Pedagogia Del Amor

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA EXPERIMENTAL LIBERTADOR

INSTITUTO DE MEJORAMIENTO PROFESIONAL DEL MAGISTERIO

NUCLEO ACADEMICO TACHIRA

PEDAGOGIA DEL AMOR

(ENSAYO)

Autora: Fuentes Luz

C.I 16.124.028

Prof.: Noraima G.

II Semestre.

SAN CRISTOBAL, JULIO DEL 2013

El eje fundamental que se centra la pedagogía del amor es, obviamente, el afecto ternura y vocación, porque es él constituye uno de los pilares básicos en los que ha de sustentarse la educación, ya que el amor genera un tendencia empático que provoca en el educador la actitud adecuada para comprender los sentimientos del educando y, en cierto modo, prever su comportamiento y su aprendizaje. Es necesario, pues, reflexionar sobre el tema y analizar sus implicaciones, exigencias o manifestaciones en el proceso educativo.

Dentro de este orden de ideas, teniendo claro esta perspectiva se es más fácil reconocer y aceptar al educando tal cual es y no como el docente quisiera que fuera, porque sólo conociendo y aceptando sus valores y defectos, aptitudes y sus carencias se tendrá claro cuál es el paso a seguir para formar seres capaces y pensantes sin prejuicios o limitaciones a nivel académico y social potenciando y desarrollando los primeros años escolares y a su vez conseguir futuros profesionales.

En tal sentido, cada persona tiene diferentes cualidades y virtudes de igual forma defectos, que vienen consigo mismo fácilmente moldeables consiguientes moldeables porque se dice esto; cuando se acepte cada uno así como es lograra conseguir el éxito de lo que se proponga, La aceptación constituye pues, el punto de partida del proceso educativo. Los educadores deben de reconocer cada uno de los logros del educando ya que todos necesitan un estimulo para continuar y seguir adelante se requiere de atención y disponibilidad temporal para escuchar y comprender las dificultades y logros del mismo.

De este modo, se consigue que el escolar valore mejor y forme una opinión más favorable del docente y al mismo tiempo, se le enseña a reconocer y admitir sus propias equivocaciones. Sin miedo a frustrarse, Es por ello necesario meditar y tomar las decisiones con serenidad y ejecutarlas con firmeza. La educación tiene como objetivo fundamental el desarrollo integral de la personalidad del educando y por ello, no reviste un carácter egoísta, sino al contrario es una transmisora de conocimientos, al mismo tiempo es una dimensión informativa e instructiva, que asume el sentido de la responsabilidad.

Por consiguiente la enseñanza del amor radica en la efectividad del proceso educativo depende en gran medida, del grado de confianza del educando y de la credibilidad que le merezca el educador, y esto asume el gran papel del maestro en la educación y su innegable influencia sobre el escolar. Ya que este tiene como una de sus funciones principales el integrar personas equitativas y justas, capases de expresar sus emociones sentimientos positivos extensibles a su familia, con principios de convivencia; respeto, tolerancia, aceptación, comprensión, libertad y amor.

De igual forma, contribuimos a que los alumnos se sientan considerados, reconocidos y estimados y se lograría

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