Saber Y Hacer

SABER Y HACER

Es un texto de superación personal que nos indica cómo aprender y poner en práctica lo aprendido, nos permite encontrar la solución para cerrar la brecha entre el saber y hacer que se ha convertido en un objetivo para quienes consideran que el aprendizaje no se debe limitar solo en buscar nuevas ideas, sino que se debe aplicar en la vida real, es decir se plantea la búsqueda de lo que hace falta en el proceso de aprendizaje cuando solo se lee, escucha, y asiste a un seminario, lo que se conoce como el eslabón perdido. Esto implica un cambio de actitud permanente y un enfoque en el poder de la repetición, además es un método sencillo y sistemático para aprender de manera más eficiente y utilizar el conocimiento adquirido para lograr cambios positivos y duraderos tanto en el comportamiento propio como en el de las personas que nos rodean.

EL aprendizaje es un viaje que conduciría el conocimiento a la acción, sin embargo esto se ha quedado en palabras puesto que las personas dedican la mayor parte del tiempo en un plan de adquirir información nueva, que aplicar o desarrollar estrategias para utilizar el conocimiento que se ha adquirido en su vida cotidiana.

Un ejemplo típico es cuando se asiste a un seminario y los asistentes toman nota pero esto no es suficiente para cerrar esta brecha, ya que se necesita que estas notas sean releídas constantemente y aplicadas. Tal vez nos hemos convertido en adictos al conocimiento. Es más divertido adquirir conocimiento que aplicarlo.

Repetir, repetir y repetir es la clave para cerrar ese espacio entre el conocimiento y la acción, entonces la repetición espaciada se considera como el eslabón perdido entre lo que la gente sabe y lo que en realidad hace. John Haggai la considera como “la madre de todas las habilidades y del cambio permanente”.

Las tres razones por las cuales las personas no ponen en práctica lo que saben son:

La primera razón, es la sobrecarga de información (sobredosis de conocimiento), es un concepto que popularizó Alvin Toffler, y cuyas referencias se remontan a los años 60, donde apareció en libros como el “The Managing of Organizations” de Bertram Gross. Según el propio Toffler, “el exceso de información sobre un tema, genera dificultades para comprenderlo, así como para tomar decisiones a partir de los datos obtenidos, por lo que el exceso de información puede ser tan dañino como la escasez de información sobre un tema”.

La sobrecarga de información no produce cambio en el comportamiento, y afecta a la repetición espaciada en la medida que tanta es la información que tiene nuestro cerebro que a la hora de aplicarla no sabemos como hacerlo, es decir nos inmoviliza. Lo ideal es que seleccionemos lo que necesitamos o deseamos aprender, nos enfoquemos solo en eso para dominarlo por completo y así no crear confusiones y luego ponerlo en práctica vigorosamente. También debemos tener en cuenta la filosofía del más de menos, es decir, las personas deben aprender más de menos que menos de más.

La segunda razón, es el filtrado negativo,(pensamiento viciado), hace referencia a la mentalidad negativa de las personas que de una manera u otra termina afectando el proceso de aprendizaje y por ende la ejecución de este. Por ejemplo cuando se bloquea nuestra mente de un 100% de la información, nuestro cerebro solo capta el 10%.

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