Streptomyces scabies “Sarna común de la papa”
Enviado por Yonathan Inostroza • 14 de Mayo de 2019 • Informes • 1.291 Palabras (6 Páginas) • 162 Visitas
Streptomyces scabies “Sarna común de la papa”
Valdivia, 29 de abril de 2019
Introducción
La papa (Solanum tuberosum) fue cultivada por primera vez en los años 8000 a 5000 A.C, en el altiplano de Perú y al noroeste de Bolivia, desde entonces se ha diseminado por todo el mundo convirtiéndose en un alimento básico en la gran mayoría de los países del mundo.
A nivel mundial, la papa es el cuarto cultivo más importante después del trigo, arroz y maíz. Presentando una superficie total cultivada aproximada de 18 millones de hectáreas, con aproximadamente 300 millones de toneladas de producción.
Chile presenta un gran potencial de producción de este cultivo presentándose desde La Serena hasta la isla de Chiloé donde la XIV y X región son responsables del 50% de la producción nacional.
El promedio de producción en Chile es de 28 Ton/ha, lo que está muy superior a los rendimientos a nivel mundial, esto se debe a las excelentes condiciones edafoclimáticas y lo más importante la cordillera de los andes que nos proporciona una seguridad contra las enfermedades de este cultivo al funcionar como barrera.
Descripción de la Enfermedad
Streptomyces scabies corresponde a una bacteria de la clase Actinomycetes, orden Actinomycetales y familia Streptomycetaceae, compuesto por un micelio similar al de un hongo, pero de menor tamaño
Hospederos
Streptomyces es capaz de alojarse en una amplia variedad de plantas como betarraga, remolacha forrajera, remolacha azucarera, zanahorias, papas, rábanos y cualquier planta con raíz carnosa. (HOOKER, 1981)
Dentro de las malezas esta se aloja principalmente en brasicas como el yuyo, esta bacteria además es capaz de sobrevivir el tracto digestivo de los animales, porque que al forrajear animales con cultivos infectados podemos disipar la enfermedad por las fecas de los animales, por lo que se debe tener cuidado en el uso de las fecas como estiércol para fertilizaciones,
Condiciones predisponentes
Dentro de la condición predisponente más importante es el pH del suelo, puesto que esta bacteria necesita pH del orden de 5,2 a 8 para poder desarrollarse correctamente, por lo que es posible controlar este aspecto dependiendo del pH que tengamos ya sea a través de la aplicación de carbonato de calcio (CaCO3) para aumentarlo o sulfato de aluminio para disminuirlo.
La temperatura de suelo ideal para su desarrollo es de 20° a 22° y mantener baja la humedad del suelo en las primeras semanas de desarrollo del tubérculo, puesto que, en esas semanas, la peridermis de los tubérculos es más blanda y facilita la entrada de la bacteria.
Esta bacteria se encuentra presente en suelos con baja humedad o con baja irrigación, esto debido a que son inhibidos por otros microorganismos que se encuentran en suelos con mayor humedad. (AGRIOS, 1996).
Síntomas
Los síntomas se observan principalmente en tubérculos, los cuales inicialmente consiste en pequeñas manchas parduscas, de un tono color café y levemente prominentes; cosa que con el paso de tiempo se extienden y se vuelven muy corchosas. Estas lesiones pueden extenderse por debajo de la superficie del tubérculo, generando agrietamientos que en los que pueden llegar a medir 1cm de profundidad. En ocasiones, estas lesiones aparecen de forma arrosetadas pueden llegar a cubrir toda la superficie del tubérculo, generando pequeñas protuberancias con centros cubiertos con pequeñas cantidades de tejido corchoso. (AGRIOS, 1996).
En el tubérculo pueden presentarse más de un tipo de lesión descrito anteriormente de manera simultánea.
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Figura 1: Síntomas de sarna común en tubérculos de papa. (INIA, 2017)
Signos
Éste patógeno, al ser una bacteria, no presenta signos macroscópicos, el signo microscópico es el micelio de la bacteria, similar al de un hongo, pero de menor diámetro. (HOOKER, 1981) Este micelio puede fragmentarse, reproduciéndose de forma asexual (KATZNELSON, 1965 y PARK, 1965)
Puede sobrevivir por un largo tiempo en la mayoría de los suelos, exceptuando los suelos ácidos, en su forma de micelio vegetativo o en forma de esporas. Sus esporas son de forma elipsoidal o cilíndrica de 6.6 x 1.5 um y se forman sobre hifas especializadas que forman septos desde su extremo a su base. Al comprimirse estas esporas a nivel de la punta, generan como resultado su desprendimiento de la hifa. (AGRIOS, 1996)
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