláctica sobre el suicidio pues protege al hombre contra el deseo de destruirse. Cuanto más numerosos y fuertes son estos estados colectivos, más fuertemente integrada está la comunidad religiosa y más virtud preservativa tiene. La religión alimenta una vida colectiva.

Los casados se matan menos. El privilegio de los casados, procedería simplemente, de que solo son admitidos a la vida de la familia los que ofrecen una garantía de salud física y moral. La neurastenia predispone al hombre para el suicidio. Así resulta, que es en el estado matrimonial en el que la mujer se aproxima más al hombre, por lo que respecta al suicidio, sobre nosotros. En un sentido, los hijos, sujetan al viudo a la vida, pero, al mismo tiempo, hacen más aguda la crisis por la que atraviesa. No es la desaparición de la esposa, sino de la madre, la que causa el desarreglo.

La mujer, como se manifiesta con relieve, la débil eficacia del matrimonio, cuando no halla en los hijos su complemento natural. La vida de familia preserva menos a la mujer que al marido, por lo que, el matrimonio ejerce una acción preservativa en provecho de un solo sexo. Resulta que el factor esencial de la inmunidad de las gentes casadas es la familia, es decir, el grupo completo formado por los padres y los hijos. Esta preservación es mucho más completa cuanto más densa es la familia, o sea, cuando comprende un número mayor de elementos.

Las grandes conmociones sociales, cono las grandes guerras populares, avivan los sentimientos colectivos, estimulan, tanto el espíritu de partido como el patriotismo, la fe política como la fe nacional y, conectando con las actividades a un mismo fin, determina, a lo menos, por cierto tiempo, una integración fuerte de la sociedad. El suicidio varía en razón inversa del grado de desintegración de los grupos sociales de que forma parte el individuo. Egoísmo es ese estado en el que el yo individua se afirma en exceso frente al yo social. Así, pues, cuando no tenemos más objetivo que nosotros mismos, no podemos escapar a la idea de que nuestro esfuerzo están destinados finalmente a perderse en la nada, puesto que a ella debemos ir parar. Pero el aniquilamiento nos horroriza. El estado de egoísmo se encuentra en contradicción con la naturaleza humana. Por lo mismo que esas formas superiores de la actividad humana tienen un origen colectivo, poseen un fin de la misma naturaleza. Como derivan de la sociedad, a ella también es a la que se refieren; o más bien son la sociedad misma, encarnada e individualizada en cada uno de nosotros. Nuestra actividad necesita de un objeto que la exceda.

Suicidio Altruísta

El suicidio es bastante frecuente en pueblos primitivos. El humano se mata porque cree que es un deber. El suicidio que se considere a partir de un deber se le llamará altruista obligatorio, mientras a los que son menos exigidos por la sociedad serán los altruistas facultativos. El altruismo se puede considerar como la moral característica primitiva y también como una impersonalidad. El suicidio altruista agudo tiene como perfecto modelo el suicidio místico.

Para que haya suicidio basta con que el acto, de donde debe necesariamente resultar la muerte, haya sido con conocimiento de causa. Sin embargo, todavía hoy existe entre nosotros un medio especial donde el suicidio altruista está en estado crónico: el ejército. Así, los miembros del ejército, a quienes ataca más el suicidio, son los que tienen vocación por esta carrera, los que están más hechos

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