Rechace las fantasías mundanales; acepte las realidades del Reino

Rechace las fantasías mundanales; acepte las realidades del Reino

Es el séptimo juego de la Serie Mundial entre los Yankees de Nueva York y los Medias Rojas de Boston.

Estamos en el cierre del noveno inning y batean los Medias Rojas lo que puede ser su última oportunidad.

Hay 2 outs en la pizarra. Y ganan los Yankees 3 carreras por 2.

Hay 2 hombres en circulación en primera y segunda  base. De pronto sale al campo un corredor emergente por los Medias Rojas: se trata de Tomasito Rojas

Quien hace su primera aparición en la serie mundial.

Listo los jugadores…

Se prepara el pitcher

 Ahí lanza… ahí va un batazo por toda la raya del right field. La pelota pica en zona buena y se va a lo más profundo de la campo. Va a hacer un extrabase.

Anota el corredor de la segunda y se empata el juego.

La pelota continúa lejos en la cerca.

Viene Tomasito Rojas cruza por la tercera y lo están mandando para el home.

Allí viene el tiro del jardinero derecho.

Viene el corredor….

Hay jugada en el home.

Y es………

Es hora de levantarse. Suena el despertador. Son las 6 de la mañana y Tomasito Rojas de 8 años tiene que ir al colegio a estudiar.

Ese ejemplo nos muestra la fuerza que tiene nuestra mente, nuestra imaginación. Es un don divino poder imaginarnos las cosas. Pensar en cosas hermosas que nos gustan ver.

Será malo utilizar nuestra imaginación? No, en absoluto es como ya lo mencionamos un don divino. Lamentablemente muchas personas utilizan mal ese don divino. En vez de pensar en cosas edificantes, en cosas hermosas, focalizan su facultad de imaginar para soñar con fantasías mundanales.

A que nos referimos cuando hablamos de fantasías mundanales?

Pues pensemos en un momento en lo que está en la mente en el común de las personas a nuestro alrededor. Que es lo que la gente anhela vehemente poseer?

• Riqueza
• Posesiones materiales que incluya lujos
• Una hermosa casa grande y lujosa
• La moda
• Fama y prestigio
• Posición

Por otro lado también hay personas que ocupa su mente todo el día pensando en cosas inmorales.

 Todas esas cosas también pudieran pasar por nuestra mente.

Ahora…será un pasatiempo inofensivo esto de fantasear con estas cosas ? Sería sensato razonar así: “es una decisión mía lo que hago con mi vida. Como esto pasa en mi mente nadie lo podrá saber más que yo. No le voy a hacer daño a nadie. Después de todo sólo son pensamientos.”

 Pues veamos lo que la biblia dice al respecto los invito a todos a buscar conmigo la carta de Santiago: 1:14,15.

Les invito a dejar la biblia abierta en esos 2 versiculos.

Lectura: Más bien, cada uno es probado al ser provocado y cautivado por su propio deseo. 15 Entonces el deseo, cuando se ha hecho fecundo, da a luz el pecado; a su vez, el pecado, cuando se ha realizado, produce la muerte.

Notamos varias cosas en estos versículos:

 “cada uno es probado al ser provocado y cautivado por su propio deseo”

 A que  se refiere el escritor?

 Es algo que nos pasa a menudo sin que nosotros nos demos cuenta.  Nosotros vemos algo en la televisión tal vez de una comida deliciosa. Tal vez un pollo horneado y crujiente,  guasacaca, con hallaquitas, yuca frita y un refresco bien helado. Inmediatamente pudiera producirse en nosotros un deseo de comer.  Ese deseo no es nada malo todos tenemos el deseo de comer y es algo más natural.

Pero qué tal si ese deseo está relacionado con el sexo opuesto. Ya cambian las cosas ya no es un deseo apropiado.

 Esto es el resumen del primer paso que menciona Santiago y que encierra una gran verdad: “Lo que escuchamos o lo que vemos produce o provoca un deseo”.

A veces ese deseo se va, se desvanece por si solo como un humo y uno no sigue pensando nada más.

 Pero si ese hermano o hermana no aleja ese deseo, ese pensamiento malsano viene ahora la parte 2 de la carta de Santiago en el versículo 15: “entonces el deseo cuando se ha hecho fecundo da luz al pecado” 

A que se refiere el escritor? “entonces el deseo cuando se ha hecho fecundo da luz al pecado” 

Se refiere a las fantasias mundanales.

En vez de rechazar ese deseo malsano el hermano empieza a imaginarse las cosas y ya no es sólo pasajero es algo que uno vuelve a meditar y pensar y soñar una y otra vez.

Notaron que la biblia dice que esas fantasías mundanales ya son un pecado?

Porque nosotros estamos mentalmente repasando el pecado. Es como un ensayo de lo que haríamos si tan sólo tuviéramos la oportunidad.

Ya lo queremos efectuar. Lo único que nos hace falta es la oportunidad de hacerlo.

El paso que sigue a continuación es determinante… continua Santiago: versículo 15: “el pecado (esa fantasia mundanal ) cuando se ha realizado produce la muerte” 

Ya no es solo un ensayo mental a una práctica material.

Y esta situación nos lleva a la muerte. Primero a una muerte espiritual y luego si uno no hace cambios drásticos podría hasta causarnos una muerte literal.

Para que nosotros apreciemos esos tres pasos un poco más vamos a centrar toda nuestra atención en 3 personajes bíblicos para que veamos cómo ellos se dejaron llevar por esas fantasías mundanales y como sucumbieron ante ellas.

El primer personaje bíblico es Satanás

 En algún momento determinado en el pasado por lo que había visto y escuchado de parte de Jehová en el cielo Satanás tenía un deseo. Muy probablemente (primer paso) ese deseo inicial era algo pasajero.

 No lo paró. Siguió pensando, (Segundo paso), fantaseando,  imaginándose las cosas cómo sería si el fuera dios, si yo estuviese en el lugar de Jehová, si yo tuviera el control como dios lo tiene.

 Ya pasó a ser un pecado.

 Se convirtió en fantasías mundanales que él manejaba en su mente. Y (pasa a número tres) cuando lo lleva a la práctica. Cuando se rebela contra Jehová. Y a dónde  llevará esa rebeldía? Veamos lo que dice Revelación capítulo 20, versículo 1-3,10.

Lectura: Y vi a un ángel que descendía del cielo con la llave del abismo y una gran cadena en la mano. 2 Y prendió al dragón, la serpiente original, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años. 3 Y lo arrojó al abismo, y [lo] cerró y [lo] selló sobre él, para que no extraviara más a las naciones hasta que se terminaran los mil años. Después de estas cosas tiene que ser desatado por un poco de tiempo.

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