Grandes Aprendizajes

DE LOS HABITOS DE ESTUDIO AL APRENDIZAJE ESTRATEGICO

Antes de abordar y definir el tema central del capítulo vale la pena hacer un breve recorrido histórico sobre sus antecedentes más próximos (Hernández, 2004 y 2006).

Un antecedente inicial es el enfoque de los “hábitos de estudio” que se recomendaba enseñar a los estudiantes, para que estos mejoraran sus conductas de aprendizaje o su capacidad para mejorar. Los hábitos de estudio se conceptualizan como procedimientos rígidos y tiene una perspectiva limitada, porque presupone que dichos hábitos funcionan adecuadamente por su propia naturaleza (la técnica por la técnica misma) independientemente de las tareas, contenidos y alumnos que las apliquen. Su grado de éxito en consecuencia es limitado, como lo ha señalado Mayer (1999).

Aparecieron en los sesenta conceptos tales como “planes” o “estrategias” que pronto fueron rescatados para el campo educativo. De estos conceptos llamó la atención que incluían dos ideas centrales: la flexibilidad y el uso heurístico.

Otro antecedente relevante de inicios de la década de los setenta fueron los estudios sobre los niveles de procesamiento, que surgieron para explicar los enfoques de una huella más duradera en la memoria permanente (la memoria a largo plazo o MLP); será más fácil de ser recordado, y quizá comprendido, por lo contrario, dicho insumo será menos retenido en la MLP menos recordado o apto para usarlo en situaciones posteriores, si es objeto de procesamiento superficial centrado en sus características físicas y poco relevantes ( Hernández 1988).Se antepuso la innovadora idea del concepto de estrategia cognitiva como auténticos planes móviles de empleo flexible , que permiten demostrar inteligencia cuando se utiliza creativamente al solucionar problemas.

Por un lado se avanzó en dar un matiz más cognitivo al concepto de “técnicas”, proponiendo en su lugar el de “estrategias” que tiene una connotación más heurística. Prolongación más elaborado de esta perspectiva se encuentra en los programas de enseñar a pensar, en este momento de la “educabilidad cognitiva” conformó un auténtico boom, y la tesis principal de tras de los distintos programas propugnaba por el aprendizaje de habilidades de estrategias de pensamiento y razonamiento de tipo general, presumiendo que dichas destrezas eran los elementos centrales de la inteligencia.

Es decir de acuerdo con el enfoque de estos programas es posible enseñar a pensar o a razonar eficazmente a los alumnos sin importar qué temática se razona o se piensa.

Poco después se desarrollaron cuatro cambios sustanciales que nos permiten entender el aprendizaje estratégico en la concepción predominante actual (Pozo, Monereo y Castello, 2001). Un primer cambio vino a nuestro parecer, de las investigaciones en la idea (línea de expertos y novatos).

Así pudo demostrarse que muchas de las estrategias guardaban una relación estrecha con ciertos dominios de conocimiento y que sólo podían funcionar adecuadamente donde fueron aprendidas.

El segundo cambio significativo que aunque ya había venido desarrollándose desde años atrás provino de la incorporación de referentes teóricos como la meta cognición y el auto regularización. Así las estrategias comenzaron a entenderse como controladas por un conocimiento meta cognitivo condicional y reflexivo.

Llamo mucho la atención que estas estrategias auto reguladoras de amplio espectro o de alto nivel (por ejemplo: la planificación, el auto supervisión, en distintos dominios del aprendizaje cuando se solucionan los problemas.

Un tercer cambio de vio al reconocimiento del importante papel que demostraron los aspectos motivacionales y contextuales, en la actividad estratégica.

Un cuarto cambio relevante surgió del influjo de las posturas socioculturales.

1 procedimiento que se implica en forma situada (no descontextualizada) lo cual implica tomar en cuenta condiciones reales, metas establecidas y recursos internos y externos disponibles.

2 Auténticos instrumentos que ayudan a mediatizar el encuentro con la información nueva para lograr mejores procesos de construcción de conocimiento.

3 Recursos que se aprenden en la interacción con los otros según un proceso de traspaso de heterorregulacion (Pozo, Monereo y Castello 2001).

En primer lugar puede decidirse que aprender a aprender es una capacidad o competencia global que involucra a distintos ámbitos de actividad psicológica no solo cognitivos y meta cognitivos, como continuamente se ha mencionado.

En la que se refiere la dimensión cognitiva, esta capacidad implica el desarrollo de las habilidades para autorregular el aprendizaje que se despliega y reflexionar sobre cómo ocurren al tiempo que el aprendiz toma conciencia de sí mismo como ente que aprende.

Por último, respecto a la dimensión social aprender a aprender es una competencia que simplemente no puede desarrollarse si no es dentro de contextos de la interacción y mediación social y además implica el desarrollo de habilidades para interactuar con los otros sociales, personas profesores y compañeros.

La aproximación a los temas se hará desde una perspectiva más cognitiva del aprender a aprender (no obstante se trataran de hacer importantes señalamientos sobre los factores motivacional, afectivo y social cuando así se considere pertinente), esto no quiere decir que abandonaremos a nuestra conceptualización apenas expuesta.

¿QUÉ SON LAS ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE?

Muchas y variadas han sido las definiciones que se han propuesto para el concepto de estrategias de aprendizaje (Monereo, 1990 y 2001; Hernández, 2006; Muriá, 1994; Nisbet y Schucksmith, 1987). A nuestro entender poseen las siguientes características:

 Son procedimientos flexibles que pueden incluir técnicas u operaciones específicas.

 Su uso implica que el aprendiz tome decisiones y las seleccione de forma inteligente de entre un conjunto de alternativas posibles, dependiendo de las tareas cognitivas que se le planteen, de la complejidad del contenido, o de la situación académica en la que se ubica y de su autoconocimiento como aprendiz.

 Su empleo debe realizarse en forma flexible y adaptativa en función de condiciones y contextos.

 Su aplicación es intencionada, consciente y controlada. Las estrategias requieren de la aplicación de conocimientos metacognitivos, de lo contrario se confundirían con simples técnicas para aprender.

 El uso de estrategias está influido por factores motivacionales-afectivos de índole interna

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