La Gestión Del Recurso Humano, Una Obra De Arte

La Gestión del Recurso Humano, una Obra de Arte

La mayoría de las veces, una historia narrada por medio de un lenguaje artístico (novela, película, pintura, etc.) puede reflejar lo que cientos de páginas de un texto especializado desean entregar o comunicar. El lenguaje artístico y la forma de entregar una idea o concepto, generalmente encubierto, jugando con los sentidos del observador, es inmensamente inspirador y logra movilizar no sólo el cuerpo, sino que principalmente el espíritu.

Esto ocurre con la película Invictus, del director Clint Eastwood, protagonizada por Morgan Freeman y Matt Damon. La historia del recién electo presidente Nelson Mandela, su desafío por lograr la unidad de una nación dividida y con profundos rencores, se convierte en un ejemplo de creación de valor para la gestión de su incipiente gobierno a través de la gestión de RRHH.

Antes de analizar cómo Invictus refleja una gestión exitosa de los RRHH, recordemos algunos conceptos básicos.

Actualmente, podemos entender como gestión de Recursos Humanos al proceso de dirección transversal de una empresa, dirigido a potenciar y desarrollar el capital humano como una de las principales ventajas competitivas. Se ha pasado desde una visión funcional (casi mecanicista) de las actividades de RRHH, hacia una perspectiva sistémica (centrado en la calidad de las relaciones) y estratégica de creación de valor a través de las personas. Es decir, generar soluciones para incrementar los ingresos, reducir costos e incrementar la rentabilidad, reforzar la velocidad, flexibilidad y agilidad organizacional y contribuir a la lealtad y retención de los clientes.

También la creación de valor implica desarrollar capacidades y competencias en la propia función de los RRHH, tales como conocer en profundidad el negocio, poseer capacidad técnica y conocimientos tecnológicos y generar redes, entre otras. Es importante que los profesionales de RRHH desarrollen sus competencias centrales, o sea, poseer un alto grado de experticia en sus propias prácticas y así generar valor para la organización.

Desde una mirada más concreta la creación de valor se puede llevar a cabo a través de distintas herramientas o prácticas que faciliten la implementación de efectivos sistemas de gestión de desempeño que permitan medir y gestionar el rendimiento de las personas o bien, desarrollar políticas de incentivos que atraigan y retengan el talento en la empresa.

Los beneficios de las prácticas mencionadas permiten pasar de un enfoque tradicional centrado en las tareas, a un enfoque centrado en el desempeño esperado. En este sentido, un sistema integral de gestión de RRHH por competencias (donde interesa qué se debe lograr y cómo hacerlo), coloca su foco de atención en los comportamientos y capacidades personales requeridas por la organización para lograr sus objetivos estratégicos, favoreciendo el desarrollo del potencial de cada uno de sus integrantes.

Por otra parte, las funciones del Departamento de Recursos Humanos, Departamento esencialmente de servicio y asesoría, variarán dependiendo del tipo de organización al que éste pertenezca. Sin embargo hay algunas funciones básicas que se manifiestan:

Describir responsabilidades, evaluar el

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