Seminario Aulls

La idea Principal:

Los autores Cunningham y Moore (1990) identifican hasta nueve respuestas o tipos de ideas principales, las cuales pueden agruparse en: esencia, interpretación, palabra clave, resumen selectivo, tópico, tema, asunto, frase temática, tesis, etc. Considerando que aunque las respuestas son diferentes, todas aportan información sobre el texto.

Sin embargo, Carriedo y Alonso recomiendan que se parta de una definición clara de lo que constituye una idea principal. Para luego enseñar a los alumnos qué es y cómo llegar.

En la obra clásica de Aulls, se distingue el tema de la idea principal, para él, tema es aquella que indica sobre lo que trata el texto (¿De qué trata?). Por su parte la idea principal informa del enunciado más importante que se utiliza para explicar el tema (¿Cuál es la idea más importante?). Dónde la autora infiere que la distinción entre ambas resulta útil porque permite clasificar algo más que solo el concepto.

En concreto, Aulls propone enseñar el tema en narraciones y exposiciones sencillas, mientras que la idea principal se puede trabajar en exposiciones.

La autora opina que todo lo que se diga o escriba sobre la idea principal debe tomar en consideración este hecho.

Cuando se habla de idea principal siempre se recurre al texto, sin tener en cuenta u omitiendo aquellos conocimientos que posee el lector y que entiende por idea principal. Para eso es necesario hacer una distinción entre relevancia textual y relevancia contextual. La primera hace referencia a la importancia que se le asigna a los contenidos para marcar lo que el autor considera relevante  la segunda refiere a la importancia que el lector le atribuye a determinados pasajes o ideas en un texto.

En función de ello Winograd y Bride resumen las diferencias individuales y evolutivas en la comprensión de la información:

• Los lectores jóvenes tienen problemas para explicar lo importante de un texto.
• Los lectores jóvenes no perciben del mismo las señales de relevancia del autor por si falta de conocimiento del mundo para complicar la tarea de juzgar la importancias de relevancia.

La enseñanza de la idea principal en el aulas:

La idea principal resulta esencial para que un lector pueda aprender y realizar actividades asociadas con ella,

Un segundo aspecto, es que si no se enseña no es porque no se quiera enseñar si no porque aún no conocemos mucho acerca de la lectura y su enseñanza y si se conoce es difícil explicarlo en la clase.

Los programas para enseñar tal tema parten del principio de que es necesario enseñar qué es y para qué sirve. Los alumnos necesitan saber qué es la idea principal y para qué les va a servir. En síntesis, el lector accede a las ideas principales de un texto aplicando una serie de reglas (Brown y Day) reglas de omisión o supresión y reglas de selección ( identifican la idea en el texto) y de elaboración ( se construye o genera la idea) .

Sin embargo lo anterior no es suficiente para que aprendan a utilizarlas. Dicho aprendizaje requiere que los alumnos vean como proceden otras personas, por ejemplo el profesor. A través de pequeñas pasos:

• Explicar en qué consiste la idea principal
• Señalar el tema
• A medida que leen informar sobre lo que consideran importante y porqué.

El resumen:

Esta estrechamente relacionado con las estrategias para establecer el tema de un texto.

Para clarificar más el tema empecemos con las macroestructura de Van Dijk quien habla sobre el tema:

• La macroestructura proporciona una idea global del significado del texto, el tema de un texto es la macroestructura o una parte de ella que permite contestar a la pregunta ¿de qué trata el texto?      Estás permiten elaborar el resumen, a su vez que permiten acceder asimismo a la macroestructura del texto, es decir la representación global del texto.

Van Dijk considera que la comprensión del texto: es una estructura jerárquica en cuyo nivel superior se encontraría en una proposición que daría cuenta del tema del texto y el nivel inferior está formado por proposiciones relativas a los detalles.

Establece tres reglas que los lectores utilizan para resumir el texto:

• Omisión: se omite aquella información que resulta secundaria o poco relevante.

Por ejemplo: Laura bajó a la playa y tendió su toalla amarilla en la arena. Entró al agua y se baño.

• Generalización: se abstrae de u conjunto de conceptos uno de nivel superior capaz de englobarlos.

Por ejemplo: entró en la cocina y vio encima de la mesa, cerezas, fresas, manzanas, melocotones.

• Construcción o integración: se elabora una información que sustituye a la anterior, que no suele estar en el texto.

Por ejemplo: por fin llegó el último día de julio. Ordenó los papeles del despacho y comprobó que descontaba las luces. Ocupó el resto de la tarde en preparar las maletas y cerrar la casa. Al atardecer, subió al coche, y condujo durante un par de horas hasta la Costa. Al día siguiente, tomó el primer baño de mar antes de desayunar.

Se marchó de vacaciones. Hemos creado una proposición que integra el significado que tiene todas las anteriores.

Es importante entender que leemos y elaboramos el resumen de acuerdo a nuestros conocimientos y lo que nos hace interpretar el texto.  

Como podemos comprobar, resumir un texto requiere poder tratar la información de manera que pueda omitirse lo que es poco importante. Además de mantener los lazos con el texto del que ha sido creado, es decir, debe mantener el  significado.

Las enseñanza del  resumen en el aula:

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