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Pedagogia


Enviado por   •  14 de Octubre de 2012  •  3.343 Palabras (14 Páginas)  •  337 Visitas

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La Revolución llega al aula de clase

Himelda Martínez, viceministra de Educación Preescolar, Básica y Media; Carlos Pardo, subdirector académico del Icfes, y Tito Nelson Oviedo, jefe del Departamento de Español de la Universidad ICESI, del Valle del Cauca, dialogan sobre la labor del docente, la evaluación, el proceso pedagógico y el mejoramiento de la calidad educativa. Reflexiones sobre la visión de los maestros.

Revolución Educativa Al Tablero: Muchos maestros afirman que el Ministerio de Educación hace cambios frecuentes y que no se les da tiempo para asimilarlos y ponerlos en práctica. Además, señalan, son propuestas no compatibles unas con otras…

Himelda Martínez: El siglo XXI exige un sistema educativo más móvil, que contribuya a ponerse al día con el avance de la ciencia y la tecnología. Es cierto que la Revolución Educativa está movilizando cambios simultáneos en muchos aspectos. Uno fundamental es la formulación de estándares para todas las competencias básicas; otro, es la introducción de la evaluación censal que ha permitido, por primera vez en la historia, que todas las instituciones educativas del país cuenten con los referentes que necesitan para trazar sus planes de mejoramiento. Es cierto que un maestro tiene que conocer los nuevos estándares en todas las áreas que enseña y estar preparado para que sus niños sean evaluados. Este es un cambio muy grande.

Tito Nelson Oviedo: Algunos maestros de Primaria y Secundaria dicen que no hay claridad sobre lo que involucra el proceso pedagógico; se despistan cuando les hablan de la necesidad de seguir unos estándares. Eso me lleva a pensar que el Ministerio le falta llegar a los maestros con talleres, conferencias y formación, e interactuar más con las facultades de Educación, encargadas de preparar a los maestros. Muchos maestros no cuentan con la formación necesaria para mejorar la calidad educativa a través de los estándares. Esta confusión los ha llevado a preguntarse, por ejemplo, si los estándares son los mismos objetivos de los que se hablaba antes. Todo proceso pedagógico conlleva objetivos, estándares, evaluaciones, acción y desarrollo de un conocimiento, pero el desarrollo integral de estos conceptos requiere maestros preparados.

H.M: Es muy importante que podamos dar un mensaje muy claro a maestros y facultades de Educación, un mensaje claro para los padres de familia y los estudiantes. Entender qué es lo que los niños deben aprender y cómo se les va a evaluar es una tarea diaria de la sociedad. Los medios de comunicación se están involucrando más en este proceso tan importante para el país.

T.N.O: Los que están frente a ese proceso son los maestros. Ellos cumplen con su misión profesional de acercar la familia y la escuela. En este sentido, son los multiplicadores los que deben aclarar a los padres de familia qué es lo que está involucrado en el proceso pedagógico.

Carlos Pardo: Todos apuntamos al mismo sitio, a la misma necesidad, al logro de ese gran reto: formarnos y posicionar la educación como un principio social y familiar básico.

R.E.A.T: Podríamos explicar a los maestros, cuál es la diferencia que hay entre estándar, competencia, objetivo y logro. ¿Cómo interactúan estos conceptos desde la práctica pedagógica de los maestros?

H.M: Hoy en día está de moda discutir los términos. Pero no se da el paso siguiente; ponerlos en la práctica. Uno se puede quedar en definiciones lingüísticas durante mucho tiempo, pero la dificultad real para el maestro es el cómo formulo mis objetivos, mis indicadores de logro, cómo puedo evaluar para ver si mis alumnos están o no cumpliendo los estándares, y qué tengo que hacer para saber si lograron o no las competencias. Creo que ya es tiempo de pasar de definiciones lingüísticas a practicar y ensayar "el cómo" en el aula de clase.

T.N.O: Pienso que las definiciones o los conceptos tienen que estar muy claros para poder aplicarlos. Si no hay un acuerdo del concepto en cada caso, difícilmente el maestro va a poder participar en el establecimiento de objetivos, estándares, logros y competencias. El maestro tiene que fijar sus objetivos claramente, saber qué es lo que busca y establecer sus metas. Las competencias tienen que estar relacionadas con los campos de conocimiento; es decir, cada especialista está obligado a participar en el establecimiento de los contenidos y las destrezas que los estudiantes deben tener al terminar cada ciclo educativo. Luego mira en el tiempo si esas metas se han alcanzado: qué es lo que el muchacho es capaz de hacer y qué le quedó faltando; es lo que determina los indicadores de logro. Esos logros se comparan con los estándares y tienen que ver con la nivelación en el plano nacional. Le corresponde al Ministerio, con la participación de la comunidad académica, determinar los niveles básicos a los que deben llegar los estudiantes. Si no llegan a ese nivel, quiere decir que no cumplen con la calidad esperada.

C.P: Objetivos, estándares, indicadores de logro y competencias son conceptos que obedecen a una misma perspectiva de la educación. Interactúan entre sí y conllevan a una meta: cualificar los procesos educativos. Por esto los maestros pueden tomar como guía los estándares, los objetivos o los indicadores de logro. Involucrar de manera efectiva la integración de todos los aspectos del proceso es una gran herramienta para reorientar la práctica pedagógica.

R.E.A.T: Se dice que los estándares van a nivelar a todo el mundo ¿Qué piensan?

H.M: Para entender la importancia de los estándares es útil observar lo que ocurre en los mercados laborales de países desarrollados y especialmente en Europa, donde la gente que se gradúa en un país puede trabajar en otro. Por ejemplo, los franceses necesitan conocer lo que saben los alemanes y viceversa. De ahí surgió la necesidad de ponerse de acuerdo en cuáles son las competencias básicas y cómo se pueden medir y evaluar. Esto no quiere decir que estén estandarizando a toda la población. Más bien, cada país cuenta ahora con unos parámetros para comparar qué competencias tiene cada persona, institución educativa y municipio. Además, el Ministerio de Educación debe apoyarlos e impulsarlos. Las competencias se pueden desarrollar a través de diferentes contenidos.

La función de los estándares es mirar lo que una persona del mismo nivel cognoscitivo es capaz o debería estar en capacidad de hacer. Esto no es uniformidad ni masificación, pero sí significa la posibilidad de que todos los sujetos de este mundo podamos compartir unas competencias mínimas.

C.P: Es necesario

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