Las Tics En La Educación

Trabajo de investigación

Sociedad de la Información o Sociedad del conocimiento.

Abordaje desde la perspectiva epistemológica de nuevos entornos de aprendizaje de los nuevas herramientas y su aplicación a la educación.

El presente trabajo abordará la temática de las Tics, en primer lugar su definición, luego el porqué de la existencia de defensores y ofensores, se tratará la importancia de ellas en la educación para la adquisición de nuevos aprendizajes que se transformarán después en conocimiento, las ventajas y desventajas que estas traen aparejadas.

Las Tecnologías de la Información y la Comunicación, también conocidas como TIC, son el conjunto de tecnologías desarrolladas para gestionar información y enviarla de un lugar a otro. Abarcan un abanico de soluciones muy amplio. Incluyen las tecnologías para almacenar información y recuperarla después, enviar y recibir información de un sitio a otro, o procesar información para poder calcular resultados y elaborar informes

Es la suma o acumulación de herramientas, soportes y canales para realizar el abordaje y alcanzar el acceso a la información; para realizar, inspeccionar, guardar, propagar contenidos digitalizados. Las Tics constituyen los medios de cualquier modo de aplicaciones educativas; o sea que son instrumentos, herramientas de elaboración o conformación que facilitan el aprendizaje, desarrollo de destrezas y diferentes modos de aprender, lo que tiene que ver con el nivel o ritmo de aprendizaje de cada individuo ya que no todos alcanzan el aprendizaje transformándolo en conocimiento del mismo modo y en la misma línea.

En los últimos tiempos han sufrido cambios importantes en el relacionamiento con los demás transformándose, nuestra sociedad, en una sociedad de la información afectada por avances científicos; respaldada por el uso de las TICS provocando variaciones en todos y cada uno de los ámbitos de la actividad humana.

Hoy podemos decir que las TICS son uno de los pilares básicos de la sociedad y por ello es imprescindible que todos los ciudadanos posean una educación que considere esta realidad.

En lo referido a las posibilidades de la incorporación de las Tics en el ámbito escolar hay tanto promotores como ofensores ya que la creación de una herramienta nueva para un trabajo antiguo genera siempre una oposición entre quienes se fascinan con las ventajas de lo nuevo y los que prefieren la rutina de lo conocido.

Hay quienes están ciegamente entusiasmados con los computadores y las actuales tecnologías de la información que creen ver en ellos el nuevo remedio universal. Pero también hay fanatismo en el extremo opuesto: el de los que están tan asustados por los peligros reales e imaginarios que perciben o creen percibir en estas nuevas herramientas, que promueven su total repudio. Hay fanáticos tanto a favor como en contra.

Una proporción importante de directivos, profesores no reconocen valor alguno en los nuevos medios y simplemente los rechazan. Sin duda un inicio de preocupación es el hecho de que Internet es la red de computadores que abarca todo el planeta no solo sirve a fines honestos sino también a fines perversos (existen ventajas y desventajas)

Es evidente que algunas aplicaciones de los computadores y de las nuevas tecnologías de la comunicación han desbordado ciertos cauces. En Internet conviven las universidades y los traficantes de niños, los vendedores de pornografía y los puritanos, los empresarios y los ladrones, los clérigos y los proxenetas, las instituciones del estado y los delincuentes.

Los computadores han sido empleados para generar programas tan útiles como un procesador de textos y tan incomprensiblemente nefastos como un virus, que puede destruir en un segundo el trabajo de años.

Hoy en día, mediante estas nuevas tecnologías (las Tics) cualquier estudiante demora 15 minutos y produce un trabajo de excelente calidad gráfica, mientras que mediante la escritura manual podría tomar varios días. Hay profesores que les prohíben porque les resulta demasiado fácil. Se piensa que la tarea valiosa es la que demanda considerable esfuerzo y que servirse de la tecnología es hacer trampa. Este es un caso en el que la tecnología revela la inmensa irracionalidad de algo que hasta ahora tolerábamos sin hacernos problemas. Copiar información de un lado a otro de una máquina o manualmente no era, no es, ni será, un auténtico trabajo de investigación. Quizás sea una tarea necesaria al momento de iniciarla; pero si la información seleccionada no es analizada, comparada, sopesada, sintetizada, enjuiciada críticamente, aplicada creativamente, etc., es inútil.

Las nuevas tecnologías permiten acceder rápidamente a todo tipo de información actualizada. Buscar información ya no es desafío. Pero muchas veces se presenta una importante perdida de tiempo en la realización de la búsqueda y selección por eso el docente debe actuar como guía y para ello debe estar formado en estos aspectos (debe tener una formación permanente).

El hecho de que las virtudes de los computadores y sus aplicaciones particularmente Internet están revelando la insensatez de pedir a los estudiantes tareas que suelen reducirse a un vulgar copiar y repetir información, está obligando a los docentes a centrar la mirada en las tareas realmente productivas y creativas. Y por lo mismo, están empezando a exigir a sus alumnos quehaceres que impliquen una verdadera aplicación de juicio crítico. Obviamente, estas tareas son un mejor estímulo al desarrollo del lenguaje, el pensamiento y por lo tanto el conocimiento.

También hay profesores que reniegan de la capacidad que tienen todos los procesadores de textos para señalar errores ortográficos y sugerir alternativas para enmendarlos.

Yo pienso que a un niño que aprende o a un joven que está perfeccionando sus habilidades de lecto-escritura, esa herramienta le ofrece una excelente oportunidad de tomar conciencia de sus errores más frecuentes, lo cual es indispensable para que pueda predisponerse a evitarlos en el futuro. Si eso no es un estímulo al desarrollo del lenguaje entonces ¿qué es?

Los procesadores de textos, ofrecen también la posibilidad de encontrar rápidamente una serie de sinónimos y antónimos de cualquier término que se esté usando. Esta ayuda constituye un buen medio para enriquecer el vocabulario. Considero incomprensible que profesores no aprueben la aplicación de funciones computacionales que apoyan el perfeccionamiento de la escritura y esto se debe a que no existe un compromiso docente que implica una actualización permanente de los medios necesarios para el aprendizaje.

Hay quienes no se contentan con aparatos que les permitan realizar el trabajo de manera más fácil, rápida y eficiente. Sueñan con un medio tecnológico que los libere completamente del trabajo. Y ciertamente algunas labores mecánicas pueden ser realizadas totalmente por una máquina; pero las tareas de orden superior, como las que se refieren a la educación de las nuevas generaciones y a la estimulación del desarrollo intelectual y espiritual de personas, no puede ni podrían quedar completamente en mano de máquinas. Especialmente en este ámbito, el desarrollo tecnológico (las tics) no debe ampararse como una invitación a la pereza, sino como la oportunidad de centrar nuestros esfuerzos en aquellas tareas verdaderamente importantes, aquellas que exigen el despliegue de lo mejor de nosotros. El encuentro educativo, la relación pedagógica, es fundamentalmente un encuentro de personas que se reconocen como tales y que se inspiran mutuamente cada cual según su rol y sus aptitudes personales.

En este encuentro, el recurso fundamental del docente es la profundidad y armonía de su propio desarrollo intelectual y espiritual, su respeto irrestricto a la dignidad de las personas sean niños o adultos y sus habilidades comunicacionales. Los nuevos recursos tecnológicos, usados sin la expectativa cavernícola de llegar prescindir de la voluntad, de la reflexión personal y del pensamiento crítico, no pueden ser causa de deshumanización, sino todo lo contrario.

Me parece que en educación, la introducción de las TIC está revelando la cara grotesca deshumanizada de ciertas rutinas que hasta ahora no nos llamaban especialmente la atención. Por ejemplo, algunos profesores que prohíben a sus alumnos hacer sus trabajos en el computador para evitar que usando los comandos “copiar y pegar” de cualquier procesador de textos se limiten simplemente a duplicar y yuxtaponer información digitalizada que luego imprimen y presentan como trabajo personal. Pero también se en otros tiempos cuando se pedía trabajos a los alumnos también eran una copia de libros a diferencia que se hacia de modo manuscrito.

Muchos educadores temen que esa escritura abreviada típica del chat perjudique el desarrollo de la lecto-escritura, especialmente en los preadolescentes. Es muy común escuchar a profesores de la espantosa consonantización de la escritura que está destruyendo el lenguaje de nuestros estudiantes. Pero creo que no hay razón para alarmarse ya que cada nueva generación crea una jerga juvenil propia que violenta algunos cánones aceptados del habla y escandaliza a los mayores. Y nuestra responsabilidad de educadores nos exige enseñarles a distinguir la oportunidad en que esa jerga pueda usarse en cuanto lenguaje informal y cuando su uso se transforma en una insolencia Es decir, no nos proponemos impedir el espontáneo desarrollo de esa jerga transitoria, sino de asegurar el espacio en el que la mucho más permanente

...