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Tecnicas De Investigacion


Enviado por   •  20 de Abril de 2015  •  1.501 Palabras (7 Páginas)  •  220 Visitas

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LA SISTEMATIZACION DE EXPERIENCIAS Y LAS CORRIENTES INNOVADORAS DEL PENSAMIENTO LATINOAMERICANO.

Contexto histórico

¿Por qué hablamos de sistematizar experiencias?

Las experiencias son siempre experiencias vitales, cargadas de una enorme riqueza por explorar; cada experiencia constituye un proceso inédito e irrepetible y por eso en cada una de ellas tenemos una fuente de aprendizajes que debemos aprovechar precisamente por su originalidad por eso es fundamental extraer sus enseñanzas y por eso es también importante comunicarlas y compartirlas.

Sistematización de experiencias: un concepto enraizado en la realidad latinoamericana

En 1959, la Revolución Cubana abre un nuevo período histórico en nuestra América, demostrando que era posible romper el esquema de dominación colonial que caracterizó a nuestros países desde la conquista española y, además, que era posible pensar desde la realidad específica de América Latina y el Caribe. Este acontecimiento cuestionó radicalmente los esquemas populistas y paternalistas, temas como el del “Desarrollo” y de la “Modernización” se pusieron de moda, venían acompañados de modelos de intervención social y comunitaria dirigidos a incorporar a la población en estos proyectos pensados y dirigidos desde afuera. Dichos modelos de intervención pronto pasaron a ser cuestionados y confrontados desde una perspectiva de transformación social, generándose a partir de allí una serie de procesos de crítica, replanteamiento y redefinición tanto de los paradigmas de interpretación como de los métodos de acción social. El nuevo contexto histórico-social de nuestra América promueve, entonces, el surgimiento de un nuevo “contexto teórico” en el que el trabajo social, el trabajo educativo y el trabajo investigativo son atravesados por una intensa confrontación.

Antecedentes de la sistematización de experiencias

En Trabajo Social: se dio entre los años 50 y 60, relacionados con la profesionalización del Servicio Social bajo influencia norteamericana, la cual pregonaba el “metodologismo ascéptico”. Desde el campo del Trabajo Social la temática de Sistematización, durante los años sesenta y setenta, se sustentan en cuatro pilares:

a) la referencia a la particularidad del contexto latinoamericano y por tanto, a las perspectivas de transformación social predominantes en el contexto teórico de ese período.

b) la negación de una metodología neutra influenciada por las corrientes norteamericanas dominantes.

c) la centralidad de la práctica cotidiana y del trabajo de campo profesional como fuente de conocimiento.

d) el interés por construir un pensamiento y una acción orientados con rigurosidad científica.

En el Trabajo Educativo:

En la acción y en la reflexión de los educadores y educadoras populares latinoamericanos de los años setenta, Freire pasó a ser una referencia fundamental. La articulación de su propuesta desde la educación, con la Teoría de la Dependencia en el campo de las ciencias sociales y con la Teología de la Liberación en el campo de la renovación de las formas de vivir y pensar la fe, contribuyó, definitivamente a conformar un contexto teórico coherente y afirmativo para un sector creciente de activistas sociales y políticos, se produjo una multiplicación impresionante de experiencias de educación popular a lo largo y ancho de América Latina. Junto con ella, comienza a surgir el interés por conocer, analizar y debatir en torno a este fenómeno social y su concepción educativa. Estas investigaciones, reflexiones, análisis y polémicas se realizan en dos ámbitos: el de la investigación en educación de adultos y el de la práctica y reflexión de los mismos educadores y educadoras populares. Precisamente, la sistematización de experiencias desde la educación popular, va a significar uno de los instrumentos privilegiados de cuestionamiento y de búsqueda alternativa a esos “métodos ortodoxos”, en general positivistas, que dominaban el campo de la investigación y evaluación educativa.

Hoy en día a más de una década después de este trabajo de Palma que nos sirvió en dicho momento de orientación y referencia fundamental28, podemos encontrar un panorama de la sistematización mucho más enriquecido teórica, práctica y metodológicamente. Definitivamente ha habido más encuentros que desencuentros y a estas alturas podemos decir que las experiencias, los debates y las propuestas son muchos más y también más consistentes.

INTERPRETACIÒN

La sistematización de experiencias es una investigación cualitativa de enfoque crítico e interpretativo, que intenta describir e interpretar prácticas sociales singulares dando un lugar privilegiado al punto de vista de los actores a la lógica y a los sentidos que están presentes en las prácticas.

Se entiende por sistematización de experiencias al proceso de reconstrucción y reflexión analítica sobre una experiencia de acción o intervención mediante la cual interpretarla y comprenderla. Con este proceso se obtiene un conocimiento consistente que permite transmitir la experiencia, confrontarlas con otras experiencias o con el conocimiento teórico existente.

El eje central de la sistematización es la mirada retrospectiva y el esfuerzo de la sistematización se hacen desde nuestro hoy a partir de los problemas, interrogantes, los desafíos, cuestionamientos, necesidades y contradicciones que se tienen en el momento actual y con una visión prospectiva. Este es el punto de partida de la sistematización de experiencias y son los aspectos que deben de ser calificados por ella.

Durante los años setenta y ochenta, en América Latina, el interés por el tema de la sistematización, surge y se alimenta de seis corrientes renovadoras de empeños teórico-prácticos que buscan redefinir desde la particularidad de la realidad latinoamericana, los marcos de interpretación y los modelos de intervención en la práctica social que habían primado hasta entonces: El Trabajo Social re conceptualizado; la Educación de Adultos; la Educación Popular; La Teología de la Liberación; la Teoría de la Dependencia y la Investigación Acción Participativa. A su vez, estas seis corrientes se estimulan, retroalimentan y convergen entre sí, al punto que muchas veces algunas se entrecruzan y hasta confunden. Por ello, siendo la sistematización de experiencias, un concepto y una propuesta tan profundamente enraizada en nuestra historia, no podemos entenderla ni asumirla sino dentro de este marco y sus desafíos.

Estas corrientes renovadoras que surgen en nuestro continente, no aparecen ni se desarrollan por generación espontánea o por su propio dinamismo. Surgen porque los procesos sociales, políticos y culturales de nuestra América Latina pusieron en cuestión toda la lógica de interpretación colonial y subordinada que había sido predominante hasta los años cincuenta en el pensamiento latinoamericano. La ruptura de esos paradigmas fue posible gracias a las rupturas producidas por los movimientos sociales y políticos revolucionarios que abrieron los cauces a la imaginación y a la conquista de lo nuevo.

Todas las propuestas de sistematización expresan una oposición flagrante con la orientación positivista que ha guiado y guía a las corrientes más poderosas en ciencias sociales. Todo esfuerzo por sistematizar, cualquiera que sea su traducción más operacional, se incluye en esa alternativa que reacciona contra las metodologías formales. La sistematización se incluye en esa corriente ancha que busca comprender y tratar con lo cualitativo de la realidad y que se encuentra en cada situación particular, Unos la explicitan y otros no, pero la oposición a la reducción positivista de toda sistematización, se funda en una epistemología dialéctica.

Entonces las conclusiones son:

a) Que efectivamente existe una práctica específica que merece el nombre propio de “sistematización” y que, por tanto, se puede distinguir de otros esfuerzos referidos al conocimiento de los hechos sociales, tales como la investigación o la evaluación.

b) Que el término “sistematización” es utilizado de manera ambigua por educadores/as y promotores/as y que entre los autores y autoras no existen acuerdos plenos con respecto a los contenidos que se le adjudican.

c) Que, entre las distintas propuestas, aun con distintos enfoques y énfasis particulares (de concepción y de método) existen influencias mutuas y filiaciones mestizas.

d) Que la fuente de unidad fundamental, manifestada en la coincidencia de los objetivos generales, se encuentra en un marco epistemológico común.

JUZGAR

La sistematización es aquella interpretación crítica de una o varias experiencias, que a partir de su ordenamiento y reconstrucción, descubre o explicita la lógica del proceso vivido, los factores que han intervenido en dicho proceso, cómo se han relacionado entre sí, y por qué lo han hecho de esa manera.

Se caracteriza por Producir nuevos conocimientos. Objetivizar lo vivido. Poner en orden conocimientos desordenados y percepciones dispersas. Esto facilita que las personas recuperen ordenadamente lo que ya saben de su experiencia, descubran lo que "aún no saben" y se les revele lo que aún no saben que ya saben. Prestar atención a las interpretaciones, a través de la creación de un espacio para compartirlas, discutirlas y confrontarlas

Esta metodología y forma de entender la sistematización tuvo un gran desarrollo en América Latina durante estos años y tuvo relaciones y confluencias con la metodología de Investigación Acción Participativa (IAP), las escuelas universitarias de trabajo social, así como con la CEAAL (Consejo de Educación de Adultos de América Latina). Durante los años setenta tuvo un amplio desarrollo que posibilitó concretar tanto el término como la metodología y herramientas a aplicar. Fue un tiempo de propuestas y experiencias vinculadas en gran medida a la educación popular.

No obstante, desde entonces hasta la actualidad, ha habido momentos más álgidos que otros que han posibilitado que la sistematización se desarrolle por diferentes caminos y se materialice en diferentes propuestas.

Sistematizamos fundamentalmente porque queremos aprender de nuestras prácticas

• Para mejorar nuestras prácticas.

• Para generar aprendizajes.

• Para elaborar nuevos conocimientos.

Para comunicarlos y compartirlos con otras personas y organ

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