Periodontitis

Absceso apical crónico agudizado

Es también conocido con el nombre de absceso fénix, absceso alveolar agudo secundario. Autores como Grossman lo denominan absceso alveolar subagudo.

Según Simon, la define como una exacerbación aguda de una inflamación crónica preexistente.

Se considera que su etiología es la misma que origina al absceso apical agudo; con la diferencia de que éste presenta una lesión crónica previa, que se agrava o agudiza.

El acúmulo de pus incrementa la presión en los tejidos, este pus inicialmente se localiza debajo del periostio pero tarde o temprano termina por perforarlo y producir una inflamación difusa.

Esto quiere decir que el pus que se acumula debajo del tejido conectivo que cubre el hueso termina siendo perforado o destruido produciéndose asi una manifestación imprecisa de las inflamaciones.

Según Grossman las características clínicas de este tipo de lesión no siguen la evolución rápida y grave del absceso apical agudo, ni tampoco la lenta y asintomática de los abscesos crónicos, pero presenta síntomas con las características de ambos por esto es llamado absceso apical crónico agudizado.

Por lo general el paciente en un principio se queja de dolor leve a la masticación o cuando el diente entra en contacto con algo. A medida que el pus se acumula debajo del periostio el dolor se incrementa en intensidad y puede volverse violento, agudo e intenso, de tipo pulsátil.

Los factores desencadenantes se dividen en dos grupos:

Irritantes del conducto radicular:puede ser producido por bacterias, subproductos bacterianos, tejido pulpar necrótico que penetran el conducto y los tejidos periapicales.

Factores del hospedero: la edad, el sexo, el tamaño de la lesión apical y la presencia de úlcera.

La diferencia básica entre ésta lesión y el absceso apical agudo, es saber que el absceso apical crónico agudizado se puede presentar tanto de forma espontánea como producto de una manipulación endodóntico del diente afectado mientras que esta se produce ya estando afectada esa parte del diente o de la boca.

Si nos realizan una endodoncia (tratamiento de conductos) o nuestro dentista nos ha aconsejado una debemos tener mucho cuidado ya que si este tratamiento es mal utilizado, nos traerá problemas graves uno de estos podría ser cáncer este afectara a órganos muy importantes como: nuestro corazón, cerebro, riñones y articulaciones. Una endodoncia puede dañar nuestra salud, debilitar nuestro sistema inmune. Además, y esto es importante, los antibióticos no pueden eliminar esta infección.

Las características para poder establecer el diagnóstico son: pruebas de vitalidad (negativas), dolor espontáneo (muy intenso, pulsátil, localizado), dolor a la percusión (muy intenso), movilidad (mayor).

Entonces podemos decir que el absceso fénix se produce cuando una periodontitis apical crónica ya existente es infectada secundariamente por bacterias. Su comportamiento es igual al del absceso apical agudo, presenta las mismas características clínicas e histológicas, pero la radiografía revelará una radiolucidez apical que indica la existencia de una lesión crónica. Los síntomas y los signos del absceso fénix incluyen dolor espontáneo e intenso de carácter pulsátil, dolor a la percusión y palpación. En los que se presentan con mayor gravedad el cuadro clínico puede completarse con fiebre, malestar general, etc.

Algunos de los síntomas de esta iflamacion son el dolor punzante en el diente afectado y/o dolor intenso al tacto, al morder y masticar, encías rojas, hinchazón sobre la raíz del diente y más tarde puede ocasionar el aflojamiento del diente afectado. Sale pus de la burbujita que se forma en la encia, lo que da mal sabor en la boca, y por lo tanto, mal aliento y hasta puede ocasionar fiebre si la inflamación es avanzada.

Es por eso que todas aquellas personas que observen o sientan algo extraño en el interior de su boca deben hacerse un revisado

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