Qué Significa Dialogar Con Los Alumnos En El Aula

¿QUÉ SIGNIFICA DIALOGAR CON LOS ALUMNOS EN EL AULA?

La comunicación en el salón de clases es uno de los principales elementos con los que debe contar un maestro, unido a esto, distintas habilidades: de presentación, de interrogación, de discusión, de control grupal, entre otras. Ya que de este modo, las explicaciones, comentarios, preguntas, dudas, aportaciones, etc. Que puedan tener los alumnos, se verán reducidas de manera considerable o, de no ser así, serán resueltas de la manera más ventajosa tanto para su entendimiento como para el control de la clase.

El diálogo es el camino racional hacia el conocimiento y la forma más elevada de enseñanza. Son muchas las cosas que debemos tomar en cuenta para tener un buen diálogo en el aula, de acuerdo a lo anterior, la comunicación es la clave para el establecimiento de la relación maestro-alumno. En la medida en la que somos capaces de acercarnos al alumno y aprender a observar sus dificultades de aprendizaje es más fácil considerar su progreso. Es necesario aprender a conocer a cada niño.

Como docentes debemos crear un ambiente favorable para los niños, donde se sientan con confianza para expresar sus dudas, sus opiniones, sus intereses. Esto solo podemos lograrlo manteniendo una actitud favorable de acuerdo a las necesidades de cada niño, demostrándoles que uno se preocupa por ellos, y que confía en su capacidad de aprender.

Es probable que la voz sea la forma más frecuente de comunicación en el aula, por esto, debemos tener cuidado en que el lenguaje de los profesores puede llegar a ser una barrera para el aprendizaje de los alumnos, esto se debe, en parte a que a veces se usa una terminología de lenguaje que no resulta familiar a los niños. Pues si esto sucede, el niño no entenderá el tema o le será difícil la participación por miedo a equivocarse.

Aquí es importante también los gestos que hagamos, pues la comunicación no verbal también emite mensajes, la forma en que nos dirijamos hacia ellos, los movimientos que realicemos, los ademanes que utilicemos al momento de dar una clase influyen en el concepto que los niños puedan crearse de nosotros como maestros y en la confianza que podamos ganar de ellos.

Al momento de socializar lo aprendido puedo afirmar que es mejor diseñar preguntas que lleven a los alumnos a reflexionar, a pensar, a razonar; preguntas en las que se propicie la discusión, la riqueza de opiniones, más que preguntas con una respuesta constante como si o no.

El diálogo en el aula debe ser bidireccional; es decir, que debe existir un intercambio de ideas entre alumnos y profesor, donde los alumnos tomen la palabra cuando crean que sea necesario, siempre y cuando se establezca un orden. No únicamente querer que los alumnos escuchen los conocimientos que queremos transmitir , sino escucharlos a ellos también.

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