Planeación y Gestión Gubernamental

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Licenciatura en

Contaduría y Finanzas Públicas

Módulo 3

Planeación y Gestión Gubernamental

Unidad 3

Planeación y Gestión Gubernamental

Actividad 3

Ensayo de Planeación y Gestión Gubernamental

Docente

Gregorio Pérez Orozco

Nombre

Paula Salazar Vázquez

Matricula

ES172009042

11 de junio 2018

Introducción

En el presente trabajo se pretende mostrar el impacto de los programas de desarrollo incluidos en el Plan Nacional de Desarrollo 2013 – 2018 así como el resultado del esfuerzo de una Administración Municipal por lograr sacar de un estancamiento económico, turístico, social y político a la Ciudad de Madero.

Fue una actitud proactiva por parte de la Administración Pública entrante en el año 2016 del empresario Andrés Zorrilla Moreno que, en conjunto con un equipo de trabajo, lograron visualizar las necesidades de una población necesitada de una reorganización propia y reingeniería de procesos dando como resultado el cumplimiento de los objetivos plantados

        Ha habido avances hasta hoy en día en materia de turismo, ocupación hotelera, incremento en la economía, propaganda turística, atracción de turistas nacionales y extranjeros a la playa de Miramar, lo cual magnifica la sapiencia de un empresario con miras e ideales como tal, para dirigir una Administración a su máximo desarrollo, visualizándose los resultados a corto plazo, aunque desgraciadamente esa Administración dure muy poco tiempo.

Justificación

El propósito de esta actividad es conocer la forma en que la Administración Pública de una ciudad logra aplicar las políticas públicas de turismo de manera óptima, eficaz y eficiente obteniendo radicales y sorprendentes.

Aunado a eso, se comprenden los problemas que presentan las políticas públicas al ser aceptadas en la agenda pública e implementadas para su desarrollo.

Además, se muestra las metas y objetivos de Turismo alineadas al PND 2013-2018, a fin de conocer las estrategias para eficiente los programas relacionado con el Turismo en Ciudad Madero.

Finalmente identificar la relación que existe entre los programas que el gobierno implementa, los planes de desarrollo y las políticas públicas, con el fin de corroborar si en realidad cumplen sus objetivos y metas.

Planeación y Gestión Gubernamental

El Impacto de los Programas Sociales

Los programas sociales son indicadores de un buen gobierno, dan personalidad a la Administración Pública ya que la población a veces logra identificar determinado programa por su nombre, lo cual hace ver a la plena vista el atractivo funcionamiento que está llevando a cabo el gobierno ante el pueblo.

No obstante, es importante evaluar y determinar si los programas sociales cumplen el fin para el cual fueron diseñados, por lo que debe llevar a cabo un proceso de monitoreo continuo a través del control interno para minimizar los posibles problemas o riesgos que pudiera contraer la dependencia gubernamental que desarrollara dichos programas sociales.

Por lo que el control interno en cualquier instituciones de gobierno proporciona seguridad razonable para el logro de los objetivos institucionales y la protección de los recursos públicos; cumple con el ordenamiento jurídico, técnico y administrativo, promover eficiencia y eficacia de las operaciones de la entidad y garantizar la confiabilidad y oportunidad de la información, así como la adopción de medidas oportunas para corregir las deficiencias de control (Gamboa Poveda, Puente Tituaña, & Vera Franco, 2016).

Caso o problema público:  escaso o nulo turismo en Ciudad Madero

Año con año desde hace muchísimos años no cabía ni un alfiler en la playa, las filas de autos eran larguísimas, había que armarse de paciencia para entrar y encontrar un sitio dónde estacionarse y ubicarse para disfrutar del paisaje, el sol, la música, los shows, etc.

Las imágenes áreas que tomaban mostraban a los autos y a la gente como hormiguitas, todos atiborrados para poder entrar, pero la gente feliz de amar su fiesta en la playa. Así eran los días en Semana Santa en Playa Miramar, hasta el 2008, el último año bueno para el turismo, en el destino más importante de Tamaulipas.

El 01 de mayo del 2009, el Presidente de la Republica en aquel entonces era Felipe Calderón Hinojosa, el cual tomo la pésima y petrificante idea de aplicar la medida tan tajante como el toque de queda en toda la República mexicana, mecanismo empleado para según evitar un contagio masivo de virus AH1N1, situación que dejo inmovilizados a miles de ciudadanos de sus hogares, trabajos y lugares de recreación a fin de imposibilitarlos para desarrollar sus propias actividades rutinarias, laborales, personales y sociales.

El ex presidente, Felipe Calderón, decretó lo que podría considerarse un toque de queda entre el 1 y el 5 de mayo como consecuencia de la epidemia de gripe porcina que asola el país, en particular la capital federal. «No hay lugar más seguro para evitar contagiarte del virus de la influenza porcina que tu propia casa», aseguró Calderón en un mensaje televisivo en hora de máxima audiencia (Toque de queda en México, 2009).

Esta exagerada y pésima decisión tomada por aquel Prescindente ante cierta contingencia, tuvo desastrosas consecuencias en todos los ámbitos, en cada estado y en cada administración pública de los tres niveles de Gobierno; de lo cual se puede mencionar que repercutió notoriamente más en el sector económico, social y turístico.

Esta mala decisión fue el inicio del declive económico que pudo afectar la económica y turismo de Ciudad Madero. Posteriormente siguió tomando pésimas decisiones el Sr. Calderón, como la manera según él, de combatir la narcoviolencia, lo cual desemboco en un sin número de balaceras que se fueron suscitando en el transcurso de su mandato.

Hubo un atentado con disparos de arma de fuego y el estallido de dos granadas se registró minutos antes del cambio de turno en la corporación; otras dos granadas fueron localizadas sin estallar; los hechos violentos originaron caos y crisis nerviosas entre los estudiantes de secundaria y preparatoria que estaban cerca del lugar, donde esperaban el transporte público en el Boulevard Adolfo López Mateos en Ciudad Madero, Tamaulipas (Vanguardia, 2010).

        Y el tiempo siguió pasando de la mano con los mismos problemas que genero el Sr. Calderón, pero aumentando en el volumen de civiles muertos a consecuencia de las malas decisiones llevadas a cabo por el ex presidente de ese sexenio.

Esto condujo a consecuencias alarmantes en Ciudad Madero, ya que la afluencia turística disminuyo considerablemente, al grado de no tener casi visitantes en las zonas playeras y por consecuencia en números rojos el ingreso a los planteles hoteleros.

Desde el 2009, el sector turístico se conserva a la baja, pese a las cifras oficiales. En el norte y en el sur del Estado la ocupación hotelera es mínima y las inversiones no llegan; la etapa crítica comenzó en 2009, pero el declive vino en 2010 y  2011, cuando las cifras de ocupación hotelera se cayeron, y los negocios empezaron a quedarse vacíos, hubo una combinación de factores determinantes para la caída en el turismo en el estado, el principal y el más fuerte fue la inseguridad, pero también coincidió con la  llegada de la influenza y la crisis económica mundial de las  hipotecas del 2007-2008 que terminaron de darle la estocada al turismo (Macias, 2015).

 Los ataques a los comercios, las balaceras en 2009 en plena temporada de vacaciones ahuyentaron al turismo, en ese año y en los dos siguientes, hubo ataques a agencias de autos que fueron rafagueadas, bares incendiados, y enfrentamientos a plena luz del día; incluso en 2010 hubo que cancelar la Feria de Tampico porque en pleno concierto de Jenny Rivera se armó la balacera y cerraron al no haber las condiciones de seguridad, fueron 

situaciones que dañaron mucho las expectativas de los hoteleros y restaurantes que esperaban la semana de abril para recuperarse de todo el año.

Esto provocó un estancamiento de la inversión privada en el turismo, ya que en 2010 se canceló la instalación de un hotel por la inseguridad. Y esto ha sido la constante, fue hasta el 2014 cuando se empezó a recuperar un poco la inversión turística, luego de 6 años de sequía, algunos hoteles que habían cerrado en el centro de Tampico reabrieron, y otros ampliaron el número de habitaciones. Pero de nuevos hoteles en playa Miramar no ha llegado ninguno desde hace más siete años; de acuerdo con datos de la SECTUR el número de cuartos de hotel en Tamaulipas disminuyó del 2008 al 2014, paso de 16 mil 952 habitaciones a 10 mil 955, una baja del 35% en la oferta de alojamiento (Macias, 2015).

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