Conflicto Y Negociación

El conflicto forma parte de nuestro quehacer diario, se encuentra presente como parte de nuestra propia actividad como ser humano. Lo encontramos desde que iniciamos nuestro rutina diaria, ¿quién no ha tenido un conflicto al empezar el día, antes de marcharse al trabajo, en el seno de su hogar, o al transportarse a su centro laboral?; es natural que los conflictos sean más frecuentes en los centros laborales, por que pasamos el mayor tiempo de nuestras vidas conscientes, en ellos, donde encontramos intereses compartidos con los nuestros, desde la forma de trabajo, de enfocar o abordarlos problemas que se presentan hasta personas que interfieren con nuestras metas u otras que anhelan nuestro puesto. Sin embargo, si bien es cierto que los conflictos laborales son muy frecuentes en nuestra vida profesional, son los conflictos personales, ya sea los que ocurren en el centro de trabajo, en nuestra familia, con nuestras amistades, las que de alguna forma, nos dañan, nos impactan, repercuten profundamente en nuestras relaciones, laborales, familiares, sociales, etc. En el presente ensayo abordaré el tema del conflicto y negociación dentro de las organizaciones, desde el punto de vista positivo, es decir, que se apoyará objetivamente la idea de que éstos son beneficiosos para las organizaciones.

Para comenzar, un conflicto se define como un proceso que comienza cuando una de las partes percibe que la otra ha sufrido un efecto negativo, o está por hacerlo, algo que a la primera le preocupa. El concepto en sí es muy global, como debe ser pues incluye todo tipo de desacuerdos entre dos partes que pueden ser metas, personas, proyectos, comportamientos, etc. Los conflictos han sido considerados por años por parte de distintas teorías como la tradicional, de las relaciones humanas y la interaccionista. La primera ve los conflictos como algo negativo que debe ser evitado, la segunda los considera inevitables y con potencial positivo, la tercera en cambio los define como necesarios para que una organización no se estanque, sea creativo, autocritico y viable . Considero que ésta última teoría es la más acertada si bien la segunda tiene un punto muy importante: “los conflictos no se pueden evitar”, por lo tanto lo mejor es sacar provecho de ellos, y generarlos cuando sea necesario un cambio organizacional o en cualquier otro aspecto de la vida cotidiana. Como los conflictos son sistemas sociales, pueden ser entendidos en base a tres dimensiones del sentido que es necesario conocer. La primera de ellas, la objetual, aborda los temas sobre los cuales se plantea el conflicto, incluyendo las posiciones de cada uno de los interesados. La segunda; social, está relacionada con los actores del conflicto, disponiendo de posibilidades de acción que serán respondidas por el otro. Y por último, la temporal, caracterizada por la extensión en el tiempo del conflicto y por los horizontes temporales de quienes intervienen. Como todo sistema, el conflicto para que se desarrolle, debe pasar por un proceso compuesto por cinco etapas. La primera etapa: Oposición potencial o incompatibilidad es donde se presentan las condiciones para que se genere un conflicto concentrándose

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