Bitácora Y Reflexión Sobre La Gerencia En La Pastoral Educativa

Bitácora y reflexión sobre la Gerencia en la Pastoral Educativa

La Educación venezolana requiere de un cambio substancial, donde el objetivo principal sea la calidad de formación del educando, es decir, la búsqueda constante de la excelencia de los alumnos, basada en la eficacia y la eficiencia de los métodos pedagógicos aplicados durante el proceso de enseñanza. La calidad de la educación depende principalmente del docente, de la forma en que cumpla con las funciones administrativas conocidas como: planificación, organización, dirección y control, que conduzcan al crecimiento personal, ético, ESPIRITUAL y creativo del estudiante; de la forma en que se comprometa a estudiar profundamente la realidad social del país y a desempeñar el verdadero papel de Educar.

Dentro del esquema educativo, el docente juega un papel importante, al ser el agente transformador de esta sociedad, por una sociedad más justa, más humana, más creativa; de allí que se requiere que sea: un guía, orientador, facilitador, investigador, motivador, participativo y creador de oportunidades que contribuyan al proceso de enseñanza y aprendizaje, fomentando la utilización de técnicas y estrategias que mediante una tarea planificada, dinámica y con espíritu de cambio, se puedan obtener sólidos resultados prácticos que aumenten el nivel de calidad en el servicio.

Hoy en día para que las Escuelas, específicamente, en el área de la Pastoral, tengan éxito en el logro de sus objetivos, es necesaria la organización y la gerencia, se entiende por gerencia un proceso que involucra: planeamiento, organización, dirección y control. La gerencia es responsable del éxito o fracaso de un negocio y en este caso, se trata de llevar a cabo, el negocio más grande e importante, llevar la Buena Nueva a los alumnos y nutrirlos de valores cristianos.

La gerencia es ejercida por un gerente, quien es la persona que guía a los demás, que busca lograr que las cosas se hagan, es el encargado de dar y ejecutar órdenes, es por esto, que el coordinador de Pastoral debe ser una persona que asume su protagonismo en la Pastoral educativa participando en la programación, organización y realización de las actividades religiosas de la escuela, es quien está al frente de un equipo y lo conduce para que realice de la mejor manera la finalidad para la que fue creado. Su función es a nivel de la coordinación y ejecución. Con los integrantes de su grupo programa acciones concretas en tiempos determinados.

El Coordinador de Pastoral se caracteriza por ser una persona con proyección de liderazgo, que está inmersa en un proceso de educación en la fe y de madurez; que empieza a vivir la pedagogía de la acción, hace vida de lo que aprende, es democrática y amable en su trato con los alumnos; sabe escuchar, relacionarse y dialogar con animadores y asesores. Tiene claros los objetivos de la pastoral educativa y de la finalidad para la que fue creado y se esfuerza porque sean alcanzados por todos los integrantes del equipo.

Tenemos que estar consciente de que los pastoralistas estamos llamados a desarrollar con profesionalismo, Espíritu Pastoral y ética, nuestra tarea de guiar y acompañar, tanto a los docentes, de quienes dependen en gran medida la inserción del Espíritu y los valores cristianos, como a los alumnos, a los cuales debemos guiar y orientar.

Debemos poseer un Espíritu de entrega en nuestra

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