ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

LA METAFÍSICA La filosofía se divide en tres grandes grupos


Enviado por   •  18 de Noviembre de 2017  •  Apuntes  •  2.736 Palabras (11 Páginas)  •  353 Visitas

Página 1 de 11

                 LA METAFÍSICA

La filosofía se divide en tres grandes grupos:

  • Metafísica y Ontología: se ocupan de la realidad objetiva.

Pregunta o problema del ser.

  • Espistemología y la lógica: se ocupan del conocimiento.

Pregunta o problema del conocimiento.

  • Ética o filosofía política: las ramas del conocimiento que giran en torno al ser humano.

Pregunta o problema del hombre.

1. La pregunta metafísica: EL PROBLEMA DEL SER.

El problema del ser es la pregunta por esa realidad última que hace que las cosas sean lo que son y como son.

Aristóteles diría que es la pregunta por el ser en cuanto a ser, es decir, del ser considerado en aquello que es ser y únicamente ser, sus principios y sus causas.

La metafísica u ontología (estudio del ser) es la disciplina filosófica que se ocupa de esta cuestión.

Andrónico de Rodas (s.I a.C), director de la escuela Aristotélica, le puso esta definición.

Todos los filósofos (Aristóteles, Platón, Tomás de Aquino, Leibniz, Sartre,…) se han preguntado por el ser, aunque ningunas de las conclusiones han sido idénticas. Este desacuerdo da paso a la ambigüedad del concepto de ser, sin embargo esto no ha impedido que todas las filosofías pretenderán responder a esta cuestión.

Los griegos dan paso a las primeras reflexiones filosóficas, que empezaron siendo un esfuerzo por discernir entre lo que tiene una existencia aparente y lo que tiene una existencia real: una existencia en sí, una existencia primordial e irreductible a otra.

Este modo de ser constante y permanente es la esencia: es la que una cosa realmente es a pesar de sus posibles cambios de apariencia.

Los griegos establecieron unos conceptos como base de su explicación racional de lo real. Por una parte tenemos lo que hay de permanente en las cosas frente a lo cambiante:

  • Lo permanente constituye la esencia de las cosas frente a su apariencia; la esencia es lo que hay de idéntico o común entre seres con diferentes apariencias, por ello la esencia es el fundamento de la unidad apariencias, por ello la esencia es el fundamento de la unidad de las cosas frente a la multiplicidad de sus estados o apariencias.

Como conclusión, conocer realmente las cosas será conocer su esencia, es decir, lo que tienen de común y permanente.

Los griegos estaban convencidos de que los sentidos solo nos muestran una multiplicidad de individuos, de apariencias y de estados cambiantes; para alcanzar la esencia de las cosas es necesario un esfuerzo intelectual.

CLASIFICAR:

La actividad de clasificar se basa en la idea de que hay esencias comunes a una multiplicidad de individuos.

Basándonos en esta idea, clasificamos todos los seres del universo; pero el entendimiento humano no se detiene aquí, sino que se volverá a preguntar sobre los individuos de estos grupos.

Entonces el hombre pensará que todas las osas son variedades o estados de una misma substancia o de unas pocas primeras y elementales.

Esto nos indica que la idea fundamental de la búsqueda de la esencia es que todo el universo se reduce a uno o muy pocos elementos.

Los primeros filósofos se preguntaron por el principio (arché) o principios de la totalidad de lo real.

TALES DE MILETO: 1º

Tales de Mileto buscó cual sería el principio de todas las cosas; la cosa a la que confería la dignidad del ser, de donde derivan todos los demás; y él dictaminó que esa cosa es el agua. Para Tales de

ANAXIMADRO:

También creía que el principio de todas las cosas era algo material, pero indeterminado: lo llamó “ápeiron”. Era una cosa indefinida, pero que tiene la potencia de que de ella deriven las demás cosas.

ANAXÍMENES:

Anaxímenes indicó que lo que existe en sí mismo es el aire.

¿Qué es consistir? Consistir es ser aire. Todo consiste en aire, la esencia es el aire.

EMPÉDOLES:

Para salvar las cualidades diferenciales de las cosas, Empédoles propuso un origen plural: no es sólo una cosa de la que derivan las demás sino varias. Indicó que las cosas realmente existentes, de donde derivan todas las demás, son el agua, el fuego, la tierra y el aire, y los llamó elementos. Esta idea se mantuvo hasta el Renacimiento.

PITÁGPRAS: DE SAMOS:

Fue el primer filósofo que se le ocurrió que el principio de donde derivan las demás cosas es, algo inaccesible a los sentidos, el número.

Pitágoras puso especial atención en la estructura matemática del universo. Observó que múltiples propiedades de los seres reales pueden ser formulados matemáticamente y supuso que todos los seres lo que son y su comportamiento son formulables. Esto le condujo a afirmar que los principios de los matemáticos, los números, eran también los principios de todas las cosas.

HERÁCLITO:

Heráclito no estaba convencido con ninguna de las respuestas anteriores. A su juicio, si observamos atentamente las cosas que tenemos delante, no son las cosas que están siempre constantemente cambiando.

Heráclito proclama el fluir de la realidad: “Nunca nos bañamos dos veces en el mismo río”.

Todo cuanto existe es un ser dinámico, continuamente cambiante.

PARMÉNIDES DE ELEA:

Está en desacuerdo con la idea de Heráclito, porque no entiende como se puede decir que las cosas son y no son.

Parménides refuta estas ideas Heraclíticas, indicándonos dos vías de investigación.

  • La vía de la opinión: afirma que el “ser”, no es. Esta vía se funda através de los sentidos y es impractible.
  • La vía de la verdad: afirma que el “ser” es, y es imposible que no sea, y esto se funda a través de la razón.

Para Parménides esta tésis es absolutamente verdadera.

“Es necesario decir y pensar que el ser es, pero que el no ser no es”.

De esta tesis se derivan las siguientes afirmaciones:

  1. EL SER NO ES ÚNICO

Solo puede haber un ser, siempre el mismo y en el mismo lugar, porque si hubiese más de un ser habría alguna diferencia entre ellos, pues en caso contrario serían el mismo ser. Ahora bien, si hubiese alguna diferencia entre ellos, lo que es en uno, “no es” en el otro, así que estaríamos obligados a admitir alguna forma de no-ser. Pero si decimos que hay “no ser”, estamos diciendo que el “no ser” es; lo cual es un imposible, es un absurdo. Por lo tanto, el ser es único.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (16.9 Kb)   pdf (175.7 Kb)   docx (19.4 Kb)  
Leer 10 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com