ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Sistema Educativo Mexicano, Expresión De Violencia Contra Las Mujeres

hidalgo323127 de Febrero de 2013

3.131 Palabras (13 Páginas)528 Visitas

Página 1 de 13

El sistema educativo mexicano; expresión de violencia contra las mujeres

Rosa Eugenia Hidalgo Cabrera

Resumen:

Con este ensayo se pretende mostrar la violencia que sufrimos las mujeres dentro de la sociedad y después en la educación en cuanto a la desigualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, ya que el sistema educativo mexicano ha estado impregnado de la cultura patriarcal que ha marcado grandes diferencias por las estructuras cotidianas, provocando la inequidad y un atraso en el desarrollo económico y social de nuestro país, dando con ello la pauta para generar la violencia de las mujeres y dejándolas en un estado de indefensión; no obstante los instrumentos jurídicos internacionales y nacionales que han salvaguardado los derechos humanos de las mujeres frente a los hombres y que han abierto los horizontes para caminar sobre un rumbo nuevo, mas sin embargo los programas educativos no han contribuido mucho para alcanzar esa igualdad de oportunidades en el plano social ya que se ha seguido fomentado dentro del currículum oculto contenidos sexistas en los textos escolares, así como en los materiales didácticos que reproducen los roles y los estereotipos discriminatorios hacia las mujeres, por esta razón es necesario hacer un cambio en relación a los contenidos y prácticas de enseñanza.

Palabras claves: sistema educativo, violencia contra las mujeres, violencia de género, estereotipos, roles, derechos humanos de las mujeres

Resumen curricular de la autora:

Nombre: Rosa Eugenia Hidalgo Cabrera

Grado: Maestría en Ciencias de la Educación

Institución de adscripción: Instituto de Estudios Universitarios Campus Villahermosa

Líneas de interés: Violencia contra las mujeres, Derechos Humanos, Sistema Educativo Mexicano

Correo electrónico: eugenia0831@hotmail.com

1. Introducción

La violencia que afecta a las mujeres en el sistema educativo ya no se centra en el acceso al sistema, sino en la calidad y en lo que se enseña, lo que impide una igualdad real de oportunidades entre hombres y mujeres.

El problema que comienza a estar en la agenda pública del gobierno nacional ya no es el de cuántas mujeres estudian, sino el de cuál es la calidad de la educación y cuál el ambiente de estudio.

Los obstáculos con los que se encuentran las mujeres en el sistema educativo, más allá de la posibilidad de acceder o no a éste, son los estereotipos y roles de género presentes en los programas educativos, si bien ya no son tantas las diferencias formales en los programas educativos de hombres y de mujeres, los mecanismos de discriminación se relacionan con todo lo que se aprende dentro de la escuela.

Primeramente abordare las concepciones de violencia contra las mujeres y violencia de género, haciendo la diferenciación de ambas dentro del plano individual como en su construcción social.

De la misma forma hago una breve alusión a los roles y estereotipos que han marcado sin duda las diferencias entre mujeres y hombres mediante la cultura patriarcal a la que hemos estado sometidas a lo largo de la historia y que sin duda ha contribuido a esta enorme diferenciación.

Seguidamente refiero a los derechos humanos de las mujeres, destacando la importancia del tema para que las mujeres pudiéramos tener acceso a los mismos derechos que los hombres, a pesar de los instrumentos internacionales y nacionales con los que contamos todavía nos queda un largo camino de lucha mientras se sigan fomentando las creencias y costumbres los programas educativos y en las aulas.

Finalmente contextualizo la violencia hacia las mujeres como un obstáculo para la desigualdad de género que dentro de la construcción social a través de lo que debe ser a los hombre y para las mujeres en el ámbito educativo ha repercutido hacia una desigualdad de oportunidades, aun cuando las mujeres representan alrededor la mitad de la matricula escolar, todavía existe una marcada diferenciación en cuanto al tipo de enseñanza y a las diferencias que se hacen dentro de las aulas de clases en razón de género.

2. Violencia contra las mujeres sinónimo de violencia de género

Para hablar de la violencia contra las mujeres hay que dejar claro qué es violencia; entendiéndose como un comportamiento aprendido que tiene sus raíces en la cultura y en la forma en que ésta se va estructurando socialmente; la violencia contra las mujeres es todo acto agresivo hacia ellas por la simple condición de ser mujer, esta violencia es resultado de la histórica posición en un sistema patriarcal en donde se ha encontrado subordinada al hombre; tal subordinación ha posibilitado que los hombres dominen el espacio público y ejerzan también su poder en el privado.

La violencia que ejercen los hombres contra las mujeres tiene por objeto la sumisión que ha dado lugar a una situación de desigualdad que se mantiene por el uso de la fuerza y la violencia; entendiéndose por violencia contra la mujer “todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.

De esta forma la violencia de género son las formas con que se intenta perpetuar el sistema jerárquico impuesto por una cultura patriarcal; es decir una violencia estructural hacia las mujeres con la finalidad de subordinación al género masculino, las cuales se expresan por conductas y actitudes que enfatizan las diferencias tomando su apoyo en los estereotipos de género, es decir, una violencia basada en una construcción sociocultural; una serie de creencias, valores, sentimientos, conductas que la sociedad en su conjunto comparte y permite que se perpetúe (Díaz Marroquín, 2006).

Por ello la importancia de remarcar que la violencia de género no es el resultado de conductas enfermizas; sino una práctica aprendida, consciente y orientada, producto de una organización social estructurada sobre la base de la desigualdad y que se expresa en distintas formas, ámbitos y relaciones.

Ha sido definida como “el ejercicio del poder entre varones y mujeres y que perpetua la subordinación y desvalorización de lo femenino frente a lo masculino” (Rico Nieves, 1992). Ésta se caracteriza por responder al patriarcado como sistema simbólico que determina un conjunto de prácticas cotidianas concretas, que niegan los derechos de las mujeres y reproducen el desequilibrio y la inequidad entre los sexos.

La violencia contra las mujeres fue la denominación empleada por los movimientos de mujeres cuando se empezó a visualizar como un problema social y la violencia de género es un concepto que surge con la intención de resaltar que es una expresión estructural de las relaciones de poder entre mujeres y hombres.

3. Estereotipos y Roles de género: de lo que se cree a lo que se aprende

Es importante reconocer que las mujeres y los hombres no somos el resultado de nuestro sexo, sino de los procesos sociales que radican en la identidad de las personas y las condiciones en que estos procesos se reproducen, los cuales deben cambiar hacia la igualdad de oportunidades.

La asignación del género se produce desde que nacemos a través de nuestra familia, la escuela y en general en la sociedad, las cuales se van reforzando a lo largo del tiempo, una de las características de esta asignación es la que se realiza en función de roles y estereotipos sociales que encasillan las actividades de mujeres y hombres A las mujeres se les asignó la reproducción, el hogar, los cuidados de otras personas padres, madres, esposo e hijos, hijas y la vida privada, lo que lo convirtió en intrascendente por valorarlo como natural, instintivo e irracional y a los hombres la producción, la fuerza, la violencia, la inteligencia, la razón, el trabajo remunerado y la vida pública, lo que lo hace trascendente; es por ello que la desigualdad se justificaba como resultado de la diferencia sexual, por lo cual se construyeron mitos, creencias, estereotipos de lo que es ser mujer y ser hombre.

En consecuencia, es común pensar que las actividades y roles asignados a mujeres y hombres, al ser determinados por la naturaleza, no se pueden cambiar, por eso es necesario diferenciar lo biológico y lo social; ya que cada sociedad da un valor y un significado diferente a lo que representa ser hombre y ser mujer y cada una de ellas tiene ideas y creencias sobre lo que deben y no deben hacer hombres y mujeres; por ello se puede decir que las diferencias de género no son un resultado de lo natural o biológico, sino una realidad aprendida o construida socialmente.

Por esta razón en un contexto social ha sido necesario implementar en nuestro país políticas públicas encaminadas a mejorar muchas áreas de la vida cotidiana; educación, economía, salud, entre otros que se han cimentado en aras de la desigualdad; puesto que por años quienes han hecho las leyes, quienes han diseñado los modelos educativos, quienes definen los programas de bienestar social y quienes distribuyen los recursos económicos han sido hombres.

En lo que respecta al sistema educativo mexicano todavía es fuente de desigualdad

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (20 Kb)
Leer 12 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com