El liderazgo

Presentación:

En el ámbito de liderazgo hay muchos ejemplos e ellos y han sido objeto de estudio y admiración, y han pasado a la historia como un modelo que se debe seguir. Esto es tratado con unas cualidades excepcionales, fuera de lo común. Son líderes con unos principios y valores personales fuertemente arraigados que les permitieron lograr lo que hoy tantas empresas persiguen: que es el compromiso de sus empleados con una misión rica en contenido, credibilidad y urgencia. Sin embargo, que podemos hacer con aquellos que no fueron dotados con estos atributos de liderazgo y la falta de sacrificio para quienes les alcanza el dinero. En el tiempo que llevamos estudiando al desarrollo e implementación de la dirección por misiones, un modelo de gestión que introduce la misión en la gestión diaria de la empresa– hemos comprobado que el liderazgo es alcanzable por personas comunes y en todos los niveles de la organización, si se dispone de un contexto adecuado. Ahora bien, para conseguir este contexto es necesario abandonar el enfoque personalista del líder que durante décadas ha imperado en las organizaciones. Sin embargo, la realidad es muy diferente a lo que en teoría se persigue. Muchas empresas, a pesar de que presentan el liderazgo como uno de sus valores fundamentales dentro de sus principios corporativos, en la práctica, siguen reteniéndolo en la cúpula de la organización. Este resumen presenta casos de liderazgo así como llegar a ser un buen líder en el ámbito laboral ayudado de un equipo empresarial para el logro de metas o misiones.

Punto de partida:

El liderazgo y el liderazgo estratégico. Esta separación entre las áreas de liderazgo y los líderes estratégicos es artificial y desafortunada, ya que una estrategia de éxito depende tanto del contenido como de la implementación. Significado de un líder es clave cuando la evaluación del entorno es difícil, la participación de los miembros está segmentada e incompleta y la tecnología o las conexiones entre las acciones y los resultados son ambiguas. Con el paso del tiempo, ésta ha dejado de ser una característica exclusiva de los altos directivos. Está incluido en las competencias esperadas de los directivos y mandos medios y, en algunos casos, los profesionales de primera línea también son evaluados. Para explicar cómo superar estas limitaciones y conseguir desarrollar el liderazgo de manera efectiva, conviene empezar distinguiendo tres tipos de liderazgo, dependiendo de la relación de influencia que existe entre líder y colaborador: liderazgo transaccional, liderazgo transformador y liderazgo trascendente. Para que la implementación tenga éxito, los líderes deben, primero, alinear las estructuras y procesos de la organización con la estrategia y entre sí; y, segundo, alinear a las personas, los directivos y los trabajadores con la estrategia, las estructuras y los procesos desarrollados para respaldarla.

Idea Central:

La idea central del texto trata de la Misión y liderazgo en la mayoría de los casos, en especial de las empresas que han mantenido su éxito a lo largo de los años, se trata de un liderazgo asociado a una misión también denominada credo, principios corporativos, valores, etc. Para conseguir el del liderazgo, es necesario, además, un sentido de trascendencia fundamentado en una misión común. La misión, que no queda reflejada únicamente en unos enunciados genéricos, tiene mayor capacidad para lograr el compromiso e identificación de los miembros de la empresa. Para un líder, este proceso, cada líder es el principal facilitador del cambio y ambos, misión y liderazgo, consistente capaz de transformar la cultura de toda una organización. Al estar al servicio de la misión, su compromiso se amplía y abarca todos los ámbitos de la misión que, además de los colaboradores, suele incluir a clientes, accionistas y otros. En este tipo de liderazgo, dirigir equivale a impulsar el compromiso con una misión y desarrollar a los colaboradores para que éstos puedan asumir la misión como verdaderos líderes. No se trata de que tenga unas cualidades excepcionales o un particular carisma personal. Este tipo de liderazgo está directamente relacionado con una misión y unos valores que van más allá de la propia persona del líder.

Ideas principales:

Cuando hablamos de Liderazgo transaccional podemos decir que es un liderazgo está definido por una relación de influencias económicas. El líder transaccional se apoya en los premios y castigos para motivar a sus subordinados. Es un líder que mira con detalle el corto plazo, y que maneja los procesos y los recursos de manera eficiente. De hecho, su capacidad de influencia coincide con su capacidad de ofrecer o retirar incentivos. Establece reglas de juego claras y objetivos bien diseñados. El líder transaccional es, por tanto, un buen gestor. Los buenos líderes transaccionales suelen ser buenos negociadores, autoritarios e incluso agresivos, obtienen el máximo fruto de la relación de influencia económica que han creado.

Liderazgo transformador es el liderazgo definido por una relación de influencia profesional. El reto supone, el aprendizaje que conlleva y el atractivo que presenta. Este tipo de liderazgo es más profunda que la transaccional puesto que ésta no se basa sólo en premios y castigos, sino también en el ofrecimiento de un trabajo atractivo en el que los colaboradores aprendan y se comprometan. El líder transformador es típicamente inconformista, visionario y carismático, y replantea de forma continua tanto el modo de hacer las cosas en la empresa como las propias aspiraciones e ideales de los seguidores. Es un líder con gran capacidad de comunicación: que arrastra, convence, y tiene una gran confianza en sí mismo y en su visión. Sin embargo, aunque en determinados contextos este liderazgo pueda ser efectivo, dificulta enormemente el desarrollo de nuevos líderes a lo largo de la organización y, además, es un freno para la captación, desarrollo y retención del talento de liderazgo. Esto se debe a que, si los colaboradores que presentan un alto potencial no consiguen subir a la cúspide en un plazo relativamente corto de tiempo, suelen verse forzados a buscar alternativas para poder desarrollar su liderazgo en otros ámbitos u organizaciones. Este tipo de liderazgo transformador se suele llamar “narcisista”. El peligro del líder narcisista es que tiende a ser manipulador, si con ello consigue persuadir a los colaboradores para que hagan lo que él quiere. Este lado oscuro del líder transformador ha llevado a distinguir entre el liderazgo verdaderamente transformador.Esta distinción es un poco forzada y muestra

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