ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Filosofia En La Edad Media


Enviado por   •  5 de Mayo de 2014  •  1.630 Palabras (7 Páginas)  •  2.149 Visitas

Página 1 de 7

CRITERIO DE VALIDEZ DEL SABER CIENTÍFICO EN EL MEDIOEVO

Contexto general: La época medieval fue un período importante en la historia de la humanidad, pues en ella se generaron grandes cambios que marcaron la historia. En muchos campos se puede decir que aún hoy tiene vigencia la mayor parte de los conceptos que se desarrollaron en aquellos siglos. Desde el punto de vista histórico, se puede situar dicho momento entre los siglos V y XIV d.C.

En relación con la epistemología, se da un rompimiento con las teorías clásicas de los grecolatinos. Si antes el conocimiento se basaba en la persona, en su capacidad de observación y en el buen uso de los sentidos y de la razón, aquí se produce un cambio radical. Ya no es el ser humano quien determina la verdad o la falsedad del conocimiento y quien selecciona los campos sobre los cuales se debe conocer, sino que es el sentido religioso quien ocupa ese lugar y Dios es el único fundamento.

Implicaciones epistemológicas del cristianismo: ¿Cómo se da la influencia religiosa del cristianismo en el campo del conocimiento? El acontecimiento llamado Jesucristo, no sólo es un fenómeno que divide la historia en dos, sino que además tiene una serie de implicaciones muy serias. Con la conversión de Constantino al cristianismo, todo el Imperio Romano entra a vivir de esta nueva fe. Esto hace que la teología sea la que poco a poco se posesione del saber. Son los teólogos, y más propiamente los clérigos, los encargados del saber. Gracias a ellos, se adelanta una reflexión sobre los acontecimientos que suceden en esos momentos de la historia.

Papel de los teólogos: Las personas más inquietas inte-lectualmente comenzaron a interrogar a la teología sobre las diversas preguntas, desde aspectos relacionados con la cotidianidad, hasta las nociones y las explicaciones científicas. La teología se propuso entonces dar respuesta a todo desde un punto de vista religioso. Esto hizo que la Edad Media fuera muy cuestionada, pues no son las personas quienes intentan responder los interrogantes, sino que la respuesta viene dada por la vía teológica.

Relación filosofía y teología: Otro punto importante en la época medieval era la relación que se establecía entre la filosofía y la teología. La teología intentaba responder los cuestionamientos que la realidad suscitaba, pero la mayoría de las veces no podía dar una respuesta satisfactoria. Entonces recurría al razonamiento filosófico, que daba explicaciones sesgadas, pues los pensadores de esta época, antes que filósofos eran teólogos. Esta situación llevó a que se hicieran muchos intentos por diferenciar el campo que le correspondía a cada ciencia.

Casi siempre, la filosofía sólo fue una ciencia auxiliar de la teología, es decir, la razón estaba al servicio de la fe. En esta época se destacaron grandes pensadores como San Agustín, San Buenaventura y Santo Tomás, entre otros.

El Cointuicionismo y el iluminismo de San Buenaventura: Para San Buenaventura (1217/ 1274), el mundo parece como un escenario repleto de signos - huella, vestigio, imagen y semejanza de Dios, o mejor aún, como un templo sagrado en el que se anuncia el misterio de Dios. Por este motivo, el criterio de validez y de verdad del conocimiento y de la ciencia estaba garantizado por la cointuición.

Según esta tesis, el contacto con el objeto implica la percepción confusa del modelo divino. Así, la cointuición implica un contacto directo con el objeto y un contacto reflejo con el modelo. Esta tesis es reforzada por la teoría de la iluminación divina, mediante la cual San Buenaventura explica el conocimiento intelectual: El conocimiento sensible hace referencia a los objetos materiales y se lleva a cabo mediante los sentidos.

Por su parte el conocimiento intelectual trasciende los sentidos y llega hasta lo universal. Pero el fundamento de tal universalidad no puede estar en el ser humano ni en las cosas, dado que unos y otras son singulares y contingentes.

La iluminación divina: Por lo tanto, el fundamento es la luz divina que permite conectar lo finito con los ejemplares divinos. Así, las cosas sólo pueden generar un conocimiento inmutable, de carácter científico, en la medida que se ponen en relación con los ejemplares divinos. Con lo cual se concluye que el verdadero conocimiento implica la copresencia en nosotros de Dios y de las cosas.

En la base del conocimiento intelectual está el concepto de ser que, para nuestro espíritu, es una irradiación del ser absoluto, en el que están las ideas eternas de todos los entes. En este sentido, sólo Dios es la base, la fuente y el criterio último de conocimiento, y el método empleado para conocer tiene en cuenta la cointuición y la iluminación divina.

Fundamento del saber para Tomás de Aquino: Para Santo Tomás de Aquino (1225-1274), el conocimiento científico se produce porque el entendimiento elabora los conceptos por medio de un proceso de abstracción sobre los datos que le son dados por la experiencia sensible.

El intelectualismo: Esta corriente de pensamiento epistemológico concibe el conocimiento verdadero como una fiel copia de la realidad. El conocimiento, que tiene su base en la razón, se deriva de la experiencia y es el resultado de un acercamiento sensible a la realidad.

Filosofía 11 Docente: Aymer Tijo Rincón

El conocimiento que tenemos de las cosas es siempre posterior a las cosas, y tal conocimiento es fiel copia de ellas. Si bien la base de todo conocimiento científico es el conocimiento sensible, en necesario alcanzar una forma de conocimiento superior mediante la abstracción, de modo que se logre un conocimiento verdadero y universal.

La fe, fundamento de la razón: En este punto se debe recurrir a la razón, única capaz de determinar el valor de verdad del conocimiento. Sólo sobre la base de la razón es posible obtener los primeros resultados universales y edificar sobre ellos un racionamiento posterior que sirva para constituir una doctrina científica, desde el punto de vista teológico.

Como Dios es el origen y el fundamento de todo conocimiento, los conceptos y los conocimientos racionales deben servir como base para un desarrollo ulterior. La confirmación de dicho conocimiento sólo puede hacerse a través de la teología.

Los primeros pasos del empirismo: Guillermo de Ockham (1280/1349) da completa autonomía a la fe respecto de la razón. También hace una distinción tajante entre Dios omnipotente y la multiplicidad de individuos. Con esta base, plantea la primacía del individuo, lo que lleva a la primacía de la experiencia, donde se produce el conocimiento. Así, establece la diferencia entre conocimiento incomplejo: el co-nocimiento particular de los objetos y los términos que los designan; y conocimiento complejo: las proposiciones que se hallan compuestas de términos.

En este contexto, Ockham argumenta que la evidencia de un conocimiento complejo surge de la evidencia de los términos que la componen. No puede darse el primero sin el segundo. El criterio de verdad y de validez del conocimiento, entonces implica la concordancia entre lo que se dice de la cosa y lo que ella en realidad es. Este es un criterio objetivo, incluso externo al sujeto mismo.

SOBRE EL CONOCIMIENTO

(Santo Tomás)

Que la sustancia intelectual del hombre es la última en el terreno de las substancias intelectuales. Como en los seres no es posible proceder hasta el infinito, del mismo modo que se puede encontrar entre las sustancias citadas una suprema que se acerque más a Dios, es igualmente necesario encontrar otra ínfima, que se aproxima más a la materia corporal, y esto está muy claro.

El lugar de la inteligencia: Tenemos que admitir en el hombre una inteligencia superior a la de todos los animales, puesto que es evidente que sólo el hombre considera la universalidad y las relaciones entre las cosas y las cosas inmateriales, que son percibidas tan sólo por la inteligencia.

Es posible que la inteligencia sea un acto ejercido por un órgano corporal, como la visión es ejercida por el ojo. Pero el entendimiento puede conocer todas las naturalezas sensibles, y así las conociese por medio de un órgano corporal, sería necesario que este órgano estuviese despojado de toda naturaleza sensible, lo que no puede ser.

El conocimiento racional: Además, toda razón cognoscitiva conoce por el mismo modo con que la especie de lo conocido está en ella misma, porque esta especie es para ella el principio de conocimiento.

Y como el entendimiento conoce de manera inmaterial las cosas, hasta aquellas que son inmateriales en su naturaleza, abstrayendo la forma universal de las condiciones materiales que producen la individuación, es imposible que la especie de una cosa conocida esté materialmente en la inteligencia, y la cosa conocida no es recibida en un órgano corporal pues todo órgano corporal es material.

Esto mismo lo comprueba el que los sentidos se debiliten y corrompan por las sensaciones más fuertes, como el odio por los sonidos desmesurados, y la vista por las cosas demasiado brillantes, lo cual ocurre porque se rompe la armonía del órgano.

Pero la inteligencia se fortalece más, por la excelencia de las cosas que entiende; puesto que el que comprende las más altas cosas inteligibles, mejor puede comprender las otras.

La substancia inorgánica del entendimiento: Ahora bien, como tenemos que el hombre es inteligente y que el entender del hombre no se efectúa por un órgano corporal, es necesario que haya alguna substancia incorpórea por medio de la cual el hombre puede entender.

Pues aquello que puede obrar por si sin la ayuda del cuerpo, tampoco depende del cuerpo en cuanto a su substancia.

En efecto, todos los poderes y formas que no pueden subsistir por sí sin el cuerpo, no pueden tampoco ejercer su acción sin el cuerpo.

Pues el calor no calienta por si, sino el cuerpo por medio del calor. Así, pues, la subsistencia incorpórea por medio de la cual el hombre es inteligente, es la última en el género de las substancias intelectuales, y se aproxima mucho a la materia.

La mente no puede ser un órgano material, puesto que el conocimiento que en ella se desarrolla es de naturaleza inmaterial.

...

Descargar como  txt (10.1 Kb)  
Leer 6 páginas más »
txt