Iniciación en el control de la natalidad por parte de los estudiantes de la Universidad de Costa Rica en la sede Rodrigo Facio.

Escuela de Estudios Generales

UNIVERSIDAD DE COSTA RICA

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Reproducción, sexualidad y humanismo.

RP0018

Tema:

Iniciación en el control de la natalidad por parte de los estudiantes de la Universidad de Costa Rica en la sede Rodrigo Facio.

Estudiantes:

Kimberly Fuentes C. B52807

 Kendall Paniagua G. B45161

Wander Medina G. B54250

Profesor:

Antero Muñoz

II Ciclo, 2015

RESUMEN

El control de la natalidad es un tema que en las edades entre los 10 años y los 17 años se debe explicar con claridad y con la mayor cantidad de información posible, esto debido al  ingreso en la pubertad y la posibilidad de la primera relación sexual sin protección.

De las personas encuestadas para el presente trabajo el 75% afirmó haber tenido su primera actividad coital antes de los 18 años y de la totalidad de los encuestados un tercio de ellos afirmó que no utilizaron ningún tipo de método anticonceptivo.

La estadística anterior refleja la poca información y/o educación adecuada que se tiene durante y después de la pubertad donde se está más expuesto a un embarazo indeseado aunque todos hayan pasado por la primaria y secundaria donde se supone se forjan unos de los pilares más importantes en la personalidad y educación de la persona.

Además, en promedio el 37% de los encuestados consideran el té de ruda, manzanilla, coitus interruptus, método de la temperatura corporal, el ritmo y el conocimiento de la viscosidad del moco cervical como métodos anticonceptivos.

INTRODUCCIÓN

El tabú por el control de la natalidad viene desde  la segunda mitad del siglo XIX , donde se puso en vigor la “Ley Comstock”, en la que quien hablará sobre esto, fuera por interés propio o por motivos médicos, se le juzgaba por motivos criminales. Es por esto que cualquier información acerca de este tema no se podía encontrar fácilmente en escritos antiguos, ya que no llevaban específicamente este nombre sino que tenían que nombrarlos con títulos como “literatura obscena” o dentro de la Ley Constitucional, o simplemente se reservaban la información y no era divulgado.

Fue en la primera mitad del siglo XX donde se comenzaron a desarrollar nuevos y mejores métodos para el control de  la natalidad. Sin embargo el tabú  aún existía, por ejemplo el libro de Norman E. Himes, Medical History of Contraception, se dice que el adjetivo médico se le dio para poder ser admitido por el servicio de correos.

Una forma para poder entender la oposición al control de la natalidad es sabiendo el lugar que tenía la mujer en ese entonces, donde era más una esclava sexual, dedicada únicamente a su hogar y sus hijos, donde todo lo que su esposo le decía tenía que obedecerlo. Por lo que no podía decidir una manera para no tener hijos.

Eran varios los métodos utilizados para el control en la natalidad, como jabones a base de ácidos, jeringas vaginales, o el aborto.

No se puede dejar de lado el papel que jugaban las religiones, que en su mayoría, asevera que el único propósito de las relaciones sexuales en el matrimonio era la procreación, donde cualquier obstaculización artificial de los procesos naturales del coito y la concepción era contraria de las Leyes de Dios y era condenada como un grave pecado. Los obispos calificaron los métodos anticonceptivos como “aborto preventivo” por lo que pedían a la Ley un castigo para quienes lo practican.

El papel de las iglesias en aquella época era tan determinante para la  sociedad que incluso los médicos se negaban a brindar servicios para controlar la natalidad, por miedo a Dios o a las personas que los juzgaban. Con los años, este temor fue desapareciendo, sin embargo, el tabú aún continuaba.

Con la esterilización se vio  un gran paso hacia el control de la natalidad, ya que a pesar de que seguía siendo tabú no lo era  tanto como el aborto u otros métodos

En la actualidad existen decenas de tipos de métodos mediante los cuales se puede controlar la natalidad, sin embargo, la desinformación acerca de los mismos, ya sea  por motivos religiosos o sociales, juega un papel importante en la cantidad de embarazos no deseados. 

Existen diferencias marcadas en el control de la natalidad dependiendo de la clase social a la que se pertenece, donde para las personas con menos educación y/o menor posibilidad económica hay un faltante de información que provoca el uso fortuito o nulo de métodos para el control de los nacimientos (Chávez, 2003). Fruto de la desinformación se crean los mitos, los cuales reformulan las maneras en las que se utilizan los métodos anticonceptivos, haciéndolos menos efectivos o en algunos casos inventando “maneras empíricas” para prevenir el embarazo. Ejemplo de lo anterior es la creencia de que se puede prevenir un embarazo tomando la píldora anticonceptiva únicamente el día en que se cree que existe la posibilidad de tener una relación sexual, cuando en realidad la misma empieza a tener efecto 21 días después de empezar la planificación (Álvarez, 2012). 

Al ser Costa Rica un país cuyo Estado establece constitucionalmente que la religión oficial es el catolicismo y la mayoría de la población se considera cristiana (cerca de un 80%) esta juega un papel importante en el criterio que las personas tienen sobre los anticonceptivos. La percepción religiosa hacia estos se fundamenta en la biblia y está inmersa en múltiples tabúes y se vuelve aún más cerrada con el método de la interrupción del embarazo, aborto, fundamentándose en que cada persona tiene un derecho inalienable a la vida y que hay vida desde el momento de la concepción, haciendo que estas prácticas sean ilegales en el país.

Debido a que en Costa Rica el promedio de la primera relación sexual es de entre 14 y 17 años (Chávez, 2003) el control de la natalidad afecta mayoritariamente a los adolescentes, ya que son influenciados por la suma de todos los factores anteriormente expuestos: presión social, religiosa, falta de información concisa y puntual sobre las maneras disponibles para evitar un embarazo no deseado y la falta de fácil acceso a las mismas (Black, et al, 2010).

Muchas veces esta falta de información en el hogar o en los colegios y escuelas provoca que las personas se vean forzadas a instruirse sobre anticonceptivos una vez empezadas las relaciones sexuales, es decir, no hay un proceso de información y/o planificación anticipada, quedando expuestos a un embarazo no deseado desde el primer momento. Según Black et al (2010) a nivel mundial existe una tendencia al aumento en la actividad sexual, sin embargo, este aumento tiende a ser más rápido que el aumento en el uso de métodos anticonceptivos y Costa Rica no escapa a esta tendencia.

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