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Los primeros capítulos cuentan sobre la familia Pericand


Enviado por   •  28 de Mayo de 2018  •  Tareas  •  2.191 Palabras (9 Páginas)  •  95 Visitas

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Resume de los 7 capítulos

Los primeros capítulos cuentan sobre la familia Pericand, principalmente sobre Philippe un joven sacerdote que iba con sus discípulos buscando un lugar donde descansar, al entrar la noche encuentra un lugar al lado de una casa, los muchachos que eran educados y eran muy obedientes hasta ese momento, el sacerdote les dice que descansen y que cuando fuera de día los dejaría bañarse en el lago. Dos de los discípulos se escapan a la casa bien entrada la noche, el sacerdote se da cuenta y va tras de ellos. Los chicos rompen un vidrio para entrar a la casa, cuando se dan cuenta de que  el sacerdote los persigue planean emboscada contra él. Dentro de la casa Philippe encuentra a uno de los chico, pero este arremete contra él y ahí es cuando sale el otro chico, le empiezan a pegar, Philippe apunto de desmayarse se da cuenta de que todos sus discípulos estaban en la casa haciendo todo el daño posible (rompiendo muebles, ventanas, vajillas, retratos, etc.) en un momento los chicos ya con la voz ronca gritan a los demás diciendo que tienen que matarlo, cuando cayó al agua Philippe seguía vivo e intentándose aferrar a un tronco le empiezan a tirarle piedras. No murió ahogado, murió con el agua a la cintura con la cabeza hacia atrás y un ojo reventado por una pedrada.

En la catedral de Notre-Dames de Nimes. Todos los años se celebran la misa para los difuntos de la familia Pericand-Maltere, pero en la ciudad solo quedaban  la madre y la señora Pericand por lo general la señora Craquant era una anciana obesa, medio ciega y que se ahogaba las palabras del sacerdote con su respiración. La misa de los difuntos era especialmente grata para la señora Craquant porque después de  la misa había una pastelería a la vuelta de la catedral en la cual tomaba una taza de chocolate y dos cruasanes.

Ese año, todo se había trastocado; los Pericand acababan de recibir la noticia de que  el señor Pericand-Maltere y Philippe habían muerto, el señor Pericand en el asilo pacíficamente y dos horas más tarde llega la carta de que Philippe Pericand había encontrado su muerte en un accidente y que los niños habían desaparecido, la última noticia que recibieron  fue de Hubert que había muerto en una batalla de Moulins. La señora Pericand con una exclamación de orgullo y desesperación: ¡traje al mundo a un héroe y a un santo!

Ya cuando iban para la iglesia la señora Pericand apura a su madre porque ya está a punto de comenzar la misa. Pero la señora Craquant está comiendo “con desgane”. La señora Pericand tiene en su poder los dos retratos de Philippe y de Hubert para la misa y le dice a sus hijos menores que contemplen a sus hermanos mayores, que recen a dios que sean iguales a ellos… y que en sus oraciones también recen por los desgraciados niños que desaparecieron con Philippe.

Cuando bajaron  a la calle con la abuela seguida por la señora Pericand , envuelta en crespones, los dos niños mayores vestidos de negro, Emmanuel de blanco y por ultimo varios criados de riguroso luto. Emmanuel fue el primero en darse cuenta y señalo con el dedo, los demás se dieron cuenta y vieron que era Hubert sin un solo rasguño, ni equipaje, ni bicicleta. La madre contenta por verlo se pone a llorar, lo besa y lo abraza, después de la conmoción le cuenta que el abuelito está muerto  y que Philippe también, pero a él no le importa el abuelito que si Philippe no está vivo, como le paso a él, la señora Pericand le asegura que no es así, que se dé un baño rápido y que se aliste para ir a la iglesia.

Ya en la iglesia la conmoción de que Hubert estuviera vivo , habían murmullos y miradas penetrantes hacia Hubert , y una que otra señora se le acercaba para felicitarlo, mientras tanto Hubert pensaba y maldecía por dentro la muerte de su hermano, unos momentos después empezó a llorar y rezar por su hermano. Acabo la misa y todas las señoras le decían que tenía un bien color, después de tantas penalidades apenas adelgazo, no había cambiado nada  nuestro pequeño Hubert…

Los corte llegaron al Grand hotel a las 7 de la mañana buscando donde quedarse el director del hotel los recibió con agrado les pregunto que como le había ido en su viaje y Gabriel le respondió que casi pierde sus manuscritos, pero que no le importaba, el director les dice que tiene una suite reservada para ellos que si quieren el desayuno ¿el desayuno?- Murmuro Gabriel- no he probado bocado en 24 horas –y era verdad desde el día anterior además del desayuno. Le dijo al director que le diera un café hirviendo. La señora Corte (Florence) estaba en la habitación con su doncella, le dice que le prepare  el baño y una mascarilla para la cara luego que llame a la peluquería y que le digan que si Luigi sigue allí. Que venga con la manicura dentro de tres cuartos de hora y que le prepare el traje de chaqueta gris, con blusa rosa de batista.

Mientras Gabriel se daba un baño y le pregunta a su criado se hay gente conocida el criado le dice que estaba Jules Blanc. Gabriel se queda inmóvil con la navaja de afeitar, llena de jabón, en el aire. Recuerda que Jules era una ficha muy importante para que fuera importante y se imaginó huyendo a Portugal donde su criado le había dicho, después de la conmoción termino de afeitarse y vestirse y bajo al bar poco después del mediodía. En el vestíbulo reinaba cierto caos; alguien dejando las maletas, amontonadas en desorden. Se oían voces destempladas procedentes de la cocina; mujeres pálidas y alteradas vagaban por los pasillos en busca de la habitación; los ascensores no funcionaban; un viejo llorando ante el recepcionista, que le negaba una habitación.

Frente a todo ese caos el recepcionista lo saluda y le dice: ¡qué días caballero! ¡Y qué noches! Gabriel se va al bar en donde se queda un buen rato solo, pero con el tiempo llegan colegas suyos y van hablando de tiempos diferentes a aquellos, de sus obras se reían y se olvidaron del mundo.

Los Michaud no alcanzaron a llegar Tours. Una explosión destruyó las vías del tren y los alemanes los obligaron a volver. A su llegada, los Michaud encontraron París medio desierto. Se dirigieron a la casa a pie, habían estado fuera de la casa 15 días,  pero,  como cuando uno vuelve de un viaje largo espera encontrarlo todo como cuando se marchó, todo estaba cerrado las tiendas de alimentación, etc. Todo el mundo había muerto o se había desaparecido pensó Maurice, llegaron la peluquería y les preguntaron que como le había ido, la señora Michaud respondió: Ya ven… ¿y mi casa?, el peluquero le respondió que bien que había pasado esa mañana por haya y que todo estaba bien, que se quedaran a comer, y así fue comieron se despidieron y se fueron para su casa.

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