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Tecnicas Psicoterapeuticas Modelo Humanista-existencialista

yosah22 de Agosto de 2013

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ÍNDICE

1. Conocimiento del Cuerpo 3-4

2. Relajación Progresiva 5-6

3. Administración del Tiempo 7-8

4. Nutrición 9

5. Ejercicio 10-11

6. Toma de Conciencia 12-13

7. La Silla Caliente 14-15

8. La Silla Vacía 16

9. El Monodrama 17-18

10. Expresión Metafórica 19

11. El Psicodrama 20

12. Grupos de Encuentro 21-22

13. Los Juegos ó Ludoterapia 23-24

14. Manejo de las Funciones Preceptúales 25

15. Manejo de Psicología del cuello, hombros, espalda y brazos 26

16. Técnicas para Mejorar Relaciones Interpersonales 27

17. Técnicas para Mejorar Autoestima 28

FICHA TÉCNICA # 1

(Grupo 1)

1. Nombre de la técnica: “CONOCIMIENTO DEL CUERPO”.

2. Descripción: Es una teoría que trabaja estrechamente en la relación mente- cuerpo y mantiene la teoría que el cuerpo siente el estrés antes que este se haga consciente a nivel mental, así tenemos que la tensión muscular es la manera en que el organismo nos permite saber que estamos estresados.

3. Autor: Fritz Perls.

4. Modelo psicoterapéutico del que se deriva: Gestalt.

5. Objetivo de la técnica: Conocer el organismo e identificar las áreas de tensión que hay en el.

6. Procedimiento de la aplicación:

6.1. TOMA DE CONCIENCIA: (Técnica).

6.1.1. En primer lugar concentre su tensión en el mundo exterior. Formule frases del tipo de “soy consciente de ___________ (por ejemplo, soy consciente que por la calle están pasando coches, de que corre una brisa suave, el café estimula, etc.)

6.1.2. Una vez que haya tomado conciencia de todo lo que le rodea, dirija su atención a su cuerpo y a sus sensaciones físicas es decir, a su mundo interior. (Por ejemplo, soy consciente de que tengo frío, que siento sensación de hambre, la tensión que siento en el cuello, de que noto cosquilleo en la nariz, etc.).

6.1.3. Ahora pase de un tipo a otro de conciencia. (Por ejemplo, soy consiente de que se me está clavando la silla en las nalgas, de que alrededor de la lámpara se forma una luz, etc.).

6.1.4. Realizando estos ejercicios en los ratos libres, aprenderá a separar y apreciar la diferencia que existe en su mundo interno y su mundo externo.

6.2. EXPLORACIÓN DEL CUERPO: (Técnica).

6.3. LIBERACIÓN DEL CUERPO: (Técnica).

7. Recursos que se utilizan: Silla, cama dura y alfombra.

8. Tiempo y frecuencia de aplicación: 45 minutos, tres veces a la semana durante 2 meses.

9. Alteraciones en las que es recordable su aplicación: Estrés, ansiedad, tensión muscular crónica, irritabilidad, mal humor, trastornos crónicos a nivel del estómago.

10. Manera de evaluar su efectividad: Utilizando el Registro de Tensión General, que contiene una escala del 1 al 10, que se aplica antes y después de haber realizado los ejercicios.

11. Condiciones de aplicación: Cuando esta bajo condiciones de estrés y es inevitable tensar los músculos del cuerpo, en etapas de ansiedad, mal humor, irritabilidad.

FICHA TÉCNICA # 2

(Grupo # 2)

1. Nombre de la Técnica: “RELAJACIÓN PROGRESIVA”

2. Descripción: Ésta técnica está basada en la premisa de que las respuestas del organismo a las diferentes situaciones que provoca pensamientos y actos que compartan tensión muscular. Ésta tensión fisiológica, a su vez, aumenta la sensación subjetiva de ansiedad. La relajación muscular progresiva reduce la tensión fisiológica y es incompatible con la ansiedad.

3. Autor (es): Edmond Jacobson (1929)

4. Modelo Psicoterapéutico del que se deriva: Modelo Humanístico-Existencial

5. Objetivo de la Técnica: Llevar al cliente, con un alto grado de ansiedad hacia la relajación; centrándose en cambiar la tensión muscular por la relajación muscular.

6. Procedimiento de Aplicación: Se indica al sujeto lo siguiente: Póngase en una posición cómoda y relájese. Ahora cierre el puño derecho y apriételo más y más fuerte, observando la tensión que se produce al hacerlo. Manténgalo cerrado y fíjese en la tensión que se ha desarrollado en el puño, en la mano y en el antebrazo. Ahora relájese. Sienta la flacidez de su mano derecha y compárela con la tensión que sentía hace unos segundos. Repita de nuevo el proceso pero esta vez con la mano izquierda y, por último, hágalo con las dos manos a la vez. Ahora doble los codos y tense los bíceps. Ténselos tanto como pueda y repare en la sensación de tensión. Relájese y estire los brazos. Déjelos relajados y observe la diferencia. Repita este ejercicio y los sucesivos, por lo menos una vez. Dirija su atención hacia la cabeza. Arrugue la frente tanto como pueda. Ahora relájese y desarrúguela. Imagínese cómo toda la piel de su frente y de su cabeza entera se ha ido estirando hasta ponerse completamente lisa en el momento en que se ha sentido relajado. Ahora frunza el entrecejo e intente sentir cómo las venas se extienden por la frente. Relájese y deje que la frente se ponga de nuevo lisa. Ahora cierre los ojos y apriételos fuertemente.

Observe la tensión. Relájelos y déjelos cerrados suavemente. Ahora cierre la mandíbula, apretando con fuerza; note la tensión que se produce en toda la zona. Relájela. Una vez relajada, notará que los labios están ligeramente separados. Aprecie el contraste real que hay entre el estado de tensión y el de relajación. Ahora apriete la lengua contra el (echo de la boca, es decir, contra el paladar. Observe el dolor que se produce en la parte posterior de la boca, Relájese. Ahora apriete los labios haciendo con ellos una “O”.

Relájelos. Observe cómo su frente, sus ojos, su mandíbula, su lengua y sus labios están, en este momento, relajados. Desplace la cabeza hacia atrás tanto como pueda, sin hacerse daño. Observe la tensión que aparece en el cuello. Gírela hacia la derecha y fíjese en que se ha desplazado el foco de tensión; gírela ahora hacia la izquierda. Enderece la cabeza y muévala ahora hacia delante, apretando la barbilla contra el pecho. Observe la tensión que siente en la nuca. Relájese dejando que la cabeza vuelva a una posición natural. Ahora encoja los hombros. Encójalos hasta que la cabeza le

quede hundida entre ellos. Relájelos. Ahora bájelos y sienta cómo la relajación se extiende al cuello, nuca y hombros; relajación pura, más y más profunda. Dé a su cuerpo entero la oportunidad de relajarse. Sienta la comodidad y la dureza. Ahora inspire y llene de aire los pulmones. Sostenga la respiración.

Observe la tensión que se produce. Ahora espire haciendo que el tórax se deshinche y relaje, dejando que el aire vaya saliendo poco a poco. Continúe relajándose haciendo que la respiración se produzca de una forma espontánea y agradable. Repita esto varias veces, observando cómo la tensión va desapareciendo de su cuerpo a medida que el aire va siendo espirado. Ahora tense el estómago y manténgalo así. Note la tensión y luego relájese. Ahora coloque una mano en esta región. Respire profundamente apretando la mano contra la pared del estómago. Aguante y luego relájese. Perciba la diferencia que se produce al soltar el aire. Ahora arquee la espalda sin llegar a hacerse daño. Mantenga el resto del cuerpo tan relajado como pueda. Concentre su atención en la parte irás baja de la espalda. Ahora relájese más y más profundamente.

Tense las nalgas y los muslos. Para ello, contraiga los músculos apretando con Los talones hacia abajo, tan fuerte como pueda. Relájese y sienta la diferencia. Flexione los dedos de los pies con fuerza para que se tensen las pantorrillas. Estudie la tensión que se produce. Relájese. Ahora extienda con fuerza los dedos, dirigiendo las puntas hacia arriba y sentirá con ello la contracción de los músculos de las espinillas. Relájese otra vez.

Sienta la sensación (le pesadez en la parte más baja del cuerpo, a medida que la relajación se va haciendo profunda. Relaje los pies, los tobillos, las pantorrillas, las espinillas, las rodillas, los muslos y las nalgas. Luego deje que la relajación se extienda hasta el estómago, hasta la región lumbar y el tórax. Deje que se extienda más y más. Siéntala en los hombros, en los brazos y en las manos. Más y más profundamente. Sienta la sensación de laxitud y relajación en el cuello, en la mandíbula y en todos los músculos de la cara.

7. Recursos que se utilizan: Los recursos que se utilizan son la presencia del cliente y del terapeuta. Además, se puede hacer uso de un diván (sofá), cojines, reloj, etc.

8. Tiempo y frecuencia se la Aplicación: La frecuencia debe de ser de dos a tres veces a la semana por 25 minutos al día. Cuando el cliente domina la técnica puede realizarlo cuando se sienta en momentos de ansiedad.

9. Alteraciones en las que es recomendable la aplicación: Ansiedad, insomnio, depresión, fatiga, colón irritable, espasmos musculares, dolor de cuello y espalda, hipertensión, fobias moderadas y tartamudeo.

10. Manera de evaluar su efectividad: Mediante el avance de las sesione, cuando el cliente muestre mejoría considerables en la reducción de sus síntomas.

11. Condiciones de aplicación: Debe realizarse en un lugar silencioso, con temperatura agradable, con una posición corporal cómoda, ya sea recostado o sentado.

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