Lic En Enfermeria.

El ensayo lo he hecho a razón de que actualmente estudio la Lic. En Enfermera Con Orientación en Obstetricia. Donde yo como enfermero demostrare todos los conocimientos que he adquirió a lo largo de la vida sobre los cuidados de enfermería de tal manera que desarrollare toda una serie de necesidades, las cuales son importantes tanto para el enfermo como para el no enfermo. Con esta actividad contribuyo de manera humanitaria al prójimo.

Introducción.

La enfermería es amor al prójimo, amor a los demás, a lo que hacemos, porque un enfermero o una enfermera no es sólo una persona que viste de blanco y presume cintas a lo largo de su filipina, es un ser humano integro, que comprende las necesidades y sentimientos de su paciente, es una proveedora de cuidados, de comprensión, amabilidad, afecto y solidaridad, entonces, enfermería es más que solo cuidar pacientes, es quedarse con esa satisfacción, a veces del mismo paciente o de su familiar, al ver cómo queda con un mejor nivel de salud.

El presente ensayo habla de los motivos por los que me encuentro estudiando enfermería, que no solo es porque quiero ganar dinero.

Enfermería es una palabra que nos dirige a pensar en cuidado, en ayudante del doctor, incluso en personas que maltratan al paciente; sin embargo enfermería es más que todo eso, es más de lo que yo mismo pueda pensar o decir.

Hasta hace unos años la enfermería no estaba considerada como una profesión sino que se cuidaban a las personas por voluntad propia, no era gran ciencia pero debido a que se ha comprobado que se necesitaban establecer modelos de atención y técnicas de cuidado adaptables a cada persona, familia o comunidad surgió la carrera conocida actualmente, y desde entonces un enfermero cuida, comprende, entiende y atiende a una persona en un determinado momento que necesita aplicando los conocimientos adquiridos durante su preparación académica.

¿Qué porque quiero ser enfermero? Porque lo más gratificante de ser enfermero no es el sueldo que llega a tu bolsa, sino que después de cada jornada laboral nos vamos con las manos llenas de las palabras de gratitud y las muestras de afecto derramadas de los ojos de una madre agradecida por haber limpiado la herida de su pequeño, o la mirada cálida de un esposo que deposita toda su confianza en ti, mientras atiendes a la mujer que lleva a su hijo en el vientre, o mejor aún, el apretón de dedos de un bebé que no ha salido aún de cuneros; esos son los momentos que hacen de mi carrera una carrera gratificante, emocionante y sobre todo humana, es lo que hace diferente el atender a una persona mecánica y humanamente.

Talvez si, en algunos casos nos encontremos con enfermeros que inconsciente o conscientemente, no lo sé, trata de una manera no ética a sus pacientes pero para nuestra tranquilidad, más del 80% de ellos eligió esta carrera por mera vocación (Acosta S,. 2010) y no solamente porque fue lo único que se acomodó a nuestra vida, por eso hay que pensar ¿Que serían de los internados, los médicos, las instituciones de salud si no existieran las/os enfermeras/os, a esas personas que catalogan de médicos frustrados, las personas que no valoran al humano sino que lo ven como simples objetos o maquinas funcionando, todas las palabras despectivas hacia el personal de enfermería. Pero haber

¿Quién les da el analgésico cuando tiene dolor?, ¿El antibiótico para prevenir o curar infecciones?, ¿Quiénes les aclaran dudas que no preguntó al médico?, ¿Quién le ayuda en sus necesidades fisiológicas?,

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